Volviéndote mi omega (Vegaspete)

Cap. 8: Dando la feliz noticia

El teléfono de Vegas sonó, una llamada entraba, pero él lo ignoro dejando el dispositivo a un lado. Se acomodó nuevamente dejando al pelinegro sobre su pecho desnudo. Se habían dormido tarde por la emoción del embarazo, lleno de felicidad había pasado horas besando al omega hasta que el sueño los domino. No sabía qué hora era, no le importaba, solo quería seguir abrazando el cálido cuerpo. Los latidos del corazón ajeno le transmitían paz, si pudiera, permanecería así por mucho tiempo.

-Mmm - el sutil sonido del omega genero una sonrisa en el castaño, lo vio estirarse como si fuera un pequeño cachorro y girar su rostro moviendo su mejilla sobre su pecho - buenos días Vevs.

-buenos días hermoso- se inclinó dejando un beso rápido en la frente de este, lo escucho reír y amplio su sonrisa- te ves radiante.

-¿Radiante? ¿Eso quiere decir que me veo bien?

-siempre te ves bien, hoy... te ves impresionante.

Pete lo miro un momento, su sonrisa creció al punto de que Vegas sintió que se eclipsaba, tras eso se movió hacia adelante hasta alcanzarlo y dejar un beso contra sus labios.

-vos te ves muy contento hoy ¿Lo estás?

-claro que lo estoy ¿Cómo no estarlo cuando te tengo junto a mí, con mi cachorro en tu vientre?

Pete lo miro un momento, luego tomo su mano y la movió hasta acercarla a su vientre, la leve hinchazón que le había molestado antes lo ponía feliz ahora ¿Su cachorro estaría creciendo allí?

-nuestro cachorro crece dentro ¿No es increíble?

-vos lo sos- pegándolo acaricio su vientre para luego reclamar sus labios en un beso dulce y lleno de emoción. Cuando se separaron su sonrisa reapareció- ¿Estás listo para levantarte?- Pete negó haciendo un puchero que lo lleno de ternura- vamos ¿No tenes hambre? Nuestro cachorro te necesita fuerte.

-Vevs- sentándose en la cama lo miro con seriedad, él espero atento a que siguiera- ¿Cómo lo vamos a llamar?

-¿Ya queres ponerle un nombre? ¿No es algo pronto?- dijo divertido- tendrás... un mes y un poco más.

-no, no, yo quiero ponerle nombre mientras esta en mi pancita- toco la misma para dejar claro el mensaje- seria lindo decirle de una forma que no sea cachorro ¿No crees?

-mm supongo. Si queres hacerlo lo hacemos- lo abrazo pegándolo a su cuerpo, le encantaba sentirlo cerca.

-¡Sí! Hagámoslo, tal vez... ¿Puppy? No, suena tonto ¡Cosita! No, ese es peor- rio.

-podemos tomarnos un tiempo mientras lo pensamos ¿No?- inclinándose un poco se acercó hasta que su rostro toco el vientre del omega- amor, trata de aguantar hasta que papi esté listo para tenerte, tenemos que ponerte un apodo aun, pero ya te queremos un montón- alzo la mirada sonriente cambiando el gesto al ver los ojos llorosos de pelinegro- bebe ¿Qué pasa? ¿Por qué lloras?

-porque... estas siendo tan lindo conmigo y más aun con el cachorro- se pegó a él soltando un fuerte sollozo- gracias Vegas, gracias por querernos tanto.

Sintiéndose emocionado lo pego a su cuerpo envolviéndolo con dulzura- no podría ser de otra forma, siendo vos, con vos, no puedo evitar quererlos- un beso en la frente fue todo lo que se necesitó para tener a Pete pegado y mimoso sobre él- entonces... ¿Comida?

-Mmm, llévame- estiro los brazos buscando ser cargado, Vegas rio cumpliéndole el capricho. Lo tomo de la cintura mientras se levantaba, lo sintió envolver sus piernas a su alrededor y lo llevo hasta la cocina. Apenas lo apoyo en la mesada que recientemente habían adquirido intento soltarse, pero este no lo dejo- no, no me dejes.