Miss Americana & The Heartbreak Prince [Charles Leclerc]

Chapter 5

Me aparto bruscamente de Max. Miro las caras sorprendidas de Charles y Carlos, Dan está celebrando y no parece darse cuenta de lo que pasaba. No encuentro a Ava por ningún lado.

Corro hacia el pasillo al sentir que el aire me falta. No me podía permitir estar bajo el escrutinio de la prensa nuevamente por algo que no tenía pies ni cabeza. Siento mi corazón arder (y no de la buena manera). Me siento confundida, me siento molesta, tengo miedo.

Apoyo mi mano en la pared y trato de respirar y controlarme. Contar hasta 10 ayuda. Oigo pisadas de tacones.

-¿Lily?-pregunta Ava preocupada. Reconozco su voz.

-Lily, lo siento... Yo no quería causarte daño.-dijo Max.

-Y...Yo, yo...-logro articular con el poco aire que logro respirar.

Acto seguido, Horner nos lleva de vuelta al paddock y cierra la puerta. Trato de hacer lo posible por controlarme y no parecer un manojo de nervios sacado del manicomio. Cierro los ojos y siento una mano que se posa en mi espalda.

-Lo que acaba de hacer este chico es totalmente inaceptable y viola nuestros acuerdos...-escucho la estruendosa voz de Ava enojada.-No tiene idea de lo mucho que podría perjudicar esto a Lily, profesional y personalmente. El placement llevaba una línea de tiempo establecida y todo acaba de irse al carajo.

¿Placement?

-Admito y tomo responsabilidad de este error, las fotos están en manos del equipo de prensa de Red Bull y...-objetó Horner.

-Demando que las eliminen ya mismo.-exigió Ava.-El bienestar de Lily y cualquier acuerdo están en juego ahora mismo.

Abro mis ojos para encontrar a Dan abrazándome y Lily discutiendo con el empresario en la oficina que estaba en frente.

-Vamos, sigue contando...-susurró Dan.-siete, ocho...
Cierro mis ojos de nuevo y llevo mis manos a mis oídos. Mi corazón late descontroladamente, mi respiración se agita y mi mente está nublada. Mi vida privada volverá a estar bajo el escrutinio público. Invaden de nuevo mi privacidad, veo pasar cientos de titulares sensacionalistas. La voz de mi cabeza susurra "¿qué dirán?"

☆

Abro los ojos y lo primero que veo es una pared blanca frente a mi, un estante lleno de remedios y a Ava sentada a mi lado. No tardo en darme cuenta de que me encuentro en un hospital y que en mi brazo izquierdo una aguja intrusa perfora mis venas

-¡Lily!-exclama Ava aliviada.-Cariño, estás bien.-toma mi mano.

-Ava, ¿Qué pasó?-pregunta confundida.

-Ya estás bien, preciosa. Tuviste un ataque de pánico por lo que pasó al final de la carrera, pero todo está bien...-sonrió.-Te prometo que esas fotos no verán la luz y todo estará bien.

Sonrío débilmente como gesto de agradecimiento. Mi cuerpo se siente vacío, sin energía. Las luces tenues y los sonidos apagados del hospital crean un ambiente surrealista a mi alrededor.

-Lo siento...-susurré.-Creo que no estoy bien, creo que no estoy lista para esto.

-Tranquila, debes descansar.-apretó levemente mi mano.-Probablemente pases la noche aquí y mañana viajaremos de vuelta a Nueva York.

La puerta se abre y Dan entra. Se sitúa frente a mi y besa mi frente.

-Pequeña, ¿cómo estás?-preguntó con un evidente tono de preocupación.

-Estoy bien, en serio.-lo tranquilicé.

-Alguien afuera quiere verte...-susurró.

Abro mis ojos asombrada, Dan señala la puerta y veo a Charles de pie, con un pequeño oso de felpa y una sonrisa.