Unexpected love | JinKook {Omegaverse}

Capítulo once

Después de desayunar, decidieron regresar a casa.

Apenas entraron, los recibió una ola de confeti cayendo sobre ambos.
Permanecieron de pie en su lugar, Jin más asustado que JungKook.

-¡Feliz cumpleaños! -Les tomó unos segundos comprender que se trataba de una fiesta sorpresa.

SeokJin reconoció a sus amigos, compañeros de trabajo y a su primo. Supo de inmediato que éste último lo había planeado.

Dejó que todos lo felicitaran y los siguió al sofá en donde todos se reunieron alrededor.

JungKook permaneció de pie.
Sabía que todos creían que era esposo de SeokJin (Qué si era) y que tenían una relación muy estable. Sin embargo, no quería fingir otra vez, recordó lo ocurrido esa noche en la boda de Sun Hee.

Miró a esa rubia nuevamente sentada al lado del pelinegro. No quería confundirse otra vez.

Estuvo a punto de caminar sigilosamente hacía las escaleras, justo cuando escuchó la voz de Sun Hee.

-JungKook, ¿A dónde vas? Es la fiesta de tu esposo -Preguntó con notable confusión.

Maldijo en su mente antes de girarse a verlos. Todos lo observaban con atención.

-Eh... Estoy un poco cansado -Soltó un bostezo fingido-. Necesito descansar

-Oh, El embarazo te ha de tener agotado. Y eso no es todo, cuando tu cuerpo pierda su forma, subas de peso, tu piel se reseque, te salgan manchas y pierdas la condición física, será peor -La rubio mencionó, sonriendo con sorna.

El menor quiso protestar. Se encontró con que no tenía ningún argumento... Todo eso era verdad según lo que había investigado.

-Es verdad, es horrible. Mi marido me dejó por eso -Una de las presentes mencionó.

-SeokJin no lo dejaría por algo así de tonto -Nam habló, resoplando.

-Es verdad -Todos miraron hacía el pelinegro, quién habló-. además, sólo mírenlo, mi esposo parece sacado de una revista de moda... Ni siquiera el embarazo le hará perder su figura

El menor se sorprendió ante sus palabras. Eso había sonado demasiado natural.

-Pero no hablemos de eso, mejor disfrutemos el cumpleaños -Sun Hee se levantó para tomar las botellas de alcohol que habían llevado-. Siéntate, JungKook

El menor miró alrededor. No había ningún lugar disponible en la sala.

Sabía que si se negaba podría ser bastante obvio.

-Yo sé donde te puedes sentar -Sun Hee lo tomó de la mano y lo llevó hasta donde se encontraba SeokJin-. Listo, siéntate

Las mejillas del menor ardieron.
Sabía que lo hizo la última vez pero fue por venganza que nisiquiera pensó en los demás alrededor. Miró al mayor, quién tenía su mirada fija hacía otro lado.

-En realidad, yo... -Estuco a punto de negarse, creando cualquier excusa antes de que el pelinegro tomara su mano y prácticamente lo obligara a tomar asiento sobre su regazo.

JungKook se giró a mirarlo con sorpresa.

-¿Qué estás haciendo? -Pregunto entre dientes, fingiendo una sonrisa ante los presentes que rieron antes de conversar entre ellos.

-Ya lo hiciste una vez, ¿Qué más da? -Rodeo su cintura con sus brazos.

-No hagas eso -Le dió un manotazo, obteniendo un pellizco en el brazo por parte de SeokJin. Antes de que sigan peleando, uno de sus compañeros habló.