When I met you... [Carlos Sainz]

CAPITULO 31

La temporada ha llegado a su fin, la ultima carrera ya había terminado. La tabla de clasificación estuvo muy apretada, cualquiera que ganara del TOP 5 era campeón, pero Max lo había logrado de vuelta. Lando quedo segundo así que sabíamos que el año que viene era el año de McLaren y después los chicos Ferrari estaban 3ro y 4to por muy pocos puntos de comparación.

Todos los pilotos habían decidido cenar juntos antes de separarse hasta la temporada siguiente, le dije a Carlos que vaya ya que yo no pensaba que había sido invitada ya que no era muy amiga de todos, además era mi primer año, pero los chicos me habían insistido diciendo que siempre supieron que yo también estaba invitada

Así que ahora estaba encerrada en el baño de nuestra habitación terminando de prepararme

Un vestido largo de seda rojo, que obviamente fue intensional el color, abrazaba mi cuerpo acariciando mi piel, la espalda era totalmente abierta y un corte en su falda por donde mi pierna se escapada. Mi cabello largo negro lo deje con su onda natural, caer por mi espalda y peine mi flequillo sobre mi frente y me hice un maquillaje bastante natural 

Carlos estaba en la habitación también preparándose. Vi la hora en mi celular, note que faltaba poco para que nos tengamos que ir así que retoque lo que faltaba y me miro por ultima vez en el espejo y mis ojos fueron hacia la cicatriz reciente en mi antebrazo. Pase mis dedos con cuidado por esta y suspire

Ya había terminado todo

Saque cualquier pensamiento negativo de mi mente y me mire sonriendo, me sentía bonita y sexy, segura de mi misma. Acomode por ultima vez mi flequillo y abrí la puerta del baño

Me encontré con la espalda del español que estaba distraído acomodando su corbata, reí bajito al ver que peleaba con el pedazo de tela  

-Cariño- se giro el español hacia mí -¿Puedes ayudar...- se quedo quieto mirándome y sus ojos viajaron por todo mi cuerpo sin vergüenza -Creo que tendremos que faltar a la cena- se mordió el labio. Rei negando con la cabeza y camine hacia él. Aunque llevara tacones Carlos seguía siendo mas alto que yo y de cierta forma amaba eso.

-No me quejaría de tenerte así frente a mi siempre- sus manos viajaron a mi cadera apretándola a su gusto y hasta mi espalda baja pegándome a él, acariciando mi desnuda piel, acerco sus labios a mi cuello dejando besos húmedos

-Quédate quieto o llegaremos tarde- empuje su pecho obligándolo a controlarse y dejarme hacer el nudo de la corbata

-Por mi podemos no ir- 

-No seas un niño- bromee acomodando la corbata, el cuello de la camisa y el saco. Al terminar deje mis manos en su pecho-Guapo- dije, le di un beso pequeño y sin mas me aleje de él buscando mi cartera

-¡Ey!- se quejo el español -Quiero un buen beso-

-No porque estamos llegando tarde- le sonreí, camine al español alcanzándole sus cosas -Capaz podemos hacer algo mas cuando volvamos- le susurre en el oído y lo mire mordiendo mi labio para después irme hacia la puerta dejando al español anonadado en la habitación.

A los segundos apareció en el ascensor, después de haber corrido pasillo abajo, y me miro molesto, yo solo sonreí.

Se paro a mi lado, con uno de sus brazos rodeo mi cintura y me pego todo lo que pudo de él y me beso el cuello. 

El sabia muy bien que me encantaba que hiciera esto, era mi lugar sensible y lo estaba usando a su favor, pero no me negué, incline mas la cabeza para que tuviera espacio.

Antes de que el ascensor llegara me susurro en el oído con su voz grave y rasposa

-Supuse que el color fue intencional- sonreí en grande sin dejar de mirar la patillita que marcaba el numero de pisos -No te liberaras de mi a la noche-