Todos se sentían muy bien y felices de que estuvieran devuelta sus queridos y amados azabaches, todos se volvieron a reunir en donde estaba anteriormente..
Deidara: -Había vuelto su sonrisa- ¿Cómo creen que sea el castillo donde viviremos?
Gaara: Especial –Se veía feliz- Ya que se tardaron mucho tiempo para buscarlo.
Naruto: No importa como sea… Mientras estemos con ellos, estaremos bien. -sonriendo-
Naruko: Tiene razón, mañana hablaremos con los demás para avisar que nos iremos pronto –diciendo contenta-.
Así fue como al día siguiente empezaron hablar con todos, que pronto se marcharían del castillo, les pidieron que no preguntaran el por qué o donde se irían, que se conformaran que saber que estarían bien. Ten-Ten dijo que los extrañaría, ya que nunca había visto combates tan buenos como los de ellos. Algunos monstruos les dijeron que si necesitaban algo ellos estarían a su servicio, ya que se habían portado bastante bien con ellos.
Cuando fueron hablar con Iruka a su recinto, lo encontraron empacando sus cosas, entre ellas bastantes libros, algunos pergaminos, un poco de ropa y armas, estas últimas las llevaba cargando Kakashi para ponerlas en un baúl. Iruka les dijo a sus alumnos que pronto él también se iría de ahí, ya que no quería preocuparlos, pero el preocupado fue el, cuando los chicos le dijeron que ellos también se irán dentro de poco tiempo. A los 3 días Iruka se había ido con Kakashi.
Mientras esto pasó los Uchiha empacaban la ropa y las cosas que llevaron al castillo, las presas empacaron un solo baúl con todas sus cosas, mientras ellos empacaron baúles más algunas maletas. Para transportarlas al castillo nuevo usaron un espejo mágico que Neji tenía.
Deidara estaba feliz, se veía que volvía a tocar los instrumentos musicales con mucho entusiasmo. Tomo un violín y empezó a tocarlo con maestría, mientras lo tocaba todos los que pasaban alrededor o cerca del salón se quedaban fascinados por la melodía que expresaba en aquel momento el rubio. Snake se quedó impresionado por escuchar la música que salía del salón, entonces decidió ir a ver quién hacia tan hermosa melodía, cuando entro al salón y vio a Deidara que la interpretaba, no lo dejaría ir de ese salón…Si podía tocar de esa manera aquel violín, entonces eso significaba que era un excelente amante en las sabanas. Deidara estaba tocando tan feliz, que no se dio cuenta que este tipo estaba observándolo… Cuando termino la melodía se dio cuenta de la presencia del sujeto…Lo miro y solo se dispuso a guardar el violín ya que se lo quería llevar, aunque Itachi le dijo que no era necesario, ya que en el nuevo castillo ya le había comprado diferentes instrumentos.
Snake: Nunca pensé que tocaras de ese manera Deidara…
Deidara: -Cerrando el estuche del instrumento- Pues ya lo escuchaste. ¿Te ayudo en algo? –Guardando las partituras en una parte del estuche-
Snake: Si así eres para tocar el violín…Como serás para tocar otros instrumentos… -Diciéndole pervertida-mente-
Deidara: -Viéndolo con arrogancia- Ya déjame en paz… (Pensando: Lo bueno es que nunca te volveré a ver). Bueno como no se te ofrece nada, me retiro. –Tomando el violín-
Snake en ese momento acorralo a Deidara contra una pared del salón, viéndolo a los ojos.
Deidara: -Suspirando- Quítate…No tardan en venir por mí… –Agachándose y yéndose del otro lado del salón-
Snake: Aja… Desde hace más de 3 meses tu criatura sobrenatural no está… Y si vienen tus hermanos será muy fácil matarlos… -Sacando su lengua que caracteriza a los obeliscos-
Deidara: Cree lo que quieras… No me interesa… Voy a irme –Dirigiéndose a la entrada del salón-
Snake: ¿Crees que te voy a dejar salir tan fácil? –Lanzo su lengua amarrándolo de su muñeca-
Deidara:… Suéltame… -Resistiéndose- En verdad no te va gustar lo que te pasara si se entera de esto… -Tratando de buscar una navaja en el bolsillo de su pantalón-
Snake: Jeje… Lo que pasara es que te poder coger a mi gusto…
Jalándolo de un solo movimiento, pero su movimiento fue intervenido por Itachi, en el momento que vio que jalaba a Deidara, hizo creer sus uñas de manera de navajas cortándole la lengua a Snake, solo se sacudió la sangre de las uñas.
Itachi: -Viendo a Snake con odio- ¿Quién es Dei?
Deidara: -Quitándose el pedazo de lengua que quedaba en su muñeca- Un intento de obelisco acosador. –Caminando a donde estaba Itachi-
Snake: -Aguatándose el dolor-… Uchiha Itachi… ¿Qué haces defendiendo a un humano?
Deidara: -Tomándole el hombro a Itachi-…Ya vámonos… No quiero que te metas en problemas antes de irnos…
Snake: ¿Irte?...No Deidara no te iras…-Viéndolo con obsesión-… Tú serás mi presa…
Itachi: -En un paso estaba enfrente de Snake alzándolo con su mano izquierda- Ni por ti chiste víbora estúpida… Deidara es mío… Trata de acercarte al de nuevo… Y tu querido tío Orichimaru recibirá tu cuerpo en un baúl… -soltándolo-
Deidara: Vámonos… Itachi… -Viendo a su azabache-
Itachi: -Salto ligeramente y llego con Deidara tomando el violín y poniendo su otro brazo encima del cuello de su presa-…No es una advertencia lo que te he dicho…Ni una amenaza… -Viéndolo de reojo con la mirada color rojo- Es un hecho que pasara, si quieres conservar tu pellejo más vale que te mantengas a distancia. –Saliendo con Deidara-
Snake se quedó impresionado por lo que se había enterado, su tío Orochimaru le dijo una vez que anduviera con cuidado cuando se encontrara con un Uchiha, ya que a la buena son buenas bestias, pero a la mala…Son lo peor que te pudiste a ver encontrado…Ya que su tío a una vez le toco pelear con Uchiha Sasuke…Y casi lo mata, si no hubiera sido por la hermana de este. Snake volvió a sus aposentos… Se había quedado anonadado por aquellos rojos que había visto…Amenazadores y crueles, no sabía cómo una criatura como Deidara podía estar con ese sujeto. Pero lo que si estaba seguro es que tendría el placer de probar al hermoso rubio…
CONTINUARA...
Créditos a su Escritora Naruko Uzumaki De Uchiha
ESTÁS LEYENDO
El Castillo SasuNaru
FantastikTodo comienza en un castillo en Inglaterra, como todos saben este país es conocido por clima húmedo, casi siempre lloviendo, nublado, en las temporadas de invierno nunca falta una gran nevada y muy poco sol... . . . . antes que nada solo quiero come...