Mi Historia Junto A Ti

Tu y yo en Punk Hazard. Parte 2

Había pasado unos minutos y Law sentía que aliarse con los "sombrero de paja" era una mala idea. Pero eran su única opción.
-¿Vas a traicionarme?
-No.- afirmo sin dudar, pero mintió. Si era la forma de salvarlo de su destino, lo haría sin dudarlo. El único que debía morir con Dofflamingo era él.
-¡Debes ayudarnos si quieres una alianza con nosotros!
-Lo que quiere hacer tu tripulación no tiene nada que ver con nuestra alianza.- le respondió.
-¡Alianza es como ser amigos!
"¿Amigos?" Aquella palabra rompió en pedazos la tensión que había sentido minutos atrás en la nieve. "Es lo mejor". Se dijo a sí mismo.
-Esta bien. Te ayudaré.

Los "sombrero de paja" se reunieron para organizarse e invadir el laboratorio. Mientras tanto Law esperaba en una esquina. Luffy caminó hacia él. Law se sintió inesperadamente tranquilo, "es como ser amigos" recordó.

Law le hizo una seña para que lo siguiera y una vez estando lo bastante lejos de las miradas curiosas, le dijo- Espero que te apegues al plan, es escencial secuestrar a Caesar.- Luffy asintió y dió un paso hacia él-. Puedes golpearlo pero recuerda que es un usuario tipo logia. Debes usar haki. Dile a tu tripulación que si no lo usan deben alejarse de él.- Luffy volvió a asentir y dió otro paso.- Es un usuario que puede envenenarte.- ansintio y se acerco más. Law iba a decir algo pero sintió que era peligroso. Luffy se rió en su cara. Acercó su mano a su rostro de la misma forma en que lo había intentado acariciar cuando estaba recuperándose en el submarino, pero se detuvo.

-¿Qué haces?- dijo Law molesto.
-Solo comprobaba
-¿Que cosa?- dijo intimidante-. Recuerda que soy tu enemigo no te acerques de forma tan descuidada.
-Somos aliados, no me atacarás y aunque lo hicieras...
-¿Dices que eres más fuerte que yo?- Luffy sonrió divertido.
-Estoy feliz que está alianza sea contigo. Empecemos como amigos.
-¿Qué quieres decir con eso?
-¡¿Ya terminaron?!- corrió hacía su tripulación sin prestar atención a la pregunta de Law.

Nadie en el pasado lo había dejado así. Por un momento quiso someterlo contra el piso y sacarle la verdad a golpes. Aunque estaba seguro de poder sobrevivir, no era momento para luchar contra él. Lo necesitaba. "¿Realmente lo necesito?" Se había aferrado tan fuerte a él que no pensó en seguir el plan por su cuenta. Ya era tarde. Solo podía seguir adelante aunque eso significara ceder a las peticiones de Luffy, desvíar sus planes e incluso sentirse avergonzado y fuera de lugar. "Todo sea para matarte, Dofflamingo".

Tomó consigo al médico de los "sombrero de paja" para investigar la droga que tenían los niños que usaba Caesar para sus experimentos y caminó hacia la nieve. Mientras se marchaba sintió los ojos de "sombrero de paja" clavados en su espalda. Le regresó la mirada con un gesto intimidante pero él solo desvío la mirada como si nunca lo hubiera estado observando. "¡Ahora me ignora!"- pensó irritado. Room. Shambles. Law se desvaneció ante los ojos de Luffy. Esa expresión de sorpresa le venía mejor a su rostro.

Law estaba acostumbrado a la planeación meticulosa, la obediencia casi perfecta de su tripulación, la infiltración silenciosa, el engaño y el homicidio sencillo y rápido. Por ello, no pudo evitar pensar que "sombrero de paja" era un estúpido al verlo llegar a la puerta del laboratorio gritando que secuestraría a Caesar. "¡¿Quien le dijo que causará alboroto?! ¡¿No tiene sentido común?!"- pensó- "ah, no lo tiene..."- se contesto a sí mismo.

Law respiró profundo y se resignó. Si no tenía cuidado terminaría vomitando sangre por puro enojo y frustración, y moriría antes de enfrentar a Dofflamingo.

Room. Shambles.

-En cuánto lleguemos a la oficina de Caesar sacaré a Monet, su secretaria. Te daré tiempo para que investigues.

El plan se ejecutó sin problemas. Sin embargo Law comenzó a experimentar un gran dolor en el pecho. Era su corazón. Escuchó pisadas provenientes de la oscuridad del pasillo. La presencia que se acercaba la conocía muy bien. Era uno de los subordinados de Dofflamingo. El temible Vergo.
-¿Cómo estás niño? Te convertiste en alguien importante.
-¿Qué haces aquí Vergo?
-Vergo SAN para tí.- dijo apretando el corazón que tenía en la mano.