Rubelangel (cortos).

El Cine

RUBIUS:

-Te digo que esa tiene mala pinta-me dijo Mangel. Estabamos en el cine, viendo la cartelera. Teniamos que ver cual pelicula podiamos elegir. Aunque, la verdad, ninguna era linda. Me estaba comenzando a cabrear, no soy alguien paciente a la hora de elegir algo.
-Vale, ¿entonces cual quieres ver?-le pregunte. Todavia habia algo de cola delante de nosotros. Unas...Cinco personas, estaban vestidas con abrigos de vestir. Yo traia mis vaqueros ajustados de color negro, algo desteñidos. Mis zapatillas blancas con azul, mi remera de mangas cortas de color verde con detalles negros, y mi campera color lavanda azulado.
Mangel, como siempre, solo estaba vestido con negro. Su remera negra con azul oscuro, su campera de lana negra, sus zapatillas negras, y sus vaqueros desajustados negros. Tiene esa mania de vestirse asi, desde antes que nos pusieramos en pareja. A veces se pone algo en plan; azul oscuro, o por el estilo. Pero la mayoria de las veces es negro. Solo negro.
Tanto que eh llegado a amar el color negro.
-Este...¿Quieres ver "Percy Jackson y el Ladron del Rayo"?-me pregunto Mangel mirandome fijamente. Solo quedaban dos personas delante de nosotros.
Y la fila avanzo.
-Vale, si a ti te gusta, esta bien-me sonrio, y se acerco para besarme. Pero me aleje-. Tio que estamos en publico.
-Coño-y disimuladamente, hizo como si me estuviera viendo el ojo. Y me lo toco, como si tuviera una basurita.
La fila volvio a avanzar, y el chico de la boleteria, nos pregunto:
-¿Que pelicula vais a ver?-y sonrio. Sus ojos se achinaron un poco. Tenia ojos tan negros, que no podias diferenciar la pupila de iris.
-Dos boletos para "Percy Jackson y el Ladron del Rayo", por favor-dijo Mangel y le sonrio tambien. Saco su cartera, y de dentro cogio veinte euros.
-¿Lo vais a acompañar con palomitas?
-Este...¿si?-dijo Mangel mirandome. Asenti con la cabeza, y le quite los veinte euros de la mano. Me miro confundido.
Saque mi cartera, y saque yo veinte euros. De ninguna manera dejaria que Mangel pagara.
-Gracias-dije dejando el dinero en el mostrador, y tomando los boletos-. Y querriamos una gaseosa.
-¿Puede ser Coca-Cola? No me queda otra marca-dijo el chico. Asenti. Nos paso dos botellas, y dos pajitas. El chico guardo el dinero en la registradora, y le di la botella a Mangel.
Nos alejamos, y Mangel me miro raro.
-Te dije que yo invitaba al cine, cojones-dijo. Suspire, y le pise el pie. El articulo un quejido de dolor.
-No dejaria que gastaras veinte euros, jamas, tio.
Entramos a la sala dos, donde una chica de pelo castaño, algo baja, y mona corto nuestros boletos.
-Bienvenidos, y disfruten la pelicula-dijo ella amablemente.
-Gracias-susurro Mangel.
La sala estaba oscura, y habia poca gente en la sala. En los costados, hay escaleras, para que asi la gente pueda acceder a las butacas mas arriba, ya que en el frente hay un barandal enorme. Nunca supe para que era, tampoco me interesa.
-¿Donde nos sentamos? La tia no dijo nada-le dije. Aqui, en Madrid, te sientas en el cine por el numero de tu entrada. Se que en algunos lugares, no es asi.
-Rubius, que casi no hay gente. Sientate donde sea, coño.
Subimos por lo menos cinco peldaños, y caminamos entre las filas de butacas, hasta encontrar el medio de la sala, donde estabamos alejados de la poca gente que habia.
Mangel y yo solemos comentar las peliculas, y cada vez que venimos al cine, nos sentamos lejos de la gente, donde no escuchen nuestras conversaciones.
-Aqui esta bien-dije sentandome. El se sento a mi lado. Las luces se apagaron, y comenzaron los anuncios en la gran pantalla. De comesticos, restaurantes, etcetera. Despues comenzaron los estrenos. Este es el momento donde Mangel y yo solemos hablar, o usar el movil para decir en Twitter que estamos en el cine. Porque a la gente le interesa eso.
Pero hoy no lo hicimos.

