013

786 94 2
                                    


Los ojos de Matthew se abrieron de par en par y giró su rostro para observar al dormido Jiwoong, pero este también había despertado y estaba mirándolo con ojos somnolientos. Este panorama le hizo sonreír, pero pronto su sonrisa quedó reemplazada por un ceño fruncido.

— ¿Qué sucede, no estás feliz de ver a tu esposo a tu lado? —dijo Jiwoong al ver el cambio de Matthew. Se acercó al hombre y rodeó la pequeña cintura con sus brazos.

— Tengo que decirte algo.

La expresión y voz de Matthew eran serias, Kim se alejó del cuerpo del menor. La preocupación escrita en su rostro. No tenía idea de qué iba a decir Seok, pero esta era la primera vez que lo veía de esa forma. No pudo evitar pensar que el joven estaba arrepentido por lo de anoche.

Matthew se sentó e instó a Jiwoong a hacer lo mismo. Los ojos del menor se enfrentaron a los de Kim, agarró sus manos y las sostuvo con fuerza.

—Tú...si yo fuese una persona distinta. Si no fuese el Seok Matthew que conoces...tú... ¿me odiarías?

Jiwoong frunció el ceño. ¿Estaba preocupado por algo como esto?

— ¿Acaso no lo dije la última vez? El Seok Matthew que quiero eres tú.

— No, no lo entiendes. Yo...no soy Seok Matthew. Bueno si, pero no. ¡Ah! Es tan confuso.

Matthew sostuvo su cabello y comenzó a tirar de él. Jiwoong lo observó como si estuviese demente, agarró sus manos evitando que se lastimase.

— Lo que trato de decir es, ¿crees en la reencarnación?

— Tal vez, ¿quieres decir que reencarnaste?

— No es una reencarnación en sí, sino que me convertí en este Seok Matthew, pero aún poseo mis recuerdos pasados. No lo comprendo yo mismo, en un momento me encontraba deprimido por mi ruptura y luego aparecí en tu cama, contigo pidiéndome el divorcio. ¡Es confuso!

Jiwoong se quedó escuchando el monólogo de Matthew, no comprendía nada. Esperó a que dejase de balbucear para calmarlo.

— Entonces, ¿dices que cambiaste de cuerpo con el anterior Seok Matthew? No te preocupes, fue solo un sueño —dijo acariciando su cabello revuelto. Matthew empujó su mano a un lado, molesto.

— ¡No es un sueño! Te digo la verdad. No recuerdo nada antes de eso, ¿acaso nunca te dio curiosidad saber por qué mi personalidad cambió tan rápido de la noche a la mañana?

Jiwoong se dio cuenta de que las palabras de Seok tenían sentido, pero aún así era difícil de creer tal alocada historia. ¿Cambio de cuerpos? Entonces, ¿dónde estaba el otro Seok Matthew? ¿Qué le sucedió a su cuerpo original?

—Esto...es demente —dijo por fin, frotó su sien intentando que toda la información fuese procesada.

Al ver esto, Matthew se sintió mareado. ¿Lo iba a dejar? ¿Le odiaba ahora? No pudo evitar que en sus ojos comenzasen a aparecer lágrimas. Intentó ocultarlas, pero era demasiado tarde. Jiwoong lo vio y comenzó a limpiarlas con sus pulgares.

— No llores. ¿Por qué lloras? —Besó los extremos de sus ojos probando el sabor salado de las lágrimas—. No te voy a odiar por esto. Solo estoy algo confuso, es una reacción normal.

Matthew siguió llorando sin parar, mientras Jiwoong lo abrazó acariciando su espalda. Por fin lo dijo, por fin esa terrible sensación sobre sus hombros de estar ocultando algo desapareció. Seok Matthew se encontraba más relajado.

—Lo lamento —sollozó moqueando por la nariz—. Quería decírtelo antes, pero no encontré el momento adecuado y luego Ricky dijo eso, estuve pensando toda esa noche sobre qué harías si descubrieses la verdad y no pude...

De un momento a otro, las palabras de Matthew dejaron de entenderse, Jiwoong solo lo sostuvo en sus brazos esperando a que el castaño terminara de desahogarse en silencio.

Sostuvo la sonrojada carita, húmeda por las lágrimas y lo besó con suavidad. Primero sus párpados, luego sus mejillas y por último sus labios. Matthew solo se dejó hacer, abrazando al hombre por el cuello.

— No te voy a dejar.

— ¿De verdad?

— ¿Dudas de tu marido?

Jiwoong alzó una ceja e hizo una mueca cómica, Matthew sonrió y negó con la cabeza.

— ¿Cómo podría? Soy una esposa obediente que confía ciegamente en su querido esposo.

—No creo que estés describiéndote en lo absoluto. — Se burló Kim besando la mejilla del hombre.

—Hay que darse prisa y salir, sino vendrán a molestarnos dentro de poco —dijo refiriéndose a su familia.

En efecto, la puerta fue tocada de forma intermitente. Jiwoong hizo que Matthew fuese al baño mientras él atendía a quien fuese que estaba afuera.

Al abrir la puerta, observó a su madre quien sonreía. Sin pedir permiso, Kim Jiyeon entró a la habitación y ojeó el lugar buscando a Seok Matthew.

— ¿Y mi yerno? —preguntó extrañada.

—En el baño...—pensó un momento antes de seguir—. No necesita tu ayuda.

Jiyeon comenzó a reír ante la ocurrencia de su hijo, agarró sus mejillas y las estiró.

— Mi pequeño celoso, mamá solo quiere pasar más tiempo con su yerno. Además, anoche me prometió acompañarme a ir de compras, así que vine a tomarlo prestado por todo el día.

— ¿Por qué me entero de esto hoy? —dijo cruzando los brazos.

— ¿Qué pasa? ¿Tu esposa debe pedirte permiso cada vez que tenga que salir?
— Jiyeon entrecerró los ojos y tiró de las orejas de su hijo. — ¿Acaso tu esposa es algún tipo de objeto? Puede salir cuando quiera y con quien quiera. ¡Deja de querer controlarlo todo!

Matthew salió del baño y observó el regaño de su esposo con una sonrisa. Al notar al joven, Kim Jiyeon se giró y corrió a abrazarlo.

—Mi pobrecito yerno, mi hijo es muy cruel contigo. Vamos, te llevaré a comprar varias cosas mientras te olvidas de tu celoso marido por unas horas —dijo mientras frotaba su rostro contra el de Matthew, como si fuera un gato

—. Y tú, tienes trabajo que hacer. Tu abuelo te está buscando. — Señaló a Jiwoong, hablando con dureza. — Los negocios de los Kim no se hacen solos. Si me entero que no haces bien tu trabajo, me llevaré a tu esposa bien lejos —dijo arrastrando a su yerno y saliendo de la habitación. Matthew solo pudo lanzarle un beso de despedida a su esposo mientras era llevado por su suegra.

"Te lo compensaré cuando regrese."

The masochistic wife - MATTWOONGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora