"No me subestimes, me criaron lobos, no ovejas."
Leonnor Hale, o más bien conocida como Leo, se muda al pueblo de Forks junto con Isaac con la ayuda de su tío Peter y su hermano mayor Derek. Después de lo sucedido con el Nogitsune necesita procesar...
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POV's Isaac
Intentaba aparcar lo más cercano que podía desde el prado donde se iba librar la batalla. La canción de Down With the sickness dio entrada nada más hace un minuto, y podía notar tras mis sentidos que mi hermana y Jacob estaban calmados gracias a la canción. Hasta mi hermana susurraba la letra. No era de mi preferencia pero si podía ver una vez más a mi hermana calmada con sus canciones favoritas lo haría un millón de veces.
Aparqué y el primero en salir fue Jacob que después se puso en la puerta del copiloto mirándonos.
-Bajáis?
-¿Me das un momento con mi hermana? - le pregunté y él simplemente asintió con la cabeza.
Agarro la mochila de la escuela la cual estaba sobre el regazo de Leo, había ropa abrigadora como mantas para pasar la noche. Pude ver tras sus ojos como la veía de manera cariñosa a mi hermana y no pude evitar sentir pena por él, hasta me atrevía a decir que la mirada de mi hermana era igual de cariñosa pero mezclada con pena. Si este supiera lo que está por hacer haría como yo de mandarla a subir un avión o llevarla en coche a su hermano para que la pudiera proteger para cazar al maldito vampiro.
Cuando se marchó al final, me acomode para verla de frente.
-Tenemos tiempo para irnos corriendo, no creo que ni vengan a por nosotros - las comisuras de sus labios se elevaron pero no me miró.
-Sabes que yo nunca huyó. ¿Qué te hace pensar que esta será la excepción?
-Tu si has huido - al fin me miró, pero de reojo y arrugando la frente -. Irte de Beacon Hills es una forma de escapar. Y el que estés aquí con esta pelea es una forma de subir en un nivel en el cual sí que no estamos seguros si vas a salir viva o no.
-Te recuerdo que también estás en el ajo? - solo me encogí de hombros y ella frunció el ceño.
-Qué quieres que te diga? Nadie me espera en casa - me encogí en mi sitio cuando me golpeó el brazo y no pude evitar reírme.
-No digas esa puta tontería, soy tu familia - me dijo con molestia. La mire y vi como giraba la cabeza en dirección donde se fue Jacob -. Volvamos a casa - me miró de nuevo -, vamos con Derek.
-No puedo irme - le digo sonriendo de lado -, pero tú sí. Yo dudo que me dejen entrar de nuevo en la manada, ya me enteré de que tienen nuevos miembros, quizá sobre.
-No - hizo una mueca con la boca mirando hacia abajo -.Tu eres de la familia, siempre lo vas a ser y nunca vas a sobrar en ningún lado. Pobre de alguno que diga lo contrario.
No pude evitar sonreir con cariño, le tome de la mano y la lleve a mis labios para poder darle un beso. Ella me miro y pude ver como estaban un poco apagados y tristes.
