𝔼𝕝 ℂ𝕠𝕟𝕕𝕖 𝕁𝕖𝕠𝕟 → KOOKMIN → OMEGAVERSE

Traición / Veinticuatro

Capítulo 24 – Traición

POVS JIMIN

Intenté ignorar esos estúpidos rumores que decían que habías caído en batalla, pero eso sin dudas me superaba. Me levanté corriendo de la cama y agarré a Hyuna en mis brazos… comenzamos a correr, ella no podía parar de llorar y yo no podía consolarla, ya que estaba por seguir el mismo camino. Hoseok y Taehyung nos acompañaron y cerraron la puerta, fue casi como una despedida cuando se marcharon… solo tapé los ojos de mi niña, porque ella era mi hija, la tuya y mía, y de nadie más.

¿Dónde estabas Jungkook?¿Qué te habían hecho?¿Quién te había traicionado?¿Íbamos a morir?

“Mimi ¿Qué está ocurriendo?”

“Tranquila bebé… tranquila…”

La sostuve y abracé lo más fuerte posible, le tapé los ojos al oír un fuerte golpe en la puerta. Se podía oler ya la madera quemada, la sangre derramada, el vapor de la lluvia mezclada con el fuego.

“Mimi ¿dónde está papá?¿Vamos a morir? – Hyuna me preguntaba mientras comenzaba a llorar y apretaba mi espalda… ya no podía más y me estaba rompiendo el alma. No era justo que con su escasa edad tuviera que vivir todo esto.

“No vamos a morir Hyuna, respira hondo, y pase lo que pase no abras los ojos… encontraremos un lugar para esconderte, pero lo más importante… no salgas”

Mis instrucciones fueron claras y ella asintió con la cabeza. Suspiré profundamente y me prometí a mi mismo que sería fuerte. Protegería a mi niña, pase lo que pase.

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“Apártate Yoongi” - me desperté en mi escondite de una larga siesta cuando la oí: la voz de Jaebum, amenazando a quien era nuestro último protector -  “fue un placer hacer negocios contigo, pero hasta aquí llego nuestro convenio”

“Estás loco Jaebum… nuestro convenio se terminó el día en que te volviste un idiota y un traicionero”

“No me hagas reír… no he traicionado a nadie. Jungkook traicionó a su país al emparejarse con un omega sureño. Solo le estoy dando su merecido”

“Jungkook es mi primo y lo defenderé hasta el final” - Yoongi se interpuso entre Jaebum y nosotros, con toda valentía.

“Jungkook ya está muerto… yo mismo lo maté, no me representa ningún problema apoderarme de su maldita prostituta, así que no se de que me estás hablando”

Las palabras de Jaebum se clavaron como dagas en mi pecho. Tú no podías estar muerto, definitivamente no. Mi vínculo aún estaba vivo, latiendo por nosotros, diciéndome que volverías, para cumplir nuestro sueño de ser felices juntos.

“¿Entonces para qué mierda vienes aquí? Si Jungkook ya murió, el trono es tuyo… déjame llevarme a mi sobrina ¡ella jamás reclamará su puesto!¡No es tan basura como tú!” – Jaebum no iba a responderle, lo sabía, no estaba aquí solo para matar a la niña, sino también para llevarme a mí - “lo ves… no tienes nada que decir, por que tengo razón, porque vienes por él”

“Cierra la maldita boca… y córrete si no quieres correr el mismo destino que el idiota de tu primo…”

“Así… ¿Tan fácil? Tú y el viejo presumido de Choi se cargan a la gente ¡que asco me dan! traicionaron a mi primo, me traicionaron a mi, traicionaron a mi gente, y todo por intereses personales…”

“No planeaba matarte a ti también… pero veo que será necesario”

Jaebum desenvainó su espada, sin contar que Yoongi también llevaba la suya.
Comenzaron una pelea que no tendría fin con facilidad. Ambos eran muy buenos espadachines pero había una pequeña diferencia, Yoongi estaba solo, mientras que el general no. Aproveché aquella distracción para salir corriendo con la niña hacia la habitación próxima, no quería pensar en nada más que no fuese poner a Hyuna a salvo. Mi corazón estaba roto, por toda la destrucción a mi alrededor. El solo pensar en los sirvientes me heló el corazón… temiendo el peor final para ellos.