Capítulo 79: Paraíso (3)

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¡No hay humo en el campo de batalla, pero es más trágico que si estuviera lleno de humo!

Aunque Metatrón y los demás asignaron a sus oponentes al comienzo de la batalla, Isefel terminó soportando la mayor parte de los ataques él solo. Beelzebub usó el cadáver carbonizado de un serafín, que se parecía a Michael, con la casa.

Metatrón abrió la barrera y protegió a Mammon y otros cuerpos para evitar que la guerra se extendiera a ellos.

Con la cooperación de Beelzebub, Isefel cosechó las vidas de los serafines tan rápido como una hoz.

De repente, el comandante de larga distancia  comenzó a transmitir la Marcha del Ejército Voluntario  y la recitación apasionada de Shi FeiSha: —¡Luchen, hermanos! ¡No tengan miedo, no retrocedan, no se entristezcan por mí! ¡En este momento, estamos con ustedes! ¡Luchen, hermanos! ¡La victoria nos llama, la victoria asiente con la cabeza, la victoria está frente a nosotros cantando para nosotros! ¡En este momento, estamos con ustedes! ¡La pasión y la sangre hierven, el fuego de la justicia arde en su batalla! ¡Derroten al mal, derroten al caos, derroten al imperialismo! ¡La victoria finalmente será nuestra!

(N/T: 義勇軍進行曲 o yìyǒngjūn jìnxíngqǔ; El Himno Nacional de la República Popular China es el título chino de la Marcha de los Voluntarios).

—Cállate—. Isefel se tomó un momento para responder.

...

Cinco segundos después, la Marcha de los Voluntarios fue reemplazada por la canción Claro de Luna.

El número de serafines estaba disminuyendo lentamente y el entusiasmo de lucha de Isefel obviamente no había disminuido a medida que la canción se ralentiza.

"Lucifer", "Raphael", "Mammon"... iban disminuyendo uno a uno.

—¡Qué logro tan glorioso! — El Dios del Caos no mostró ningún enojo por ser vencido, y aun así dijo amablemente: —Entonces, ¿te importa si agrego un poco más de mano de obra?

Otro círculo de serafines.

Esta vez también están los rostros de Metatrón, Isefel y el propio Beelzebub.

Beelzebub advirtió de antemano: —Termina con ellos rápido, no quiero ver mi rostro contorsionado por el dolor.

Isefel dijo: —Puedes desfigurarlos.

Beelzebub dijo: —Son demasiados, me costaría mucho esfuerzo.

Shi FeiSha dijo:—Está hablando de tu propio rostro.

Beelzebub: —...

Metatrón amplió la barrera para incluir a Isefel y Beelzebub, —podemos retrasar el tiempo hasta que encuentren a Asmodeus y regresen—. Aunque los serafines creados por el Dios del Caos no tienen la fuerza de los serafines reales y no son difíciles de resolver, pero son más en numero. Si la batalla continúa así, incluso Isefel quedará exhausto.

El Dios del Caos sonrió y dijo: —¿Quieres esperar a que salgan? Me temo que será difícil.

Metatrón tenía un mal presentimiento en su corazón.

Efectivamente, el Dios del Caos dijo: —De hecho, todavía estoy aquí, pero eso no significa que no pueda estar en la ilusión.

Beelzebub se echó un caramelo de menta a la boca y frunció el ceño: —¿Qué quieres decir?

Metatrón dijo: —¿Se dividió?

—¿División? — Preguntó el Dios del Caos, —bueno, se podría decir así. Sin embargo, prefiero usar el término 'omnipresente'. Mejor no esperen por ellos, porque su situación actual debe ser mucho más difícil que la de ustedes—. Al no tener una forma física, su poder se amplificaba en el reino ilusorio.

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