All is fair in the game called love [TRADUCCION]

Capítulo 25: ¿Feliz San Valentín?

La autora de Harry Potter es J.K. Rowling

La autora de esta obra es SasuNarufan13, esta obra NO es mía solo me encargo de traducirla con el permiso de autora. No se permiten adaptaciones.

Cuando Snape le dijo a Draco que colocara a Harry en su sofá, resultó bastante difícil, porque Harry se negaba a perder su agarre sobre Draco. Finalmente se decidió que Draco se sentara en el sofá con Harry en su regazo. Sirius y Remus se sentaron a cada lado de Draco, frotando tranquilamente la espalda de Harry. Sapphire, Rubí y Garin estaban acurrucados a los pies de Draco, aparentemente dormidos.

Tras una breve búsqueda en sus armarios, Snape volvió con un frasco transparente que contenía un líquido azul y burbujeante.

"Potter, necesito que bebas esto, antes de que mueras de hiperventilación", dijo Snape despreocupadamente y le entregó el frasco.

"Tienes una forma tan bonita de convencer a la gente, Snivellus", dijo Sirius con sarcasmo.

Snape señaló a Harry, que hacía todo lo posible por beberse todo el frasco. "Funcionó, ¿verdad?".

Sirius resopló, pero no replicó.

Un minuto después, la poción hizo todo su efecto y Harry empezó a calmarse hasta que se limitó a recostarse contra el pecho de Draco, dibujando patrones en él.

"Harry, ¿puedes decirme quién te atacó?" preguntó Draco suavemente, con el pulgar rozando el hueso de la cadera de Harry de forma tranquilizadora.

Harry respiró hondo y se mordió el labio inferior. Se sentía somnoliento; la combinación de gritos y revivir sus pesadillas de estar encerrado en el armario con el Calmante era dura para su cuerpo y su mente agotados.

"Era Ron con otros dos chicos. No pude ver sus caras, porque se mantenían fuera de mi visión", contestó finalmente y siseó al sentir un pinchazo en la mano.

Remus lo miró disculpándose. "Lo siento, pero tengo que limpiarte estas heridas de las manos, antes de que se te infecten", murmuró suavemente.

Harry asintió y trató de mantener la mano quieta mientras Remus se ocupaba de ella. Ahora que su atención se centraba en ella, le dolían las manos. Bastante, en realidad.

"¿Reconociste sus voces?" preguntó Snape.

Harry negó con la cabeza, contento de tener una distracción del punzante dolor. "No, lo siento."

"Bueno, al menos sabemos que Weasley era uno de ellos", murmuró Snape, que ya estaba tramando formas de convertir el castigo en un infierno para aquel chico. Fregar calderos no era suficiente en este caso.

"¿Ya estás bien?" susurró Draco al oído de Harry.

Harry asintió. "Siento que hayas tenido que verme así", le susurró, avergonzado por su comportamiento.