Capítulo II: Viamundi, el viajante

173 19 15
                                    

Cuando el Edo Tensei dejo de funcionar aquel misterioso ANBU que había perseguido a Naruto se quitó la máscara, su cabello rosa brillo bajo la luz de la luna y se adentró a la cueva lo máximo posible, el agua hecha por el segundo Hokage sumado a la pared de madera creada por el primero hubieran sido un problema de no ser por la enorme fuerza que poseía la chica. Al romper la pared pudo entrar a la parte secreta de la cueva, allí lo que encontró fue absolutamente nada, salvo un pergamino, lo recogió y examino con cuidado, al parecer estaba totalmente dañado, como sí al usarse se hubiera destruido por sí solo, solamente una palabra podía entenderse. — Viamundi...— Murmuro Sakura para luego enrollar el pergamino y guardarlo. Suspiro pesado, se acercó a la salida de la cueva y miro hacia la luna. — Espero que estes bien Naruto...donde quiera que estes...— Tras decir ello volvió a usar la máscara y emprendió el viaje hacia la aldea, debía notificar que Naruto Uzumaki había muerto.

Naruto, quien había cruzado la puerta se encontraba en lo que simulaba ser un gran pasillo, las paredes blancas al igual que la cerámica del suelo, no había ventanas y las puertas que se encontraban en el pasillo solo daba paso a una sala blanca completamente vacía. — Creo que hice mal el jutsu...— Comento algo decaído al ver que se encontraba en un callejón sin salida, pensaba que estaría atrapado allí para siempre pues la puerta por la que ingreso ya no existía.

— Oh, pero joven Naruto, no has hecho nada de mal, solo que no sabes cómo viajar — Una voz resonó por todo el lugar, algo que hizo que el joven ninja tomara una voz defensiva, dicha actitud solo provoco que la voz se riera para luego manifestarse.

La voz provenía de una entidad humanoide que se mostraba en reverencia, alta, como de unos dos metros y medio, llevaba un largo abrigo negro y una bufanda blanca, esta última combinaba con sus guantes, para finalizar el conjunto usaba un sombrero de copa y un bastón que como empuñadura tenía una rosa de los vientos. — Un gusto conocerte, soy Viamundi, aunque mis amigos me conocen como "El viajante" — La extraña entidad dejo de hacer reverencia para mostrar que tenía un solo ojo cuyo iris era rojizo y que por alguna razón daba la sensación de siempre observarte. — ¿A qué debo tu visita? —

El joven Uzumaki no sabía que sentir ante aquella presencia tan extraña, a pesar de verse amistosa era intimidante, su instinto le decía que no debía pelear contra aquella entidad por lo que, bajo su guardia, algo que hizo que Viamundi se mostrara complacido, sin embargo, aun parecía esperar la respuesta. — H-he venido...para...— Al estar frente a El viajante le costaba hablar, debía dar una respuesta, dar la razón de su visita en ese lugar. — ¡He venido porque necesito irme de mi realidad! — Exclamo con sus ojos cerrados y forzando su voz al mismo tiempo, provocando que tosiera un poco de sangre, aun sus heridas no sanaban en su totalidad.

La entidad examino al joven ninja por un segundo, incluso camino a su alrededor para finalmente golpear con su bastón — ¡Oh! Eres el Naruto Uzumaki de la variable a la que me encanta llamar ruina — Menciono haciendo aparecer una libreta de su sombrero, examinando su contenido. — Veamos...en esta realidad todo salió mal, Danzo en el poder...entiendo... ¡bien! ¿A dónde quieres ir? — Pregunto de una forma bastante curiosa y al mismo tiempo invasiva.

Naruto, quien no entendía nada antes de responder quiso hacer sus propias preguntas. — Espera... ¿variables? ¿a qué te refieres? — Pregunto de forma seri, deseaba respuestas sobre aquello.

