Sasuke
Se que revisar el celular de otra persona está mal pero... Cuando se trata de Sakura no importa nada, solo quiero saber de ella, quiero saber porque su aura siempre está apagada, porque siempre parece triste. Necesito una explicación a todo ésto. Sigo revisando la calculadora pero solo encuentro unas grabaciones. Con todo el miedo que no se porque es, los reproduzco.
—Estoy cansada
Con solo escuchar esas palabras siento que el corazón se me aprieta. Esa no es la Sakura que conozco, esa Sakura no es la misma indiferente. Esa Sakura está destruida. Deja de hablar porque apenas lo hace se le quiebra la voz.
—Joder... No se que me pasa, solo... Estoy cansada, ya no puedo comer bien, por las noches casi no duermo y cuando lo hago no paro de soñar y eso es tan agotador. Sueño tonterías pero esas tonterías cansan. Letras moviéndose a toda velocidad, películas de acción, sirenas, hadas y duendes... Todo eso cansa. ¿Porque me siento sola? Tengo a toda mí familia conmigo. Entonces ¿Porque siento que soy invisible? ¿Porque estoy tan cansada?
El audio termina pero antes de eso, puedo escuchar claramente como se rompe, susurra la misma palabra "estoy cansada". El audio llega a su final. Miro mis manos y están temblando, una gota cae al suelo y me doy cuenta de que estoy llorando. Se que es ella la que sufre pero yo no puedo evitar llorar, es como si todo lo que ella sintiera yo lo hiciera igual. Veo que hay otro audio pero de dos días después. Lo reproduzco y... Está llorando.
—Tres de septiembre del año 2023. Wow, no ha pasado mucho ¿Verdad?. Son las 18:31, tuve otro bajón emocional, ¿Porque? No lo se, solo lo tuve. Adivina, ¿Quién crees que entró al instituto? Si, yo. Mamá tuvo que cambiarme porque la verdad es que quería cambiar de ambiente. Pero eso no es lo importante. Cuando llegue a esa escuela vi a un chico que me pareció súper lindo, la verdad es que lo vi en el autobús escolar pero no quise hablarle porque me daba mucha pena —en medio del llanto, se ríe — así que no hable con el. Pero lo peor que me sucedió ese día fue un grupo de chicos me intimidaron, todos estos años aprendí a manejar mís emociones. Me estaba muriendo por dentro pero por fuera parecía imperturbable. Ellos se burlaban diciendo que sí me ocultaba seguro era porque era feo. Si, ellos pensaban que era un chico. La verdad es que llevaba esa ropa y no el uniforme porque venía a hablar con los profesores para que me pusieran al tanto de las clases. Después de que esos chicos se burlaran de mí, salí del instituto, y como siempre, me encerré a llorar en silencio, nadie sabe que cuando yo cierro esa puerta, me rompo en mil pedazos y...
Antes de que pueda entender que pasa, siento que me voltean la cara de una bofetada, me vuelvo hacia Sakura que está roja de la irá, pero eso no es lo importante, sino sus ojos llenos de lagrimas, y me duele el pecho porque yo soy el motivo de sus lagrimas, todo por ser un entrometido que no sabe respetar la privacidad. Intentó quitar las lagrimas de su rostro pero ella se aparta, me quita el celular de las manos y sale corriendo. Voy detrás de ella pero cuando salgo al pasillo lo único que puedo ver es la puerta de la casa cerrarse con fuerza. Intentó seguirla pero mamá se me atraviesa con esos ojos que ahora no aparentan más que frialdad.
—¿Que hiciste? —pregunta directamente
Intentó esquivarla para poder seguir a Sakura pero ella hace que retroceda por la fuerte bofetada. Parece que hoy es el día de "peguenle a Sasuke".
—Dime. Que. Coños. Hiciste.
La pregunta sale lentamente de sus labios, su voz no tiene emoción pero se que se está conteniendo para no lanzarme la sartén en la cabeza. Está noche sera larga.
Sakura
Salgo de la casa de Sasuke sin mirar atrás. Solo quiero darle un puñetazo por entrar en mí celular, el no tenía derecho a escuchar ni leer mís sentimientos. Porque sí, cada vez que tengo un bajón emocional escribo para desahogarme. Las lagrimas no dejan de caer por mí rostro, no se hacía donde voy hasta qué paro de correr. Me limpio las lagrimas y es ahí cuando me doy cuenta de que vine a la casa de Ino. Ella es mí mejor amiga desde que tengo memoria pero hace mucho tiempo que no nos vemos. Sin pensarlo dos veces toco su puerta para no arrepentirme después. Espero un rato hasta que escucho sus pasos acercándose, cuando abre la puerta se queda petrificada cuando ve que soy yo. Nos quedamos un momento en un silencio incómodo, hasta que ella por fin reacciona y corre a abrazarme, me aprieta contra ella y no puedo más, me rompo a llorar.
Ella sin preguntar nada, me lleva hacia adentro. Abre la puerta de la casa y me doy cuenta de que no está sola. Hinata está en el sofá con un chico que no conozco, pero empiezo a preocuparme cuando veo que los ojos de Hinata están hinchados. Ella me ve y deja de llorar al instante. Corre hacia mí y nos abrazamos con fuerza.
—Hermana
Ustedes dirán; ¿Que paso aquí? Pero eso lo sabrán en el próximo capítulo, no olviden dejar su voto para actualizar más rápido