Cuando llevabamos por lo menos, mitad de pelicula, senti algo caliente cerca de mi mano. Sinceramente, no sabia que era, y comenze a asustarme. Mire a Mangel de reojo, pero por la oscuridad, no podia verlo con claridad.
Despues, unos dedos se entrelazaron con los mios. Baje la vista, y era la mano de Mangel. Si, estabamos cogidos de la mano en medio de pelicula.
-Perdoname-susurro. Lo mire, y puse los ojos en blanco.
-Coño, Mangel. Ya te dije que no fue tu culpa-se quedo mirandome, y sin soltar mi mano, me beso. Me quede petrificado, aunque no me aparte. Joder, ¡estamos en publico!
-Enserio, perdoname. Fui un idiota por no acordarme, y en realidad...Anoche no pude dormir por pensar en esto-confeso. Senti un nudo en la garganta.
-Mangel, la culpa fue mia por haberte tratado asi, cuando ya sabia lo predecible. Mangel calmate, ¿si? Enserio que no es nada-le dije. Su cuerpo se relajo visiblemente.
-Besame.
-¿Que?
-Si me besas sabre que enserio me has perdonado-dijo.
-No, estamos en publico.
-¿Tanto te molesta darle un beso a tu novio?-dijo algo ofendido.
-En publico, si-admiti-. Me pone de los nervios que alguien nos pueda ver.
-Rubius, te eh dado mas de...-y se, que hablara como nunca en la vida, asique lo tome del rostro y lo bese. Mangel me tomo de la cintura, y me acerco mas a el, o por lo menos hizo mas pequeño el espacio que nos separaba el apoya-brazos de la butaca. Yo le rodee el cuello, y le meti las manos entre el pelo, aferrando mechones con mis dedos.
Estubimos asi un largo rato, hasta que Mangel se levanto, y se paso a mi butaca. Me levanto, y se sento. Luego hizo que yo me subiera arriba de el.
-Ma...Mangel, para-susurre nervioso.
Metio su mano por debajo de mi camiseta, y me acaricio el torso lentamente. Sus manos estaban calientes, me hacian cosquillas.

Llegamos a casa, besandonos. Mangel me sacaba la campera, mientras me empujaba hacia atras, besandome el cuello.
Me tiro al sofa, y se coloco encima de mi. Comenzo a chuparme la oreja, mientras sacaba mi remera y mi vaquero. Yo baje el suyo, y comenze a jugar con el elastico de su boxer. Paso la lengua por mi cuello, hasta quw baje su boxer. Abrio mis piernas con su rodilla, y comenzo a penetrarme lentamente.
Gemi, y cerre los ojos fuertemente. Se movia...demasiado rapido, a lo que estoy acostumbrado.
-Mangel, coño...Despacio, que me haces daño-susurre nervioso.
-Lo hare despacio...Despues-dijo jadenado, y aumento la velocidad. Gemi fuertemente, mi respiracion y la suya eran acelaradas, estaba comenzando a faltarme el aire.
-Ma...Mangel, coño...-susurre.
-Rubius, no aguanto-dijo claro, y se corrio dentro de mi. Clave mis uñas en su espalda, y ahogue un grito.
No tenia mucho aire para gritar.
Mangel cayo encime de mi, jadeando cerca de mi oido.
-¿Estoy disculpado?
-Totalmene-le respondi. Y rio un poco.

Ejhe, pos aqui otro cap ahre. Me gusta mucho escribir, me saca de toda la pelotudes que tengo en la cabeza ahre
No se cuando publicare otro, pero pongamos que poco ahre
Disfrutadlo :3