La entidad suspiro y golpeo su bastón, frente a ellos un montón de puertas similares por las cuales ingreso Naruto se mostraron frente a ellos. — Todo mundo tiene un montón de variables, por ejemplo...— el dios golpeo con el bastón una de las puertas y mostro un mundo similar al de Naruto, solo que en este él era el Hokage. — En este mundo, todo salió bien para ti, salvo el corte de cabello y tuviste dos hermosos hijos con Hinata, en este otro...— Nuevamente el dios abrió una puerta al golpear con su bastón, allí se veía un Naruto que fue criado por sus padres, luego otra realidad donde fue adoptado por los Uchiha, luego una donde Danzo lo usaba como arma, habían cientos de puertas, cientos de variables de un mundo, todos e igual de reales que el original, tanto así que se podría cuestionar cual es el original — ...Como vez hay muchos tu pero solo un tú, así que te volveré a preguntar ¿A dónde quieres ir? Aunque te lo advierto...— Antes de seguir hablando la deidad cambio su tono, de un tono carismático, juguetón y amigable su voz se transformó a una serie, fría, despiadada, pero por sobre todo amenazante. — ...Sí pidieras ir a una variable de ti tendré que asesinarte, solo puede haber un tú, no es nada personal, pero hay ciertas reglas universales que seguir...ahora responde Naruto Uzumaki, es tu última oportunidad. —

El joven ninja se sintió realmente amenazado ¿leyó su mente y por eso le advertía? ¿de verdad lo asesinaría? ¿Por qué le advertía? Estas eran algunas de las pocas de las cientos de preguntas que cruzaban en la mente del rubio, sin embargo, estaba en un momento donde era todo o nada, no le servía irse a otra variable de su mundo, no quería ser perseguido por quien era, quería ser valorado por quien era, aunque también en el fondo deseara el poder estar con Sasuke una vez más, apretó una mano en su pecho y suspiro pesado, sabía que en su corazón le amaría y con ello le bastaba. — Quiero ir a un mundo donde me valoren quien soy, no por ser un Jinchuriki, no quiero que algunos me vean como un arma, quiero ser alguien que pueda ayudar a los demás, ¡por favor!, quiero estar en un mundo donde pueda ser un héroe y no ser visto como una amenaza. — Su voz llena de determinación provoco que la entidad cambiara su mirar amenazante y sonriera, quitando las puertas para solo mostrar una, esta se veía más moderna, enormes edificios estaban grabados mientras se veía a dos personas luchando, algo que Naruto pudo asimilar como un héroe contra un villano.

— ¡Bien, dicho! ¡Tu nuevo mundo te espera! — Exclamo antes de atravesarle con su bastón en el pecho, cualquiera pensaría que era un ataque letal, no obstante, no hubo dolor, Naruto solo sintió como sus heridas se curaban. — No puedo enviarte con tus poderes, desbalancearías el mundo así que te he quitado tu chakra para siempre, aunque ahora tendrás un Don o Quirk, creo que le llaman, también te daré el conocimiento básico para usar la tecnología del mundo al que llegaras. La verdad no he ido mucho a ese mundo, pero sí puedo decirte algo, este mundo tuvo una gran guerra del bien contra el mal, se está reconstruyendo, espero que puedas adaptarte...ahora si me permites destruiré lo que saque de tu pecho — En la punta del bastón se podía observar la puerta que Naruto uso, estaba en miniatura con un aura similar al Chakra, Viamundi alzo la puerta y golpeo con su bastón, destruyendo no solo su chakra si no también su conexión con su anterior hogar. — Antes de partir ¿una última pregunta? —

— Si — Afirmo el rubio quien ya no poseía miedo, solo determinación a avanzar — ¿Qué sucederá con Kurama? — Pregunto acercándose a la puerta para abrirla.

— ¡Oh! ¡Casi se me olvida! — Exclamo de forma juguetona la deidad — Sí no despiertas a Kurama morirás, mientras sientas el vínculo todo ira bien pero cuando dejes de sentirlo solo tendrás 48 horas de vida, luego tu cuerpo simplemente morirá, adiós, Naruto Uzumaki, estaré viajando para ver tu nueva vida ~ — Musito antes de que Naruto le preguntara de nuevo chasqueo sus dedos para encerrarlo en un oscuro ovalo de color morado, la puerta se abrió y aquel ovalo donde estaba Naruto desapareció junto con él.

Cuando Naruto abrió sus ojos lo primero que vio fue un puño que se detenía frente a sus ojos, este parecía provenir de un muchacho de rojizos cabellos y de una piel muy peculiar, como si fueran filosas rocas, ello llamo la intriga del ninja quien perdió el conocimiento tras verlo, el cansancio de todo lo vivido hizo que su cuerpo no resistiera más cayendo sobre aquel misterioso muchacho.

Un Hilo Entre Dos MundosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora