Black cat || minbin

Capitulo treinta y cuatro

"¿Qué es esto? ¿Acaso los animales se convertirán en humanos y nos extinguirán para reclamar su libertad?" Chan seguía acariciando las orejas de Yuna mientras ella sonreía sentada a su lado.

"Ahora tendré miedo de que mi perro se transforme a media noche... Aunque ahora que lo pienso, no me importaría si se transformara en un chico sexy y..."

"¡Concentrate, Channie!" lo interrumpió Hyunjin.

Changbin seguía sentado sobre mis piernas con el ceño fruncido observando a la chica conejo con desconfianza. Ahora nos encontramos en el consultorio del veterinario, no pregunten cómo llegamos, simplemente esto es el poder de la imaginación.

"Bueno, ¿y? ¿Ahora qué?" Chan mantenía un brazo protector encima de Yuna.

¿Por qué a ella no parece odiarla como a mi? Estúpido humano, haré pipi sobre tu ropa de nuevo.

"Jeonginnie me ha estado ayudando a investigar un poco" habló el veterinario.

"¿Jeonginnie?" Chan arqueó una ceja. "¿Ya se hablan con tanta confianza?"

"Existe una leyenda" Hyunjin ignoro a Chan y siguió hablando. "Aún no encuentro mucho relacionado al tema pero se dice que es una especie de maldición que recae sobre las mascotas que comparten un vinculo especial con sus dueños."

"¿Maldición?" Changbin habló por primera vez en todo ese tiempo. "¿A qué se refiere con 'maldición' exactamente?"

"Aún no lo sé, Jeongin me esta ayudando un poco así que..."

"¿Y Min?" Chan interrumpió hablando con un poco de severidad en la voz. ¿Qué pasó entre ustedes? Antes parecían chicle, pegados todo el tiempo."

Hyunjin apretó los puños con fuerza.

¿Qué se traen estos humanos?

"Yo me encargo de MIS problemas con Seungmin" el veterinario parecía molesto, furioso.

"Claro" Chan soltó una risita burlona aunque no parecía que le hiciera tanta gracia como aparentaba.

Senti a Changbin tensarse ligeramente sobre mi, Yuna tenía cara de haber sido regañada y se sentí mucha tensión en el aire. Al parecer algo estaba ocurriendo entre esos humanos pero yo no entendía nada así que preferí ignorarlos y empezar a recorrer las piernas de Changbin con mis dedos. Él se estremeció y giró hacia mi con los ojos muy abiertos.

Mi humano es tan hermoso.

No pude resistir la tentación de inclinarme y besarlo.

Él se sorprendió pero terminó correspondiendo, ladeando la cabeza a un lado para profundizar el beso. Habia extrañado esto de poder meter mi lengua en su boca, sacarle pequeños gemidos y sentirlo temblar.

"Honnie..." suspiró cuando nos separamos apenas un poco.

Changbin tenia esa mirada acuosa de ojos entrecerrados que solía poner cada vez que quería ser tocado más y más.

"Me pones la polla toda dura y caliente" le dije.

"¡Aún seguimos aqui, par de idiotas!" gritó Chan quien cubría los ojos de Yuna para evitar que nos viera.

"Me voy" Hyunjin se puso de pie y caminó hasta la puerta pero se detuvo y giró hacia nosotros. "Un momento, este es MI consultorio ¡ustedes son los que deben irse!"

Chan se puso de pie llevando a Yuna con él.

"Pero yo también quiero ver" se quejó la chica conejo.

Changbin me tomó de la mano y me sacó del lugar, yo sólo quería estar en casa para poder seguir en lo que estaba con Changbin antes de haber sido interrumpido. Esto de ser buen samaritano y estar ayudando a Yuna a buscar a su humana iba a ser muy tedioso.