Black cat || minbin

Capitulo cincuenta y nueve

No sentia mis brazos.

"En verdad lo lamento..." me disculpé de nuevo pero Changbin no tuvo misericordia.

"También puedo ser pasivo y agresivo, ¿sabes?" mi humano malvado apretó aún más las cuerdas que mantenia alrededor de mis brazos, torso y pecho. "De rodillas"

Obedecí.

"¿Esto es por meterle el dedo al pulgoso?"

"Es por hablar de nuestra vida privada frente a otros..."

Resople. Estaba desnudo y atado peor que perro castigado con la cola entre las patas

"Tú ya tuviste tu oportunidad de azotarme, ahora es mi turno, siempre quise hacer esto, escribi un guion que debemos seguir" explicó emocionado mientras sacaba una especie de látigo.

¿Dónde había tenido metido eso?

"No entiendo"

"Ya verás" Changbin sonrió tan malditamente hermosamente que casi se me levanta la polla.

Esperé paciente mientras él daba algunas vueltas a mi alrededor tomando fotos con su celular.

"¿Por qué tienes (tanto músculo?" preguntó haciendo un acercamiento a mi pecho para sacar más fotos. No respondi. Él siguió en lo suyo hasta que descendió y tomo fotos de mi pollo.

"Tienes mucho vello" dijo y hundió los dedos en esa parte tirando de mi pelaje negro hermoso. Eso se sintió bien.

"¿Debería depilar y verte sufrir cuando te esté creciendo de nuevo?" Changbin sonrió maliciosamente.

No entiendo nada.

"Ya vuelvo" aviso y desapareció por el corredor de nuestro departamento hasta el baño.

Esperé de rodillas al centro de la sala vacía en donde aún no acabábamos de arreglar todo lo que se habia destruido durante esa cosa llamada fiesta.

"¡La tengo!" Changbin alzó una cosa extraña en la mano.

Era esa cosa que usaba para quitar la espuma blanca que se ponia en la cara durante las mañanas.

Él decía que tenía pelo facial pero yo no le veía nada nunca.

"No te muevas" ordenó antes de sacar un poco de esa misma espuma que usaba y ponerla sobre mi.

Era fría por lo que di un brinco y observé con atención y curiosidad. Él se aseguró de llenarme muy bien de ess cosa y luego usó la otra para quitarla muy lentamente, cepillando y de pronto mi pelaje empezó a desaparecer.

"¿Qué es eso?"

"No, tú debes decir '¡detente, por favor, prometo portarme bien!'" me corrigió.

¿Este humano en verdad cree que lo voy a obedecer?

De pronto Changbin meneó el látigo de cuero y lo estampó sobre mi lo suficientemente fuerte como para dejarme una marca roja en la piel.

¿Qué demonios?

"Eso te pasa por no obedecer, Honnie"

"Te estás tomando esto muy en serio, humano"

¿Dónde estaban Yeonjun y Wooyoung cuando los necesitaba?

Changbin siguió quitándome el resto de mi lindo pelaje hasta dejarme lampiño y finalmente sonrio satisfecho.

"Esto no se siente como un castigo" dije, observando mi pollo medio levantado.

"Ya veremos en unos dias" me guiñó un ojo. "Ahora empecemos con el guion, descuida, muy probablemente esto termine con resultados sexuales"

"Esto me agrada, dale"

Changbin aplaudió emocionado y antes de que pudiera hablar, la puerta de nuestro departamento se abrió y Chan apareció llevando montones de bolsas con él y deteniéndose casi al instante cuando nos encontró en aquella extraña escena. Alzo la mirada por encima de aquellos enormes anteojos de sol que llevaba y frunció el ceño al tiempo que Changbin se ponía rojo hasta casi explotar.

"¿Bondage?" preguntó con confusión. "¿Quién lo diría? Los más serios son los peores, jamás volveré a fiarme de ti" apuntó a Changbin. "Ando un poco estresado déjame darle unos azotes también..."

"¡No!" Changbin escondió el látigo detrás de su espalda mientras yo esperaba obedientemente a ver si me la chupaba o algo así.

"¿Podemos hacer trio?" pidió Chan con insistencia. "Nada mejor que el MinBinChan!" Changbin se apresuró a ponerme de pie y quitarme las ataduras para luego envolverme en una sábana.

"¡Se acabó el espectáculo!" aplaudió avergonzado.

"Pero..." intenté reclamar pero él me empujó lejos de Chan.

El humano que me cala mal resopló y dejó todas las bolsas en el suelo antes de empezar a sacar vestidos de colores horribles como rosa, amarillo y verde muy claro.

"Yuna necesita ropa y yo necesito consejos" anunció Chan mientras alzaba uno de los vestidos.

"¿Aún tienes a Yuna?" se sorprendió Changbin, bebiendo agua para ignorar el bulto en sus pantalones.

"Obvio, creo que la adoptare de por vida, ¡es tan linda!"

Changbin se tenso.

"No creo que debas encariñarte con ella" negó con preocupación.

Chan enarco una ceja como si esperara que Changbin continuara hablando pero mi humano dejó de hacerlo en cuanto yo me acerqué a ellos para ver qué tantas cosas tenian las bolsas. Mi humano parecía incómodo lo cual me pareció extraño, quizás tenía ganas de ir al baño.

"¿Y qué tienes ahí?" Changbin desvío la atención tomando uno de los muchos vestidos y como yo no quería ver nada de eso, sali del departamento. Baje las escaleras para ir a visitar a Jisung, ya había pasado mucho tiempo desde la última vez que había ido a trabajar pero sorprendentemente seguia sin despedirme. Sin duda tenia el mejor trabajo de toda la vida y sólo debia quitarme la ropa, fácil y sencillo. Llegué hasta su puerta y me detuve cuando una cabeza se asomo desde una de las puertas cercanas. Giré y me encontré con el chico ese, el dueño del roedor.

"Tú" lo apunte y él dio un brinco. "¿Tienes comida?"

Él lo meditó antes de afirmar y sin pensarlo mucho, caminé hasta su departamento.

Ojalá no lo hubiera hecho.