Una Nueva Estrella

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"Los Árboles de las Almas están muriendo" solté y todos comenzaron a hablar entre sí. "Primero comenzó con nuestro Árbol de los Espíritus, luego el Árbol del clan Tawkami también murió y ellos dicen que hace un tiempo vieron a una persona del cielo merodeando por ahí esparciendo un líquido extraño a las raíces, lo que sea que estén haciendo debemos detenerlos antes de que sea muy tarde y sólo el clan Tawkami sabe qué hacer para curar nuestros árboles..."

"El problema es que ellos no nos ayudarán si ven a cualquier persona del cielo meterse en este asunto y creemos que ellos también pueden ser de gran ayuda" Jake me interrumpió a mitad de la explicación que le estaba dando a mi clan. "Nosotros conocemos la parte espiritual, pero ellos la parte química y biológica; juntos podremos sobre pasar este problema sin tener que llegar a otra guerra, ya hemos pasado por suficiente como para tener que volver a hacerlo"

"Las personas del cielo no son bienvenidas en nuestros Árboles de las Almas; los extraños están prohibidos y lo saben perfectamente"

"Valke, rutxe" interrumpí sabiendo que eso podría causarme más problemas de lo que debería.

"Na'ok ¿qué te hace pensar que ellos pueden ayudarnos?" Tsahìk preguntó hacía mí.

"Ellos también conocen los árboles, cómo funcionan; no los conocen de la forma en que nosotros lo hacemos, esa es la gran diferencia, si mezclamos nuestros conocimientos podremos salvarlos. Las personas del cielo que conozco son fieles a nosotros; ellos lucharon de nuestro lado en la última guerra y lo seguirán haciendo hasta el fin de sus vidas" Jake intervino al ver que a mí se me habían terminado las palabras e ideas.

"Si el clan Tawkami no desea ayudar; entonces nosotros tampoco. Desde que llegaron esos demonios aquí no han causado más que problemas a todos los clanes, ya ha habido suficiente muerte como para permitirnos confiar en ellos" en ese momento mi corazón se rompió en mil pedazos, pero no dejé que esto se notara así que fruncí el ceño con enojo.

"Iré a darle un vistazo a nuestro árbol para ver qué todo esté bien" Valke dijo para después comenzar a caminar, sin embargo, yo le bloqueé el paso, ambas nos miramos a los ojos por unos segundos sin llegar a movernos.

"Yo también voy" dije entre dientes, Valke no dijo nada más hacia mí.

"Pek, ven con nosotros" luego pronunció el nombre del Na'vi que más odiaba desde que tenía memoria.

"Na'ok, oel ngati kameie" él dijo de forma burlona en el momento que me reconoció; evidentemente me vi obligada a responder el saludo, no obstante, obviamente no tenía ganas de hacerlo en lo absoluto. Tanto mis hermanos como Neteyam notaron mi molestia hacia la presencia del otro Na'vi así que se acercaron a mí de forma amenazante para que se diera cuenta que no estaba sola.

"Nosotros iremos, quédense aquí un momento; volveremos en seguida" le dije a Jake, Neytiri y sus hijas para que ellos pudieran hablar con Tsahìk y nos ayudaran, sin embargo, luego de unos segundos cambié de opinión. "Kiri, mejor ven con nosotros" le dije a mi amiga y ella asintió sin más.

"De acuerdo, tengan cuidado" Neytiri nos dijo antes se que todos comenzaramos a correr detrás de Valke y Pek ya que ellos ya estaban más adelantados que nosotros.

"Síganme, hay un atajo que podemos tomar para alcanzarlos en el aire" les dije a todos antes de hacer una seña y cambiar de dirección hacia una cueva en el bosque; que en realidad esa un pasadizo hacia el interior del risco donde los Ikran solían descansar. Todos me siguieron de cerca hasta que llegamos al final del pasadizo, este llevaba a una plancha de rocas donde estaban todos los Ikran; incluyendo a los nuestros. "Nìwin!" Exclamé en cuanto salté sobre Miät y ella simplemente comenzó a volar sin que estuviéramos vinculadas. Los demás me siguieron poco después y cuando estuve segura que todo el grupo estaba reunido comencé a mirar a todos lados buscando entre las nubes a Valke, afortunadamente la encontré poco después y pude guiar al grupo junto a ella para seguirle el paso.