25. Toujours pur

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La noticia de que su tío Sirius se había escapado de Azkaban tan cerca de la vuelta a clases tenía a su madre algo extraña, era lo último que le faltaba a Draco. Había pasado todo el verano siendo ignorado por su padre y su madre, aunque lo mima a un poco después de casi perder la vida el año pasado, tampoco era que sintiera mucho su calidez, sobre todo porque parecía que su madre era bastante obediente a su padre y la mayor parte del cariño que su madre le demostraba era a escondidas.
El día que llegó la nueva lista de libros escolares había ido con su madre al callejón Diagon, pues su padre no había querido saber nada de él y aunque fue un día bastante tranquilo y que de hecho convenció a su madre de comprar unas cuantas cosas para los siguientes regalos de navidad de sus amigos y de Harry, al volver s casa y tener que preguntar por la firma para poder visitar Hogsmeade la respuesta de su padre fue...

—De ninguna manera— fue bastante firme —Ya me has demostrado que eres débil e incapaz de cuidar de ti mismo en el lugar más seguro del mundo, no sé qué pasaría contigo si te atreves a poner un solo pie fuera de los terrenos del colegio.

Draco estaba desconsolado, sobre todo porque parecía que su padre seguía sin darse cuenta de la gravedad de la situación, el rumor de que aquel diario había salido de la mansión Malfoy había llegado a oídos de personas en el ministerio y ahora casa cierto tiempo venían a hacer alguna redada como prevención para ver qué otras cosas podían poner en peligro la vida de los jóvenes estudiantes, y también le habían abierto una carpeta de investigación a su padre, cosa que no era buena siendo que estaba altamente vinculado con mucha gente en Azkaban. Aún con todo esto, su padre era orgulloso y no bajaba la cabeza para reconocer sus errores.
Intentó que su madre firmara el permiso, había dicho que lo pensaría, pero cambió drásticamente de parecer cuando el tío Sirius apareció en la primera plana de El profeta. Aquello tenía a Draco muy disgustado, realmente quería ir a visitar Hogsmeade con sus mejores amigos, Vincent y Gregory, quería visitar la enorme cantidad de tiendas y, en sus más recientes fantasías, tomar una cerveza de mantequilla con Harry Potter, solo con Harry Potter. Aunque fuera solo para agradecerle por haberlo salvarlo, no sabía muy bien si invitarle una cerveza de mantequilla sería suficiente pero era una idea que se le había metido en la cabeza.

Dos días antes del primero de septiembre, por la mañana, sus padres se veían realmente preocupados por una carta del ministerio, al parecer habían ordenado un registro profundo en la mansión Malfoy y su padre no sabía en dónde meterse para escapar de la situación, Draco simplemente se dedicó a comer su avena y pensar que realmente ese no era su asunto, ya no quería hacer como el año pasado y ayudarle a su padre a esconder cosas en diferentes puntos del jardín o acompañarlo a Borgin y Burkes a vender. Cuando estuvo a punto de pedir permiso para retirarse, su madre le habló.

—Draco— le dijo en un tono muy serio —Debido a algunas causas que escapan de nuestra competencia, me parece más adecuado como tú madre que pases las últimas noches que quedan para abordar el expreso de Hogwarts en el caldero Chorreante, creo que eres lo suficientemente mayor para ir solo.

—¡No! — exclamó su padre —No voy a dejar que mi hijo se vaya de aquí, sabes perfectamente porque, Narcisa. A demás, ningún Malfoy escapa de los problemas.

—Draco, tesoro— le habló su madre con esa voz calmada que precedía una pelea con su padre —Por favor retírate a tu habitación.

Draco asintió en silencio y silenciosamente salió del comedor cerrando la puerta detrás de él, pero pegando la oreja para escuchar lo que decían.

—Lucius, te he permitido que eduques a Draco como haz querido, pero no estás comprendiendo que casi matas a nuestro heredero con un tonto libro— escuchó a su madre muy enojada.

—¡No es culpa mía! — Draco escuchó un fuerte golpe en la mesa —Era esa niña Weasley la que debía acabar muerta, el diario jamás debió llegar a manos de Draco.

Efecto MariposaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora