CAPITULO 2: La Bestia Del Espacio

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AÑO 2025

12 de Enero

Málaga, España - Hora 9:01 pm

El centro de la ciudad de Málaga se encontraba sumido en un caos indescriptible. Las calles estaban repletas de escombros y humo, mientras los bomberos se esforzaban por rescatar a las personas atrapadas entre los edificios derrumbados. El desastre y la destrucción habían dejado una huella palpable de angustia en el aire.

El piloto terrorista salió apresuradamente de un edificio en ruinas, su rostro reflejaba una profunda preocupación mientras sostenía su dispositivo de comunicación.

—Señor Salvatore, le tengo malas noticias. El cristal no está en el edificio más alto de Málaga —informó, su voz llena de tensión.

La voz de Salvatore del otro lado de la línea reveló una mezcla de incredulidad y frustración.

Imposible, debe de ser una broma —respondió, sus emociones oscilando entre la sorpresa y la negación.

El piloto continuó explicando la situación con urgencia.

—Los guerreros están luchando y están en busca del cristal en otras partes de la ciudad. ¿Qué recomienda hacer ahora? —preguntó, su voz cargada de ansiedad y la necesidad de dirección.

Salvatore tomó un momento para reflexionar, sus emociones luchando por encontrar una solución en medio de la adversidad.

Tenemos que cambiar al siguiente plan. Retírense y vuelvan a la base —ordenó Salvatore transmitiendo la necesidad de adaptarse a la nueva situación.

El piloto asintió, su expresión reflejando la urgencia de la orden mientras se preparaba para llevar a cabo el cambio de planes. La ciudad de Málaga se mantenía en caos, y el destino del misterioso cristal seguía siendo incierto, creando una atmósfera de tensión y anticipación en medio del tumulto.

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El nombre "Tomas Salvatore" resonó en el aire, y una mirada de reconocimiento cruzó los rostros de los soldados. Era un nombre que habían escuchado antes en los círculos de inteligencia. La revelación provocó una mezcla de emociones: curiosidad y preocupación.

—Tomas Salvatore... —murmuró el capitán, su voz cargada de pensamientos en rápida marcha. Su ceño fruncido mostraba la preocupación que sentía.

—Eso no puede ser una coincidencia —agregó Andrew, sus ojos entrecerrados mientras su mente trabajaba para conectar los puntos. Una chispa de sospecha brillaba en sus pupilas.

Morales apretó el agarre de su pistola, sus emociones un torbellino de desconfianza y preocupación. La mención del nombre de Salvatore desencadenó una sensación de urgencia en el grupo. Había mucho en juego, y necesitaban entender la verdadera naturaleza de este cristal y por qué Salvatore lo deseaba con tanta ansia. Sus ojos reflejaban la tensión que recorría su cuerpo.

La llegada de una noticia escalofriante interrumpió la conversación, y una soldada compartió información preocupante.

—Capitán, me comunican que la bestia está cerca de aquí, necesitamos refuerzos —comentó una soldada, con un tono de voz cargado de preocupación y temor.

—De nada les servirá traer refuerzos. Nuestro jefe tiene un gran arsenal que para ustedes, será inútil vencernos —dijo el enmascarado Likhan, su voz resonando con un aire de desafío.

—Sera mejor que te calles si aún quieres conservar tu vida, nosotros no te tememos a nada, ¡me oíste? —reprochó Andrew, con una furia apenas contenida en sus palabras.

Mercury-Man: Sociedad💎Secreta™Donde viven las historias. Descúbrelo ahora