Unexpected love | JinKook {Omegaverse}

Capítulo dieciocho

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Era fin de semana, SeokJin y JungKook habían salido a hacer compras ese día, así que caminaban alrededor del centro comercial en busca de todo lo que necesitaban para la habitación de su bebé.

El fin de semana anterior se habían dedicado a pintar el cuarto de un tono lila, así que era momento de decorar la pieza.

Iban tomados de las manos. Fueron directo al área de bebés, mostrándose encantados de inmediato ante el sinfín de cosas que había.

-¡Mira esta cunita, Jin! -El menor corrió hasta la cuna color rosa.

-Es muy bonita, ¿Te gusta para Nuececita? -Lo rodeó por la cintura, sintiendo su vientre abultado.

-Si, creo que es ideal, parece una cuna de Princesas -Sonrió, admirando cada detalle de la misma.

-Perfecto, entonces compraremos esta -Beso su mejilla-. Llamaré a uno de los vendedores para que lo pongan en la cuenta, ahora regreso

JungKook asintió, dejando que se marche mientras él buscaba alrededor, maravillado con la cantidad de decoraciones que había para bebés. Encontró un par de ropita para recién nacidos, echándolo al carrito de compras que empujaba.

Iba mirando sin prestar atención al camino, justo cuando un carrito de conpras iba en dirección a él, con demasiada potencia. El sonido de las llantas sobre el suelo fue lo único que logró llamar su atención, provocando que se girara a ver a un hombre con sudadera negra y capucha, empujando el mismo, hacía su dirección.

Sólo se podía ver desde su mandíbula hasta su nariz y esa sonrisa que había visto semanas atrás, apareció en su rostro. Permaneció estático en su lugar, escuchando la risa proveniente del hombre. Le causó un escalofrío.

-¡JungKook, por acá! -La voz de SeokJin le hizo girar el rostro hacía su esposo, quién estaba a unos metros de distancia, llamándole.

Cuando volvió su vista hacía él pasillo donde se encontraba el hombre que había visto, se encontró con que ya no había nadie ahí. El pasillo estaba vacío.

No era la primera vez que le sucedía eso en el último mes. Pero todo parecía ser parte de su imaginación, de su cabeza.

Las primeras dos veces que le sucedió, SeokJin había registrado el lugar y no había nada.

Así que pensó en ya no comentarle, no quería que pensara que estaba paranoico por lo ocurrido antes.

Motivo por lo cuál pretendió que todo estaba bien, sonrió y se dirigió a su esposo, tomando su mano entre la suya con fuerza. Estaba inquieto y el Alfa lo notó.

-¿Sucede algo? -Le miró con cuidado, tratando de leer su rostro-. Pareces nervioso

-Es sólo que... Tuve un mareo, nada importante -Mintió-. ¿Podemos ir a comer algo y regresamos más tarde?

-Claro amor, vamos a comer algo para que te sientas mejor -Lo rodeó por los hombros-. Llevemos a pagar lo que hay en el carrito y regresamos después

JungKook asintió, colocándose entre el carrito y el cuerpo de su esposo, buscando sentirse protegido por él luego de la sensación de miedo que le provocó lo que había visto.

No sabía si todo era parte de su imaginación o si alguien de verdad buscaba hacerlo creer que había enloquecido.

Quería estar seguro antes de comentárselo a su esposo.

Fueron a un restaurante cercano a comer algo.
Habia experimentado más hambre en los últimos días, su vientre había crecido unos centímetros más en las últimas cuatro semanas. En 5 días era su siguiente Ultrasonido por sus seis meses de embarazo.