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La pelirrosa despertó gracias a los rayos del sol que se colaban por la ventana. Se dio una ducha rápida, tomó sus cosas, para finalmente bajar a despedirse de sus padres. Estos tenían un mar de lágrimas en sus ojos, pues sabían todo el riesgo que iba a tomar su hija única al irse con ese desertor. Se dieron un fuerte abrazo y la cerezo se fue sin mirar atrás, suspirando, pero decidida.

Llegó hasta el departamento de su mejor amigo, Naruto. Tocó la puerta, este abrió de inmediato.

-Sakura-chan, ¿qué haces aquí? Adelante, pasa.
Sakura entró y vio a su alrededor, tenía un completo desorden, basura de ramen instantáneo por doquier y no tenía muchos muebles, solo los indispensables.
-Naruto, necesito hablar contigo.
-Es sobre el teme verdad?
-Sí, me voy a....
Fue interrumpida por Naruto
-Sabes Sakura, sé que eres muy inteligente y sabes lo peligroso que es ir con Sasuke, él se ha vuelto completamente loco, temo que te haga daño.
-Si lo sé, pero él me necesita, debo sacarlo de la oscuridad y si no lo logro, en cuanto tenga oportunidad lo mataré.
-Sakura-chan, tú no debes ser la única que manche sus manos con sangre, en ese caso déjame apoyarte... hablaré con la abuela Tsunade cuando despierte para explicarle la situación y ver la forma de que tú obtengas el perdón y no se te acuse por relacionarte con él. Que sea una misión clase S.
-Te lo agradezco Naruto, si eso es posible... aunque si no me ayudan en eso no importa, estoy dispuesta a pagar mis posibles crímenes ya que Sasuke-kun es casi seguro que me pida cometer ciertas acciones que vayan en contra de mis principios, y estoy dispuesta a todo.
Debo irme, debo ir a buscar algunas plantas medicinales y con la aldea en caos va a ser más complicado.
-Sakura-chan, yo siempre te he amado, y si el teme te hace tan siquiera un rasguño, lo mato.
-No exageres Naruto, sé cuidarme sola.
-Me da impotencia no poder ir contigo...
Ya que si yo te acompaño sospecharia del plan.
-Adiós Naruto. Dijo la pelirrosa dejando escapar un par de lágrimas.
-Hasta pronto, Sakura-chan, dijo el rubio con un enorme nudo en la garganta. Se lanzó a abrazarla, tenía un mal presentimiento pero ojalá se equivoque.
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Pasaron los días, Sakura traía una caja llena de todas las hierbas que necesitaba, salió de la aldea para encontrarse con Karin e irse a la cueva donde estaba Sasuke junto con Tobi. Sakura no le dirigió ni una palabra a Karin en todo el camino, ya que aún se encontraba asimilando las cosas.

Al llegar, Sasuke estaba acostado en el suelo.
-Ahora si tengo todo lo necesario, Uchiha, ¿estás listo? Dijo Sakura con voz firme y seria, pues había optado por mostrar una actitud más ruda hacia él, por eso a partir de ahora le diría Uchiha.
-Empieza ya Sakura, ya no veo casi nada... dijo el azabache sin darle importancia a como lo llamaba ahora.

Procede Sakura a realizar la cirugía, quitó con cuidado sus ojos y le transplanto los de Itachi. El procedimiento duró casi todo el día ya que era difícil y arriesgado.

Sakura agotada se dejó caer en el suelo, por fin había terminado. Sasuke estaba inconsciente pues no despertaría hasta quizá un par de horas más. La pelirrosa lo observaba fijamente, se veía con un semblante tranquilo, calmado, aún le llamaba la atención pues no podía negar ese sentimiento en su corazón.

-Reacciona Sakura, se dijo así misma sacudiendo la cabeza con negación.

Karin se acerca a dónde están ellos, pues gracias a su detección de chakra pudo darse cuenta que la cirugía había finalizado. Le da un bote con agua a Sakura, pues la había notado cansada.

-Ten Haruno-chan, dijo Karin amablemente. Se acercó a su oído susurrandole: Madara no está, es tu oportunidad de hacer algo.
-No Karin, dijo Sakura tajante. Sé que es la solución más fácil pero aún tengo esperanza en que el cambie su forma de ser. Será difícil, pero creo que no es imposible.

-Haruno, yo viví en carne propia el terror. Quiso matarme!! No vale la pena, y mientras pueda te lo seguiré diciendo, pero tú sabes lo que haces. Tengo que ir a conseguir comida.
-Irás sola?
-Pues, le diré a Suigetsu y Jugo que me acompañen. Aunque no me agrada el idiota de Suigetsu pero debo tolerarlo ya que él es de mucha ayuda aunque no lo parezca.
-De acuerdo, yo me quedaré vigilando a Sasuke... digo a Uchiha, para hacerle las post curaciones con las hierbas medicinales.

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-Sakura.... ¿dónde estoy? Despierta Sasuke mirándo alrededor aún con la vista borrosa. Poco a poco se iba aclarando.
-No te sobreesfuerces Uchiha, necesitas seguir descansando. Ten, tomate esto.
-¿Cómo sé que no me vas a envenenar?
-JAJAJA No seas ridículo, Uchiha, sé perfectamente que eres inmune al veneno. Sería una forma estúpida de mi parte asesinarte así.
-Oye, recuerda tu lugar y a quien le hablas.
-Si crees que me voy a dejar de ti, estas equivocado. Así como tú me hablas, así te voy a hablar y tratar.
-No te conviene jugar con fuego, Sakura.
-¿Qué me vas a hacer? Matarme? No te tengo miedo, Uchiha.
-Ah no! Y ahora? La jala fuerte del brazo y la acerca a ella, mirándola fijamente a los ojos estaban muy cerca.
-Ejem... interrumpe Suigetsu. Ya regresamos Sasuke, conseguimos todo esto.
-Pónganlo por ahí. Sakura dame de comer, tengo hambre.
-Queee!! Dile a Karin que te dé, yo ocupo descansar. Se retira Sakura a dormir un poco.
-Ay no Sasuke, ni creas, no te daré ni Mierda, dijo Karin también llendose.
-Yo lo haré con gusto Sasuke, dijo Jugo amablemente.
-Jugo déjalo así... solo acercame la comida. Dijo Sasuke, estaba experimentando un nuevo sentimiento, de rechazo... como era posible que las mujeres ya no le hicieran caso al gran Sasuke Uchiha. Estaba comiendo pero disgustado.

Determinación Color Jade (Colega)🌸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora