Sasha Arryn y su hermano habían llegado a Desembarco del rey para poder darle el último adiós a su padre. Fueron acompañados por caballeros del valle y señores
Se despertó con el sonido de las campanas, frotó los ojos y se incorporó, había pasado la mayor parte del camino dormida recargada a su pequeño hermano.
—Sasha, hemos llegado a Desembarco del Rey- dijo el pequeño de un chillido emocionado.
Sasha sonrió levemente. Su aspecto era terrible, tenía los ojos hinchados y rojos de tanto llorar, sentía que el cuerpo le dolía, no tenía ganas de nada. Sasha observó por la pequeña ventana de su carruaje la gran ciudad.
Vio una ciudad enorme y majestuosa, rodeada por una muralla alta y gruesa. Vio cientos de barcos anclados en el puerto, con banderas y velas de colores. Vio miles de personas caminando por las calles, vestidas con ropas variadas y llamativas. Vio docenas de torres y edificios que se elevaban sobre los tejados, destacando por su tamaño y belleza. Y vio una colina coronada por una gran catedral blanca y brillante, con siete torres puntiagudas que apuntaban al cielo.
—Es Desembarco del Rey, la capital del reino-dijo Robert Arryn de nuevo emocionado.
—La ciudad donde vivía nuestro padre y murió nuestro padre- un silencio incomodo se hizo presente.
El carruaje entró a la fortaleza roja, los hijos de Jon Arryn se bajaron de su transporte y fueron recibidos por Ser Mandon Moore, miembro de la guardia real del rey Robert Baratheon. Nació en el Valle y entró a la guardia por recomendación de Jon Arryn.
—Mi señora, mi señor, bienvenidos a Desembarco del Rey. El rey Robert Baratheon envía sus saludos y sus condolencias. Los espero en el Gran Septo de Baelor, donde se celebrará el funeral de su padre, su madre allá los espera. — les dijo Ser Moore
-Gracias, Ser. Agradecemos la hospitalidad del rey -dijo Sasha con voz firme.
-Los llevaremos -dijo Ser Mandon Moore.
Durante el camino al gran septo predominó el silencio, Sasha se disponía a mirar por la ventana una vez más. Vio las calles llenas de gente, de animales, de carros, de puestos, de ruido, de olor. Vio la colina donde se erguía la Gran Septa de Baelor, con sus siete torres que brillaban con el sol.
Sasha llegó junto con su hermano al gran septo donde ahí ya los esperaban su madre, El rey Robert Baratheon, La reina Cersei Lannister, El príncipe y prometido de Sasha, Joffrey Baratheon; entre otros nobles y caballeros.
El Septo de Baelor era una belleza arquitectónica. sus grandes muros eran imponentes y hermosos. Sasha jamás había visto un lugar religioso tan hermoso como ese.
Los jóvenes hermanos se acercaron lentamente al rey y a su familia que quienes los esperaban.
—Sasha, Robert, mis queridos amigos. Qué alegría verlos. Qué pena que sea en estas circunstancias -les dijo el rey Robert con voz grave y triste.
El Rey Robert lo decía genuinamente, él quería a Jon Arryn como un padre por lo que le había tomado cariño a toda su familia. Era tanto su cariño a Jon Arryn que sugirió comprometer a su hijo y heredero con la hija de su mano.
El Rey Roberth Baratheon no es lo que convencionalmente se le podría considerar atractivo. Pasado de peso y barbón, pero con ropas muy lujosas.
—Gracias su majestad- la joven besó la mano del rey e hizo reverencia.
—Quiero que sepan que su padre era el mejor hombre que he conocido. El más sabio, el más honorable, el más leal. No sé qué haré sin él -dijo el rey Robert con un nudo en la garganta.
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LittleBird (Game of Thrones)
Fanfiction"DEJÓ DE SER PAJARITO Y SE CONVIRTIÓ EN UN HALCÓN" Desde que era pequeña sabía que se convertiría en la reina. Desde muy joven se había preparado para ser la esposa ideal del Principe Joffrey, hasta que conoció a un caballero que le robó el corazón...
