20 de mayo, 2286
Nuevo fuerte AS,
Montaña calva,
Nevada, EE.UULa piel se le erizaba a cualquier presente. Era fuerte, imponente. Cada estructura perfectamente construida sin daño alguno y en tiempo récord. El fuerte Anti-Sekunder al fin estaba listo.
—Es impresionante—dijo Anthony sonriendo mientras tocaba la firme pared de madera—. Los obreros inutilia hicieron un gran trabajo. Este fué el mejor regalo de cumpleaños que pude haber pedido hace un mes...
—Tienes razón—Azul también se acercó a la pared—. ¿Cuando podrán venir los reclutados, Tony?
—Aldavinski se está encargando de eso. Está haciendo muy bien su trabajo—Sacó de su chaleco una libreta—. Programé la citación para hoy a la tarde. No estamos tan lejos del valle, llegarán rápido. Sugiero que nos quedemos aquí a esperar.
Los dos entraron. Adentro no había más nadie.
El fuerte de entrenamiento era muy espacioso. El patio central abarcaba un gran terreno, y sus cuatro torres (que a su vez funcionaban de pilares) superaban la docena de metros. Abajo, enfrente del pasillo que comprendían los cuatro baños, estaba la sala de primeros auxilios, una pequeña cocina y una sala común donde remarcó Anthony que allí funcionaría la secretaría de comunicación. En la planta uno habían habitaciones espaciosas, con dos literas por habitación. Más arriba, en las plantas dos y tres habían más habitaciones, pero no todas eran para dormir: las habitaciones especiales, frente a las otras, servían para guardar sus armamentos de arquería, para internaciones de salud, para lectura, y principalmente para breves descansos.
—...y podría seguir describiéndote pero es mejor que lo descubras por ti misma—Los dos se detuvieron la cocina—. Pedí licencia en mi trabajo. Quiero dedicarme a esto del completo... Realmente me quiero comprometer.
—Agradezco tu compromiso, Anthony. Eres muy valiente—Chocaron puños—. ¿Sabes? Nos debemos hablar sobre todas las cosas que pasamos... Y pasaste, lamentablemente.
—Es una historia cruel. Sin embargo estoy bien así. Agradezco que sobreviví para que ellos no sintieran tal dolor. Así es la vida... Esta vida muerta.
Azul puso su mano en el hombro de él. Anthony era considerablemente más bajo que ella.
—Pase lo que pase, cuentas conmigo. Cómo "chasovoy" y como amiga. ¿Sí?
—Gracias, Azuli.
La conversación terminó con una cálida sonrisa y un fraterno abrazo. Sin duda Azul era parte de la familia que Anthony eligió.
Las horas de la mañana pasaron, al llegar el mediodía, los dos optaron en volar para el valle.
***
La tarde había llegado prejuiciosa, sin ningún solo recluta presente en el fuerte. Anthony y Azul, preocupados por la falta de compromiso, llegaron hasta la casa de Aldavinski: el encargado de transportarlos hasta allí. Golpearon la puerta de su hogar.
—Chicos...—exclamó Laia Lazy sorprendida recibiéndolos en su hogar.—Azul, ¡hola! ¿Cómo has estado querida? Me enteré de que volviste pero jamás has pasado por casa...
La joven esquivó la mirada. Titubeó algo indiferente. Anthony la sacó del apuro.
—Laia, ¿está Aldavinski? Es urgente, estamos demorados.
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El Retorno De Los Sekunders© | Exanimun #2
FantasyAzul Vancouver ha recuperado su nombre, pero su identidad sigue siendo un enigma. Atrapada entre la sombra de quien fue y el destino que le han impuesto, cada paso hacia adelante la sumerge en un abismo de dudas. ¿Quién es realmente bajo el manto de...