3 DÍAS.
Joosep.
-Ya quiero que acabe esta semana para tenerte, solo para mi. -Dijo Caroline besandolo.
-Yo igual. -Era la primera vez, desde el viernes, que veía a su prometida. Caroline se alegró tanto de verlo, que le sugirió faltar a clases. Estaban en la casa de Joosep. No se había dado cuenta de cuanto la extrañaba hasta la que tuvo sentada en sus piernas, con la cabeza descansando en su cuello. -Te extrañé mucho.
-¿Cuántos faltan?
-Solo tres. En tres días acabaré con la farsa.
-Tenía tanto miedo.
-¿Miedo? ¿miedo de qué? -Y depositó un beso en su mejilla.
-De que en el fin de semana te enamoraras de ella.
-Eso es imposible, simplemente me acostumbré, pero ¿enamorarme? -Se rió con sarcasmo -Yo jamás vería como mujer a una niña.
-Gracias. -Alzó la cara -Me has dado una enorme prueba de amor. Ahora más que nunca quiero casarme contigo.
-Ya quiero tenerte a mi lado como mi mujer -La besó
-Joosep... -Dijo al separarse.
-¿Qué, mi razón de existir?
-Quiero que sepas que cuando nos casemos no habrá más infidelidades. Nada de retos o apuestas que impliquen que estés con otra chica. Sólo quiero que me mires a mi.
-Puedo hacerlo. El paraíso es poder estar con la chica que amas, así que mientras esté contigo, las demás no serán nada.
-¡Joos! -Ella estaba al borde de las lágrimas, pero una sonrisa se extendía por toda su cara. -No se que hize para tenerte. Salvé un país en mi vida pasada, seguro.
-No hiciste nada, sólo ser tu misma. Así te amo.
Sellaron su amor con un beso. Joosep jamás había amado a alguien así.
Alyce.
La escuela transcurrió sin problemas. Ahora se encontraba tirada en su cama, hablando con Ana por teléfono.
-Joosep me dijo que pasaría por mí a las 4:00.
-¿Y ya estás listas? Son las 3:50.
-Me arreglé desde que llegue a casa, An. -Ella se rió.
-En serio te gusta mi hermanito.
-En serio me gusta tu hermanito.
-Se nota mucho. Cuando regreses me llamas y me cuentas todo.
-Claro que si, cuñada. Te cuento las cosas antes que a mi mejor amiga ¿es eso normal?
-En sí, tu vida no es normal, Aly.
-Me duele porque es verdad -Se escucharon risas al otro lado de la linea.
-Nunca dejes que te duelan tus verdades -Dijo más seriamente.
-Lo tomaré en cuenta, Anyta.
-Más te vale, nena. -Estaba a punto de contestar con algo ingenioso, cuando alguien jaló la cuerda que colgaba de su balcón. Su corazón empezó a latir más rápido de lo normal. Había llegado.
-Anna... -Susurró.
-¿Qué pasó, Al?
-Ya llegó Joos. -Hizo un pequeño gritito de emoción.
-Colgaré ahora, suerte. Me llamas en cuanto llegues. -Colgó.
Se paró rápidamente y se peinó. Cerró la puerta con seguro y bajó por la cuerda. Joosep la esperaba con los brazos abiertos, recargado en su auto. Corrió a abrazarlo.
-Aspiguita, te extrañé.
-Yo más, Joos. -Alzó la cara y le dio un profundo beso. -¿A donde me llevaras hoy?
-Lo averiguaras cuando estemos ahí. Sube. -Ella lo hizo. En pocos segundos estaban en marcha.
Llegaron media hora después al Bristol Zoo Garden. Ella había oído hablar mucho de él. Pero nunca había estado aquí. Era enorme, los animales estaban medio encerrados, no andaban por cualquier lugar, pero tampoco estaban en unas jaulas pequeñas.
-No sabía que era tan grande y hermoso.
-¿Encerio? Pareces extranjera.
-Lo sé. Gracias por traerme.
-¿Quieres ver algún animal en especifico?
-Leones.
-Perfecto. Déjeme guirla, señorita.
-Gracias, señor.
Fueron agarrados de la mano todo el trayecto, se tomaron fotos con todos los animales que a Joosep o a Alyce le llamaran la atención. Hicieron las caras más graciosas del mundo. Se tomaron en total 30 fotos antes de llegar con los leones.
-¡Qué hermosos están! Necesito foto con los leones. Joosep salió haciendo pucheros y Alyce gruñendo con la boca.
-Saliste hermosa ¿por qué sales bien en todas las fotos y yo no?
-Porque sí. Ya deja de quejarte, que gruñes peor que él león.
-Lo sé. Pero el león no es tan sexi como yo.
-Eso no puedo contradecirlo.
-¡Lo sabía! -La agarró por la cintura y la besó. Un león rugió justo cuando sus bocas se juntaron.
-Wow -Susurró Alyce cuando se separaron -Que intenso.
-Así como mi amor por ti.
-Exacto. Yo también te amo.
Recorrieron la mitad del Zoológico con sus besos y fotos, no avanzaron más porque realmente era enorme. Alyce regresó a su casa justo a las 8:00 pm, cuando su mamá la llama para comer.
-Alyce -Su madre tocó la puerta cuando iba terminando de subir.
-En un momento bajo. -Se puso rápidamente pijama y esperó a que su respiración se normalizara. Al bajar habló con su tono cansado de todas las cenas.
En cuanto terminó le mandó mensaje por facebook a Anna.
Alyce Smith:
Me llevó al zoo.
Anna Lambert:
¡Qué romántico!
Alyce Smith:
Lo sé. Nos tomanos como 50 fotos.
Anna Lambert:
Me las tienes que enseñar todas. Pero en persona.
Alyce Smith:
Cuando Joos me lleve a su casa de nuevo.
Anna Lambert:
Bueno. Pero me las enseñas.
Alyce Smith:
Están hermosas todas, no dejo de verlas.
Anna Lambert:
Es normal, cuando me tomo fotos con Andrew las veo hasta que se me caen los ojos.
Alyce Smith:
¿Y cómo te los vuelves a pegar?
Anna Lambert:
¡Tonta! Es una metáfora.
Alyce Smith:
No era necesario ese insulto tan feo
Anna Lambert:
Es un insulto de primario, por dios.
Alyce Smith
Si. Pero me llegó.
Anna Lambert:
Ya dejate de exageraciones.
Joosep acaba de llegar voy a hablar con él. Buenas noches, te cuidas, neni.
Se desconectó. Alyce arregló sus cosas para el día siguiente, estaba tan feliz y enamorada. No había nadie en el redondo mundo que fuera más feliz que ella, ahora mismo. Tenía una familia estupenda, buenas calificaciones, las mejores amigas (incluyendo a Anna) y el mejor novio del mundo.
Se quedó dormida con esos pensamientos.
