Fuerzas naturales | FreenBecky

Loi Krathong

Freen estaba paralizada.
No podía creer lo que sus ojos veían.
Ahora todo tenía sentido. Por eso el rostro de Becky siempre le parecía familiar.

La chica estaba parada en el medio del pequeño pasillo de revistas de la tienda, mientras compraba snacks, mirando fijamente la tapa de una publicación.

Estaba todo en tailandés, salvo por el nombre "Kazz".
Pero lo más llamativo eran las dos chicas que posaban en el frente: Una era alta, con la piel que parecía de porcelana, penetrantes ojos verdes, pómulos marcados y labios exuberantes. Y la otra, sentada y mirando a la cámara con una mirada café profunda...era Becky.
Freen sintió que se le cayó el alma a los pies.

¿¡Cómo no la había reconocido!?

Ella había visto una serie tailandesa donde estaban Becky y la otra chica, de la que ni recordaba el nombre. Había pasado un año casi, y honestamente había visto algunos capítulos por insistencia de su hermana, pero recordaba ahora claro como el agua las escenas.

Había rescatado a una estrella de televisión.

No sólo había rescatado. Había curado las heridas, peleado, convivido, besado y...oh Dios. Todo lo que había hecho. Con una actriz tailandesa.

No es que a Freen le importara demasiado eso de la fama, de hecho todo lo contrario. Ella era más del estilo de mantener perfil bajo.
Pero si ella creía que tenía alguna oportunidad de tener una relación con Becky...podía ir olvidándose de ello.
Becky seguramente tendría miles de pretendientes. Hombres, mujeres, de todas las estaturas, colores y, sobre todo, estatus. Actores, actrices, modelos, cantantes.
Y ella era...Freen. Sólo Freen.

Podía pensar que al menos le parecía lo suficientemente atractiva como para pasar la noche juntas...claro, pero eso fue porque la pobre chica no recuerda del todo quien es. De recordar que es una actriz famosa, muy probablemente no hubiera tenido sexo con Freen.

No sólo eran de continentes diferentes. Eran de mundos completamente diferentes.

Freen podía sentir como su corazón se apretaba en su pecho. Como su ilusión se disolvía en la dura realidad.
Y ahora, ¿qué le diría a Rebecca?
Sería muy extraño que ella le diga "Hey, descubrí quién eres. Eres una actriz famosa."
Suena estúpido.

¿O sería mejor simplemente acompañarla hasta que encuentre a su familia, y despedirse?
Dios, de sólo pensar en ello sentía el dolor en el pecho.
¿Cómo era posible que haya desarrollado tantos sentimientos por la chica en tan poco tiempo?
¿Y ahora cómo la vería a la cara?

El hombre de la tienda la mira curioso, como esperando a que termine su compra.
Freen toma la revista y decide comprarla. No sabe muy bien por qué. Quizás sólo la conserve como un recuerdo de Becky cuando ya no pueda verla.

Regresa a la camioneta después de pagar por el combustible y allí ve a Rebecca que la mira con una sonrisa nerviosa, mientras Freen no puede mantenerle la mirada por mucho que lo intente. Ahora que sabe que es famosa, se siente perseguida de que alguien la reconozca, y la actriz se quede más confundida si aún no recuerda ese detalle de su vida.

-Freen, me preguntaba si podemos pasar por el río- aventuró a pedirle, pero sin querer decirle para qué.

-Ehm, pues, supongo. Aunque en realidad deberíamos decidir a donde ir...por tu familia, no crees?- responde dubitativa, todavía rehuyendole la mirada.

Becky se desilusionó un poco con la respuesta. Freen parecía un poco distante, y era lógico después de haber tenido que soportar su comportamiento todo el día.

En otro momento, siendo la antigua Becky, simplemente se hubiera limitado a responder que tenía razón y mantendría sus pensamientos para ella misma.

Pero algo le decía que ya no quería ser esa Becky. Quería expresarse, quería decir lo que deseaba. Quería ser la chica que había sido esas semanas junto a Freen.