Capitulo 15. Cuando las luces se apagan

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Del otro lado de la puerta, se encontraba Luz con un miedo grande, claro, después de todo, estuvo a punto de ser violada y ahora mismo, su madre se encontraba con aquel sujeto "Los mismos momentos que pase con su madre" fueron las palabras de aque...

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Del otro lado de la puerta, se encontraba Luz con un miedo grande, claro, después de todo, estuvo a punto de ser violada y ahora mismo, su madre se encontraba con aquel sujeto "Los mismos momentos que pase con su madre" fueron las palabras de aquel sujeto.

Raine se apresuró a llegar donde Luz, estaba agitado, pero era más su preocupación por encontrar a Esa.

- ¡Luz! ¿Te encuentras bien? ¿Dónde está tu madre? -. Pregunto a la joven, al acercarse la chica se hizo hacia atrás y lo miro a los ojos.

Nunca olvidaría una mirada así, varias veces, Eda también tenía esos ojos, por lo que su preocupación se hizo más grande.

- ¿Qué sucedió Luz? -. Pregunto de nuevo.

-Iba a violarme... Ese hombre, estaba a punto de violarme y mamá se quedó encerrada con el allí adentro -. Dijo mientras las lágrimas empezaban a salir.

Raine asustado, se acercó rápidamente a la puerta para tratar de abrirla, sin embargo, esta misma estaba bloqueada.

- ¡Eda! ¿¡Puedes oírme!? -. Grito mientras seguía empujando la puerta.

Del otro lado, Eda logro oír a Raine, sabía que él estaba allí, pero ahora mismo, sus gritos eran callados de nuevo, por unas manos ajenas a las suyas mismas manos, del hombre que ahora se encontraba encima de ella.

- Oh Eda, creíste realmente que lograrás huir de mí, claro que pudiste, lo hiciste por muchos años, pero siempre vuelves a mi -.

Y de nuevo, ese sonido que odiaba y esa oscuridad que la atormentaba, era como volver al pasado, el sonido de aquel cinturón y el cierre del pantalón se repetían de nuevo, pero esta vez, no estaba dispuesta de volver a pasar por eso, esta vez, lucharía incluso si tenía que morir para evitar aquello.

Con el valor suficiente, mordió la mano del hombre lo suficientemente fuerte para que, de la misma, saliera un pequeño hilo de sangre, gracias al colmillo de la mujer. Lo empujó y se acercó a la puerta.

- ¡Raine, ayúdame! -. Grito con todas sus fuerzas para llamarlo, sabía que estaba allí y creía que esta vez, podría evitar lo "inevitable".

-Llamar a tu noviecito no te salvará de mi linda, no lo hizo en el pasado y no lo hará ahora, nadie te salvo y nadie lo hará -. Trato de acercarse a la mujer, pero está lo empujaba, sin embargo, su fuerza no era mucha por lo que en cuanto logró tomarla del brazo, la tiró al piso para nuevamente, ponerse encima de ella.

Trato con toda su fuerza, como cuando tenía 15 años, ella realmente trato de evitarlo, pero, de nuevo, no tuvo la fuerza para apartarlo. Sentía cada estocada y oía cada suspiro de aquel hombre, sentía tanto asco de sí misma y pensó de nuevo que nadie podría salvarla, cuando de repente, la puerta fue tumbada por unos hombres armados, eran policías.

Allí fue cuando su mirada chocó con la de Raine y este mismo, quien al ver la situación sintió su sangre hervir, empujó con fuerza al hombre para apartarlo de Eda. Raine, tenía lágrimas en sus ojos a la mujer que amaba completamente rota. Lilith y Darius trataron de acercarse para auxiliar a la mujer, sin embargo, esta al sentir el toque, y aun temblando, se apartó de allí.

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