23. Brett Talbot

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♥︎The Little Ones Fall In Love♡︎

Omniscience

Scott pensó que sería buena idea dar un paseo por el bosque con su manada y convencer a Isaac para que Derek también fuera. Lory y Brett también estaban allí. No fueron mordidos por algún alfa de allí –aunque Derek ya no lo fuera– eran de la manada después de todo por lo que pasaron. Hasta Theo estaba allí. Con mucho esfuerzo todos consiguieron confiar en él.

Después de que Jackson llegara hacía unos días pensó que sería buena idea pasar la tarde con ellos y ponerse al día con todo lo que pasó.

—Vamos, chicos, será divertido —hablaba, intentando darles ánimos—. Hanna, ayúdame —la rogó en un susurro.

—Te va ayudar papá —dije con burla—. Estoy aquí, contigo, un puñado de hormonales y el chico que me gusta —se quejó su hermanita.

—Primero: tú eres la primera hormonal que para eso estás en la edad, segundo: ¿¡cómo que te gusta alguien!? —gritó, llamando la atención de todos.

—La pequeña McCall está enamorada —se bruló Theo.

—Callate bobo —le sacó la lengua e, inconscientemente, arrugó la nariz.

—Hanna, apenas tienes quince años ¿cómo puedes estar enamorada? —curioseó Jackson.

—No no no, la pregunta es ¿de quién estás enamorada? —Stiles se metió en la conversación.

—De nadie —susurró la más pequeña.

Todos pararon en un pequeño lago donde habían algunas mesas.

—Creo que la información no llegó al final —habló Isaac—. ¿Qué es eso de que Hanna está enamorada? —se rio.

En el paseo estaban en fila como en una excursión de primaria, por lo que a Derek, Isaac y Liam, al estar al final, no se enteraron de lo que hablaron.

—¿¡Cómo!? —gritó Derek.

—Van a matarlo —Hanna posó su cabeza en la mesa haciendo un sonoro ruido.

—Entonces es verdad —sonrió juguetón Liam.

La cara de Hanna se quedó blanca lo que sorprendió a todos, normalmente sus mofletes estaban rojitos y –en esa época con la alergia– tenía la nariz del mismo color.

—No... —dudó, intentando mentirles.

—Hanna, estás rodeada de hombres lobo, una mujer coyote, un kitsune y una banshee ¿crees que puedes mentirnos? —Stiles elevó una ceja, fijando su mirada en su amiga.

—No estoy mintien... —no pudo continuar porque un ataque de estornudos se apoderó de ella.

—Estás bien —Brett se levantó rápidamente y puso su mano en su espalda—. ¿Qué te pasa? —la miró preocupado.

—Sí, estoy bien —susurró, tapando su cara.

—Creo que ya sabemos quién es el amor de la enana —habló Jackson, observando como varios de los lobos querían matar al rubio con la mirada.

—¡No me llames ena...! —y volvió a estornudar, ganándose una risa del mayor.

—Así es difícil tomarte en serio —la señaló, riéndose.

—¡Te odio! —le gritó, se levantó y se alejó un poco de la gran mesa.

—Espera, Hanna —se giró y, al ver a su amigo rubio acercarse, sonrió.

—¿Qué pasa?

—¿Te gusta Brett?

—Creo que está claro, Liam.

—Te lo dije —grito, mirando hacia atrás.

Allí estaba Brett, sentado dado la vuelta, obserbandoles. Con su oído tonificado oyó la corta conversación de los amigos.

—¿Por qué sois así? —se quejó mientras volvían a la mesa.

—Vamos, Hanna, si los dos os gustáis debéis salir, pero si no lo decís nunca pasará nada —rio Lydia.

—No me caéis bien —Liam se alejó de Hanna y ella se sentó a la orilla del lago.

—Tranquila, no sabe donde estamos, no molestaran —la tranquilizó el mureno que tan loca la volvía—. Amm... ¿Es verdad eso de que te gusto?

—Como si aún no lo supieras —suspiró cansada—. Sí, me gustas.

—Es que, te quería decir que... —Hanna le miró curiosa, esperando con ansias que terminara—. Que tú también me gustas —los cachetes del chico se volvieron rojos.

—¿En serio?

—Desde que te vi, pero cuando me dijeron que eras hermana de Scott, supe que no podía estar contigo, él es un alfa y no creo que le hiciese gracia que su hermana saliese con un hombre lobo... Bueno, a nadie Le haría gracia.

—Eres un bobo —carcajeé—. Te queda muy bien el pelo negro —dije, acercándome a su cara.

—¿Si? —sonrió.

—Sí.

—Entonces me lo teñiré así siempre —se acercó.

—¿Por mi?

—Sí, por ti —sonrió de medio lado y me besó.

—¡Siii! —gritaron, nos dimos la vuelta y ahí estaban Kira, Lydia y Malia, esta última grabando.

—¿Queréis grabar algo que sea interesante? —lo besé durante unos segundos y las chicas se sorprendieron.

—¡Se lo enseñaré a tu hermano! —gritó, corriendo con el teléfono.

Teen Wolf One ShotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora