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Antes de que Hailey pudiera decir alguna palabra al chocarse con su hermana, esta la enrolló en un fuerte y cálido abrazo, la rubia tardó pocos segundos en corresponder de la misma manera al abrazo de su hermana. —No me gusta pelearme contigo...— susurró en medio del abrazo la menor —A mi tampoco Hailey...— ambas se separaron del abrazo y se miraron a los ojos, una sonrisa salió de los labios de ambas —¿Ibas a mi casa?— preguntó Heather, la rubia respondió asintiendo con la cabeza —Pues...Yo también iba a tu casa, quería arreglarme contigo lo antes posible— ambas se abrazaron nuevamente. Se habían arreglado e iban a intentar no volver a discutir...Al menos por ahora jaja.

(. . .)

Era sábado, todos se encontraban en casa de Heather, quien en su patio trasero tenía una parrilla donde Tom, se estaba encargando de cocinar la carne mientras que Heidi se encontraba detrás de él, abrazándolo por la espalda. Bill y Heather charlaban tranquilamente con Hailey, era un día bastante tranquilo, todos estaban contentos de estar juntos, aunque, la tensión entre Hailey y Tom se sentía, más que nada cuando este se quedaba mirando a la menor por mucho tiempo...Por suerte de ambos Heidi no lo había notado.
Las horas pasaban y cada vez la tensión entre Hailey y Tom desaparecía, ambos se dieron cuenta que por más que se amaban y estuvieran enamorado, no podían estar juntos, ¿la razón? No hay...No se sabe...Es extraño hasta para ellos, pero, yo siendo la autora de esta bella historia me gustaría que escriban suposiciones sobre la razón por la cual Hailey y Tom no pueden estar juntos.

—¿Cómo la han pasado?— cuestionó Heidi mientras abría la puerta de su casa para despedir a los demás —¡Muy bien!— respondió con felicidad en su tono de voz Heather —La comida estuvo deliciosa— habló esta vez Hailey mientras miraba de reojo al esposo de Heidi con una media sonrisa en su rostro, eso, hizo que Tom se riera un poco. Momentos después todos dejaron la casa mientras saludaban con su mano extendida y Heidi cerraba la puerta mientras imitaba el movimiento.

(. . .)

*HEATHER*

Por alguna extraña razón, Bill se estaba comportando extraño conmigo y salía de la casa en la madrugada...Eso me asustaba y preocupaba demasiado, decidí preguntarle que sucedía pero cuando estuve frente a él decidida a preguntarle, la cobardía me ganó, tenía miedo...¿Y si tenía a otra mujer? esa fue la única pregunta que rondó por mi cabeza en los últimos días. Al pasar de los días Bill siguió saliendo de la casa de vez en cuando, pero esta vez, siempre que llegaba a casa me dejaba sobre la mesa una rosa roja y un bombón de chocolate, era extraño, era como sí...Se estuviera disculpando conmigo, como si se sintiera culpable de algo y me estuviera pidiendo perdón de esa manera, todo era extraño...Ya no me decía cuanto me amaba, no me decía que era la mujer más linda del mundo, ya no me decía que quería estar conmigo para siempre, ya no me decía que estaba ansioso para que llegase el verano...Ya no me tocaba, ya no me besaba como antes, ahora, los besos eran cortos y rápidos. Bill ya no me abrazaba como antes, ya no colocaba sus manos en mi cintura mientras me pegaba más a él, ya no dejaba ese beso sobre mi frente luego de abrazarnos y ya no me decía lo bien que olía mi perfume.

Me sentía triste y asustada, en verdad no quería suponer nada, sabía que Bill nunca me haría algo así o...O tal vez si lo estaba haciendo...Me encontraba demasiado asustada solamente necesitaba sus abrazos nuevamente, sus besos, sus caricias, sus palabras bonitas...Lo necesitaba a él y no iba a parar hasta descubrir que mierda andaba pasando con él.

Eran las tres de la mañana y como de costumbre oí la puerta cerrarse, lentamente salí de la cama y tomé mi saco largo, tome un pequeño bolso dentro de este metí mis llaves y mi teléfono, coloqué mis zapatos negros de cuerina con un poco de taco en mis pies, coloqué un bello sombrero negro sobre mi cabeza y decidida caminé hacia la puerta de la habitación para abrirla, pero, en el momento que mi mano tocó la fría manija de la puerta un escalofrío recorrió mi cuerpo

¿Qué carajo estoy haciendo?

Pensé en mis adentros

¿Acaso estoy desconfiando de el amor de mi vida?

Pregunté para mis adentros nuevamente. Y sí...La respuesta era un obvio "Sí, estoy desconfiando de él, ¿y qué? ¿Acaso él no haría lo mismo si yo hubiese estado actuando como él?" Pero en vez de decir eso en mi cabeza me senté en el borde de la cama, pero, fueron unos simples tres segundos ya que al ni siquiera pensar algo me levanté y abrí la puerta con fuerza, bajé las escaleras corriendo y me quedé observando en la ventana hasta que el coche de Bill desapareciera por la carretera, al verlo arrancar, corrí fuera de la casa, cerré esta con llave y rápidamente me metí en mi coche, pisé el acelerador como nunca antes lo había hecho, probablemente luego me pondrían una multa pero no me importó en lo absoluto. Seguí el coche de Bill y fueron exactamente cuarenta y cinco minutos de viaje, Bill por suerte nunca observó mi auto o ni siquiera reconoció la patente de este. 

Su auto se estacionó frente a una casa, muy bella casa. Esta por fuera estaba perfectamente decorada con tonos cremas y blanco, era muy bonita, luces cálidas estaban colocadas de una manera muy elegante. Observé a Bill caminando por ese mini pasillo de madera que daba a la puerta de esa casa. Esta vez mi estrellita hizo una mueca extraña, miró mi auto pero yo sin pensarlo dos veces aceleré pero, no fui a ningún lado, solamente di una vuelta por la manzana. Al volver a estacionar esta vez cerca de la casa Bill ya no se encontraba allí parado, al parecer había entrado a esa misteriosa casa, pero ahora, ¿Qué tendría que hacer? ¿Tendría que entrar? ¿Tendría que golpear la puerta? ¿Tendría que espiar por la ventana? ¿¡Qué mierda debería hacer?!


KIA

✮ ¿Cómo andan? Tanto tiempo che, disculpen...Posta perdónenme por la tardanza pero estoy en blanco, no tengo ideas y me estresa bastante pero bueno, acá estamos con otro capitulo

✮ En 4 caps se termina esta bella historia...

In The Sunshine - Bill KaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora