Amores De Noche, Ajenos De Día

Seis; Besos Celosos!

-Layla-

Ya tenía semana y media sin ver a el lateral derecho de las águilas, ya mi vida comenzaba a regresar a la normalidad. Me hice el animo de que lo que sucedió entre Kevin y yo, solo fue cosa de una vez y ya. Lo más seguro es que la próxima vez que nos veamos regresemos a los pleitos como de costumbre.

A pesar de eso no puedo negar que a cada rato me acordaba de sus besos alocados y sus manos recorrer por todo mi cuerpo. De repente me llegaban imágenes de nuestra noche juntos y no era posible que con tan solo acodarme me volviera a poner caliente por él.

Era temprano en sábado cuando me llega un mensaje de Sol:

Vamos a ver a las águilas o que chiquita!?

Siempre me invitaban a ver los partidos pero siempre tocaba la casualidad que no podía por motivos del trabajo o equis cosa. Me la pienso un momento y como no tenia nada que hacer este fin, acepte pero a duras penas porque la verdad no se si este lista para volver a ver a Kevin.

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Entrando a el estadio Azteca junto a Sol, Felipe Oscar, Alex y por supuesto doña Norma me sentía nerviosa y no tenía idea el porqué. Vimos el partido y la verdad si estaba muy emocionante. Había visto a Kevin jugar antes en Pachuca pero ahora se sentía diferente. Me emocionaba demasiado cuando tenía el balón èl y le pedía a dios que le cayera gol para verle esa sonrisa que tanto me encanta.

Después del partido nos dirigimos a un cuarto de familia de jugadores para recibir a Kevin.
Mis manos empezaban a sudar al pensar tenerlo frente a frente de nuevo.

Estába riéndome de algo que dijo Oscar cuando escucho a doña Norma....
-Ay mi Niño!!! Que bien jugaste mi amor!!-
Levanto la mirada para verla abrazada de su hijo menor que aún venía en su uniforme.
-Gracias ma- sus ojos viajan hasta conectar con los míos y solo sonríe.
Se pasa a sus hermanos y a su mejor amigo para saludarlos y al ultimo llega a mi.

-Que onda nena, no sabía que ibas a venir a verme hoy- y me abraza de lado. Su cuerpo se siente caliente y aún se le siente el sudor.
Sonrió y él también. No se que tiene que siempre logra hacer que mi corazón se estremezca con tal solo mirarme.

-jugaste muy bien, felicidades por tu gol-
-Gracias lay, oye andas ronca!?-
-jaja si!! De tanto gritarte y ni me pelabas-
Se ríe y se sonroja.
-perdón no se escucha nada allá abajo-
-si me imagino-
-oye y cómo haz estado?- me pregunta seriamente.

Estaba a punto de contestarle cuando un muchacho alto sele arrima y lo saluda.
-Kevin güey, preséntame a tu hermana o que?-
Le dice mientras me ve de pies a cabeza sin vergüenza alguna.
Veo que le cambia la cara completamente a Kevin y solo me voltea a ver y después...

-No es mi hermana tarado, es....una amiga-
-mejor entonces!! Hola...soy Emilio- me voltea a ver y me ofrece su mano.
Por un segundo volteo para buscar la aprobación de Kevin, pero no se porque lo hago.
Le doy mi mano y lo saludo.
-Hola Emilio, soy Layla-

Puedo sentir la mirada de Kevin en mi, pero lo ignoro porque no iba ser grosera con Emilio!
Veo que Kevin se retira y se va a platicar con Alex.  A cada rato puedo sentir su mirada y en una que volteo alcanzo a notar que tiene la mandíbula apretada. No creo que esté enojado porque platico con su compañero de equipo, no tiene porque estarlo. Èl me dejo muy en claro que no había nada entre nosotros.

-oye, Me das tu número?- escucho a el central preguntarme.
-ehm, si si claro- le digo y me da su celular.
Estoy a punto de grabar mi número cuando siento unas manos arrebatándome el cel.
Y ahí están, esos ojos marrones viéndome de una manera rara.
-Layla ya nos vamos- me dice seriamente!
Le regresa el celular a su compañero y Emilio solo se ríe y sacude la cabeza.
-Kevin espérame, estaba ocupada-
-no te preocupes Lay, después me lo das- me dice Emilio tratando de tranquilizar la situación.
Pero solo la empeora.
-Lay?- le pregunta incrédulo Kevin a Emilio.
-Ni la conoces güey, para que le estés diciendo así-
-ya Kevin, no pasa nada con que me diga así, todos me dicen así- le digo todavía sorprendida que se moleste por algo tan simple.
En eso siento llegar a Felipe a mi lado y nos habla seriamente a los dos.