¿Raúl...?

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Fui a comer con Vicky, Bea y Raúl a un Mc Donald's que había a pocas manzanas de nuestro instituto. Seguía dandole vueltas en mi cabeza a las palabras de mi profesora Andrea, "tiene que ser algo muy grave para que una profesora te invite a su casa", pensé. Pero bueno, eso lo descubriría mañana, ahora había que disfrutar de la comida, y del poco tiempo libre que nos dejaban los exámenes. Iba andando por la calle con Bea, ya que decidimos encontrarnos con Vicky y Raúl ya en el restaurante. Notaba que quería contarme algo, pero no encontraba las palabras o al momento, así que decidí preguntarla:
-Bea, ¿quieres contarme algo...? -pregunté-
- No... Bueno en realidad si. -contestó preocupada-.
- Pues cuéntame. -insistí-
- Es... Sobre... P.P...
- Te escucho.
- Se quien es...
- ¡Pues tía cuéntamelo!
- Es... Es... Raúl...
Me quede sin habla, ¿Raúl? Imposible, no podía ser, es como mi hermano... Bueno... Ahora que lo dice... Esta semana ha estado muy cariñoso conmigo... Quizás demasiado... ¡RAQUEL NO, YA ESTÁS SIENDO MELODRAMÁTICA! A ver, pensemos, esto tendrá su correspondiente explicación.
- Pero Bea, como va a ser Raúl... Si es gay, y tu lo sabes.
- Lo se Raquel pero... Le vi con un papel cerca de tu taquilla... Y que yo sepa, el sabe el código de tu taquilla... No se, yo no te lo he querido decir antes para no estropear vuestra amistad pero al ser tu mejor amiga he sentido que debía decírtelo...
- No me lo puedo creer...
Esta noticia se me quedaba grande, no me lo esperaba, aún seguía sin creérmelo, ¿fingió su homosexualidad? No lo sé, pero si lo hizo, finge muy bien, y si me ha mentido en esto... ¿En que más cosas ha podido hacerlo?. Decidí tranquilizarme, todo esto tendría que tener su explicación, así que antes de decir nada y de confirmar nada, esperé a llegar al restaurante para hablar con él como personas normales, y no por mensajeros.
Al fin llegamos, ya habían cogido mesa, y refrescos para los cuatro, para Raúl una Coca-Cola normal, para Vicky agua, para Bea una Coca-Cola Light (según ella, es por que tenía que cuidarse para el verano, estaba haciendo la "operación bikini" esa, estaba obsesionada.) y para mi un Fanta de Naranja, mis amigos me decían que era una pesada, que cuando saliésemos de fiesta, estaban convencidos de que en vez de pedir una copa, pediría Fanta.
Decidimos pedir, hicimos dos turnos, Vicky y Bea irían primero, y Raúl y yo iríamos después, al quedarnos solos, decidí hablar con él, ya que estábamos sin las chicas y sentía que si aquello era verdad, debería ser algo solo nuestro. Pero antes de pronunciar ninguna palabra, Raúl corto el silencio de inmediato.
- Raquel tengo que confesarte algo muy importante.
Esas siete palabras se me quedaron grabadas, iba a ser verdad, lo que me contó Bea era cierto, no me lo podía creer, ni aunque me lo estuviese reconociendo el mismo a la cara, no sabia si estaba confundida, frustrada... No lo sabía, me impactaba que él fuese P.P, es como mi hermano... Y estaba enfadada, realmente decepcionada, me había mentido, y sinceramente no me lo esperaba. Y en ese momento me dijo...
- Raquel es que yo...

Un destino inesperadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora