𝐒||Audrey es una escritora exitosa, su vida es perfecta y está llena de cosas grandiosas, pero ....¿Qué pasara si de la nada aparecen sus hermanos y se enamora del ángel más buscado el universo?
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💯% mía
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N.AUDREY.
Delante de mí se encontraban dos chicos, ambos eran castaños, y parecían mantener un cierto parentesco.
Al contrario que el otro, uno parecía más simpático y el otro más serio.
-¿Quiénes sois?.—Les pregunté al fin.
-Drake y Marco Hepburn, ¿Te sonamos?.—Me preguntaron ambos a la vez.
-Pues la verdad es que no.—Les contesto.
-Es normal, Drake.—Le dice el otro castaño.
-Nosotros somos tus hermanos.—Me quedé confusa ante tal noticia.
-¿Mis hermanos? ¡No! Yo no tengo hermanos.—Me rió ante semejante tontería.
-Hace 18 años nos separaron, papá y mamá nos separó.—Siguen con la misma historia.
-Es imposible.—Me sigo riendo.- Mis padres nunca me han abandonado, es más, vivo aquí en Oregón, gracias a ellos.—Les explicó.
-Son tus padres adoptivos.—Suspiró Marco.
-¿Mis padres adoptivos?.—Agaché la cabeza.
Ahora resultaba que mi vida había sido una completa mentira, mis padres, mi historia, todo, había sido una mentira.
-Nos volvemos a presentar, yo soy Marco y él es Drake Hepburn.—Volvieron a empezar de cero.
-¿Podemos pasar?.—Me pregunta Drake.
-¡Oh, claro!.—Le respondo.
Les hago un hueco a ambos, dejándolos pasar al interior de la casa.
-¿Qué hacéis aquí?.—Les pregunto.
-Venimos a recuperar el tiempo perdido contigo.—Me contesta Marco.
-Supongo que necesito una noche para asimilar que vosotros sois mis hermanos.—Doy vueltas de un lado para el otro.
-Tomaté el tiempo que necesites.—Me dice Marco.
Tardo unos minutos en responder, pero tras darme cuenta de la situación actual en la que me encuentro, decido guiarlos hasta la habitación de invitados, proporcionándoles algo de espacio para ellos.
