Fairy tail: El secreto de la extranjera.

Capítulo 19: Los seleccionados.

Ya pasó un mes entero desde que ocurrió el ataque de los clones de Kuro y Sirio, además desde que comencé con mi entrenamiento. Me encontraba bajo un árbol descansando, pensando en lo que había aprendido del estilo de dos Katanas y en como disculparme con Natsu; mi brazo ya se movía y mis heridas se habían sanado, pero mi magia tardó mucho más en recuperarse.

Kurona había regresado el mismo día que había comenzado ~Ash ya estas lista~ Su voz retumbó en mi mente mientras miraba el cielo ~¿Regresaras?~.

"Sí, pero no llega la nieve" pensé al ver que no caía ningún copo de nieve "Ya que no cae regresaré".

Levantándome y agarrando las Katanas me dirigí a Magnolia, el camino fue corto y al llegar a la puerta del gremio él estaba allí, saliendo con Happy a toda prisa y como de costumbre me tiro al suelo ~No otra vez~ Kuro suspiro en mi cabeza, yo por mi parte miré a esa cabellera rosada que cerraba sus ojos encima de mi.

-Oye ¡Quien te manda a...!- guardó silencio al verme mejor y por cosa rara se quedó congelado.

-Natsu otra vez no... espera- Happy se sorprendió al levantar a Natsu de encima -¡¡¡ASHLY!!!-.

-Hola Happy, Natsu- me levante adolorida por el golpe, aunque no era para tanto, y miré a Nutsu -¿A dónde van?-.

-Vamos a hacer un trabajo- Dijo Natsu emocionado.

No dije nada solo sonreí feliz, mientras pasaba por mi lado "Te extrañé" escuché en mi mente la voz de Natsu, pero no tenía contacto con él; desapareció de mi campo de vista y entré en el gremio viendo que no había nadie.

-Ashly-san cuanto tiempo- Wendy se acercó alegre junto a Lucy y Mirajane.

-¿Dónde están todos?- Pregunté al ver que solo ellas estaban en el gremio.

-Todos se fueron para hacer trabajos- Dijo Mirajane fijándose en mi ropa -¿Cómo has estado?-.

-Bien...- tratando de ocultar los rasguños que había recibido por el entrenamiento, desvíe la mirada hacia la tabla de trabajos que estaba casi vacía -¿Por qué tanto trabajo?-.

-Ya verás- Sabía que Mirajane se dio cuenta de las heridas, pero solo se digno a caminar hacia el bar -¿Quieres Sake?-.

Suspire aliviada al escuchar eso, me dirigí al bar y tome asiento cerca de Mirajane -Sólo un trago, lo necesito- Dije recibiendo una cálida sonrisa de Mirajane. Uno tras otro, solo decía un trago más; Lucy se unió pero el simple echo de olerlo se quedó dormida.

-Ashly-san creo que ya tomó suficiente- Wendy alejó uno de los 'últimos' tragos de ese día -por favor-.

-Calma... ya no tomaré más- Casi me caía del cansancio, todo mi entrenamiento fue completamente imparable en todo momento -¿Qué hora es?-.

-Ya son las seis de la noche- Mirajane limpiaba el bar mientras me veía, desvío su mirada hacia la entrada -Oh ahí viene Natsu y Happy-.

Así era, Natsu venía feliz con una sonrisa de oreja a oreja, al entrar paso de largo la bienvenida de Mirajane y Wendy, acercándose directamente hacia mi -Ashly disculpa por tardar- me miró fijamente dándose cuenta de mi estado; olfateando cerca de mi cara haciedo que me sonrojara, claro gracias al Sake no se notaba -Estabas tomando otra vez-.

-Sí, no es necesario que te preocupes no tome tanto como la vez anterior- me traté de levantar pero el mareo pudo conmigo, tropecé quedando agarrada de los hombros de Natsu -¿Có...Cómo te fue?- estúpidos nervios.

-Bien, aunque parece que te tendré que llevar a tu casa- Sin llegar a responder me levanto rápidamente, al momento de salir cayó un relámpago dando inicio de una tormenta -Rayos-.