UNHOLY MC#1 (Borrador)

Capítulo 2: Propuestas y vasilaciones

"Ningún medicamento debe de controlarte, sé que eres fuerte. Demuestra me tu jodida fortaleza".

Lo primero que hago en Italia es ir a comer algo y que lugar más perfecto que el restaurante que bloqueaba mi vista en la habitación. Al ser un poco más tarde se puede notar que ya hay muchas personas, por lo que, pido la especialidad del restaurante. El sabor era muy bueno y me hizo olvidar mi odio momentáneo por bloquearme mi paisaje.

Al salir me encandilo un poco, el día está muy soleado. A lado veo una tienda de chocolates cuya marca nunca había visto en México así que entro y siento que me pierdo horas probando y comprando todo lo que puedo.

Guardo mi compra en la mochila y voy al punto de encuentro para el recorrido que venía en el paquete. El encargado del Tour es un hombre entrado en años con una buena pronunciación en inglés, hay al menos diez turistas aparte de mí que no dejan de tomar fotos a todo el lugar al que vamos.

Llegamos a la plaza Navona la cual es muy elegante y hermosa, la fuente es espectacular por lo que saco mi celular y le tomo fotos.

No era una persona muy social, en lo personal siempre he preferido la soledad que el estar acompañada, pero en otro país, decidí ser sociable con los desconocidos y acercarme a otra turista que al parecer era estadounidense.

Ella estaba parada observando el lugar con una sonrisa. Me acerque a ella pensando que decir, pero digo lo primero que se me ocurre.

― Está muy caluroso, ¿Verdad? ― ¿En serio estoy hablando del clima? Creo que fue un mal inicio para entablar una conversación.

― Bastante diría ― la chica tiene acento que no reconocía muy bien, tal vez era sureño, era un poco más alta que yo, de cabello negro, tez blanca y traía unos lentes negros que ocultaban sus ojos. Iba vestida con un shorts pequeño que dejaba ver un tatuaje con tres mariposas; y una camisa blanca larga que tenía un nudo en su cintura y unos tenis azules, pude apreciar una tobillera con unos pequeños dijes, entre ellos una computadora y unos guantes de boxeo. Era muy lindo.

Pensé que era todo lo que diría sin interesarse a seguir la conversación por lo que iba a tratar de hablar con alguien más.

Tal vez él chico que estaba a un metro estuviera interesado en salir por ahí, al fin y al cabo, llevaba rato mirando en mi dirección.

― Pero prefiero mil veces el calor en Italia que el calor en Texas, ¿De dónde vienes? — me comenta, decidí quedarme un rato más con ella.

― De la ciudad de México. ¿Y tú, entonces eres de Texas?

― Nacida y criada ahí. Por cierto, soy Jane Doeller― Me dice extendiendo su mano.

― Un gusto, Soy Natalia Méndez― estrecho su mano.

― Entonces, ¿Viviste toda tu vida en México?

― Nací en Estados unidos pero mis padres son originarios de México, me sentía curiosa por el país y decidí conocerlo por mí misma. ― le informé recitando la respuesta en automático, omitiendo partes que obviamente no le dirías a un extraño a minutos de conocerse.

― ¿Y qué te parece?, las ocasiones en las que he visitado el país me ha parecido fascinante y alegre.

― Ahora que he tenido la oportunidad de vivir y trabajar ahí ha sido magnifico, hay cosas que no me gustan, pero por lo general siento la vida menos pesada que en california ― le comento, mientras nos separamos un poco del grupo, pero sin alejarnos de nuestro guía.

Pasamos el rato juntas y me doy cuenta que la cualidad  de Jane es ser muy simpática. Ella también viene sola a este tour por lo que decidimos ser la compañía de la otra, ambas nos sacamos fotos en los lugares a los que visitamos.