Capítulo 3

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Cuidar a los niños le apasionaba, siempre se le había dado bien cuidar de ellos y había sido gracias a Minami que descubrió su vocación; la guardería no era demasiado grande, sólo dos salas con quince niños cada una, Hanma, su compañero de trabajo, se encargaba de los niños de 1 a 3 años, mientras que Takemichi cuidaba los de 4 y 5 años... Era un trabajo que necesitaba toda su dedicación, pero las sonrisas de los niños cada vez que lo corrían hacía él para abrazarlo lo valían todo

- Y ese chico que vendrá es tu amante o algo? – bromeó el de ojos dorados dándole un codazo mientras ordenaban la sala de los niños grandes

- Primero, jamás engañaría a Manjiro y segundo, es menor de edad! No me quiero ir preso – ambos rieron terminando de guardar todo en su sitio – Y? Cómo van las cosas con Kisaki? – le miró con picardía

- Según él es "demasiado hetero" para salir conmigo – rió – Pero ya te digo yo que hetero, hetero no es. Hinata siempre me dice que me mira el trasero en las reuniones

- Y lo confirmo. Es que tienes un cuerpo tan bonito – se le acercó al más alto y empezó a hacerle cosquillas

- N-no! Para! Take, deja- – y empezó a reírse a carcajadas como si fuera una hiena, o más bien Joaquin Phoenix en The Joker, razón por la que cubrió su boca con sus manos intentando contener su risa – P-para, tonto! Me da vergüenza m-mi risa!!

- Vale, vale, perdón – se detuvo y le dio unas palmadas en la espalda – Respira, si ya paré

- Te voy a pegar a la próxima – dijo jalándole las mejillas; el timbre de la guardería sonó llamando la atención de ambos adultos – Debe ser tu amante

- Que no es mi-!! Argh, olvídalo – suspiró y se dirigió a la entrada; Terano llevaba su cabello suelto, el cual era bastante largo, y traía puesto un abrigo negro que se veía acogedor – Hola, Minami – le saludó con una sonrisa

- Hola... - saludó algo apenado; la noche anterior respondió a aquella invitación con demasiado entusiasmo, dándose cuenta de que tenía que calmarse, Takemichi tenía una relación y él se había hecho unas ilusiones demasiado infantiles para ya tener 17... Al final el de ojos azules le dio la dirección de la guardería en que trabajaba diciéndole que fuera a buscarlo pasada las 2 de la tarde, porque más o menos a esa hora salía

- Ven, pasa, estoy terminando de limpiar – el de ojos amarillos hizo una reverencia, se quitó los zapatos y entró únicamente en calcetines; Hanma al verlo casi se va para atrás

- POR LA MIEEE-! Amigo! Con qué te alimentaron?! – exclamó el de ojos dorados

- Disculpa?

- Ignóralo, es bastante grosero y no sabe lo que es tener sentido común

- Oye, si sé, es sólo que cuando pienso en chicos que, ya sabes – dijo moviendo las cejas arriba y abajo repetidas veces – pienso en enanos como Mikey, no en el titán colosal

- Hanma, no seas grosero – le regañó conteniendo la risa; si le había hecho gracia la referencia


Una vez los mayores terminaron de limpiar y ordena la guardería dejándola lista para el lunes, Hanma se fue en su motocicleta y dejó solos a los otros dos, quienes empezaron a caminar en silencio hasta llegar a un café que, por la hora, no estaba demasiado concurrido. Takemichi se sentó frente al rubio y le sonrió con algo de nostalgia

- Aún me cuesta creer que hayas crecido tanto

- Y a mí me sorprende que tú no hayas cambiado nada – admitió – Eres exactamente igual a cuando me fui, sólo dejaste de teñirte el cabello

Diferencia de Edad (SouthTake)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora