Hace dos días: 5 horas antes de la verdad.
Hoseok estaba despertando con un rayo de sol dándole junto y directo en la cara. Eso le estaba molestando, por lo que se tapó más con aquella cosa de dudosa procedencia para cubrirse sus ojos. Le dolía la cabeza, así que no podía pensar en nada más que volver a dormir.
Pero el dolor punzante se hizo aún más presente, y poco a poco, Hoseok comenzó a estar lucido. Entonces, como si fuera el peor chiste, recordó lo de ayer: su desastroso intento de ser cantante, su confesión borracha de como su vida era un asco hacia Taehyung y como a este último lo había mirado con corazones volando de su cabeza.
Mierda, ¿no se suponía que los borrachos olvidaban lo que paso ayer?
Si bien no es como que recordara los detalles, estaba seguro de como habían sucedido las cosas.
Bien podría superar su desastre de cantante, pero no el hecho de haber sido crudamente honesto con su vida.
Estaba bien si fuera honesto con alguien como su madre o alguien con quien entablara una relación de hace más de 5 años por lo menos, pero jamás se le había ocurrido, hasta ayer, que, como un loco, había contado toda su desgraciada vida a un desconocido, guapo y mafioso para variar.
Hoseok estaba comenzó a creer que tenía un problema neuronal o algo por el estilo.
Estaba comenzando a sentirse realmente mortificado por todo lo que salió de su boca horas atrás, aunque...
Taehyung no había sido un idiota total como lo había previsto.
Si sus recuerdos no fallaban, Taehyung había sido muy asertivo al momento de aconsejarlo, o más bien, brindarle consuelo. No lo había juzgado y había dicho algo que era verdad: mandar a la mierda todo y hacer lo que quisiera sin hacer caso a lo que los demás digan. Y aunque fuera difícil seguir tal cosa, fue reconfortante el hecho de que alguien tan poderoso como Taehyung se lo dijera; era como si hubiera estado esperando que alguien se lo dijera para al fin tomar cartas en el asunto. Suponía que lo necesitaba para dejar de pensar que todos sus deseos estaban mal, y cuando Taehyung le dijo eso... fue inevitable no mirarlo esperanzado y sumamente agradecido. Casi como si empezara a sentir...
Y ese es el problema.
Quería creer que era el hecho de estar demasiado solo todo este tiempo y el que tuviera baja autoestima, sumado con el hecho de haberse sentido despreciado toda su vida, llenándose de cuestionamientos a su paso; había influido de alguna manera en ver a Taehyung esa noche. Porque no podía explicar el hecho de que su corazón latiera de manera frenética al recordar sus palabras sinceras y en como no lo había dejado solo, aun cuando se veía ridículamente miserable. Era la primera persona (ni su ex novia lo había escuchado hablar de sí mismo y sus problemas por mucho tiempo, conociendo la mitad del verdadero Hoseok, debía ser honesto), que no lo repudiaba a la primera o le decía que era demasiado raro, o peor aún, ignorarlo, hablando de otra cosa para no tener que escuchar sus lamentos. Aun con sus chistes malos, se había quedado al final, y Hoseok tenía que reconocer aquello.
No quería creer que estuviera siendo raro de repente, despertando un lado de él que jamás antes hubiera conocido.
No, debía ser la borrachera, la luz de luna reflejando el varonil rostro de Taehyung, mas las palabras de aliento que le dijo, su falta de autoapreciación, y...
¡Agh! ¿Por qué la mente de Hoseok tenía siempre que complicar todo?
No sentía nada raro con respecto a las palabras bonitas de Taehyung ayer, solo era un buen consejo después todo, y nada más. Ese era el final y no tenía que sobre pensar en eso y sentirse mareado cada vez que lo recordaba y las cosquillas en su vientre.
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Dos tontitos en fuga
HumorEntonces te encuentras en la situación donde debes de seguir a un tarado que "secuestró" a su ex novia, para luego ser perseguido por el novio actual de esta y toda su banda criminal en represalia por lo cometido (se llevó el auto como garantía, por...