Fuerzas naturales | FreenBecky

Reencuentro

Bueno, estamos en buena racha, y los analgésicos no me estan durmiendo tanto 😅
Ya sólo quedan 2 capítulos mas!!

Disfruten!

P.D.: No sé si el video tenga mucho que ver, pero usaré cualquier excusa para escuchar a Becky cantar😍

Dinamarca, 3 meses después

–Nop! Qué más debo llevar de aquí?– exclamó Freen en dirección a su amigo, que estaba demasiado concentrado en su libreta como para darle indicaciones.

Así era Nop. Cuando se enfrascaba en la creación de un trabalenguas, difícilmente prestaba atención a algo más. El problema era que Freen estaba algo apurada como para esperar a que su amigo terminara.

Se acercó al inventor con la clara intención de sacudirlo de su mundo de palabras.

–NOP!– gritó, mientras lo zarandeaba, recibiendo una mirada confundida y alarmada del chico, haciendo que hasta los anteojos se resbalaran por el puente de su nariz.

–Freen! Qué? Cuándo llegaste?!– preguntó genuinamente confundido.

Freen giró los ojos, dejándolos en blanco un momento, mientras tomaba aire profundamente antes de contestar.

–Nop, hace dos días que estoy aquí. No puedes abstraerte tanto con esas cosas. Un día de estos pasaran meses y ni siquiera te darás cuenta!– reclamó, intentando cerrar la libreta para obligar al chico a ayudarla.

–No exageres! Sabía que estabas aquí, era una broma...– dijo intentando sonar creíble, pero recibiendo una mirada escéptica de su amiga.

–Si claro. Vamos, ayúdame a encontrar las partes que faltan así llevo todo. Enviaras las instrucciones en el paquete, o finalmente usarás la tecnología?–

–Estas demente como cabra que salta del muelle– respondió, descartando la idea con un además de su mano, mientras miraba las partes de su invento empacadas.

La aviadora simplemente rió ante la extraña respuesta. Su amigo siempre respondía con frases que nunca había escuchado en su vida, no tenía ni idea de dónde las sacaba.

–Bien bien señor "me robaran mis ideas"...entonces, tengo que llevar algo más?–

–Oh si, necesito que lleves una caja con libretas a mi cabaña. Aquí ya me estoy quedando sin espacio– explicó, mirando a su alrededor, buscando la caja de la que hablaba.

–Si sabes que podrías escribir todos tus trabalenguas en un drive de Google, no?– preguntó Freen, arqueando una ceja, y ya anticipando la respuesta del chico.

–Estas loca?! Google son los primeros que querrán robar mis trabalenguas para sus estúpidos juegos. No no, no es seguro– respondió escandalizado.

La chica negó con la cabeza divertida. Había extrañado mucho a Nop y sus ocurrencias.

En ese momento, una llamada comenzó a sonar en su celular.

–¡Bunny! ¡Por fin te encuentro! Estaba preocupada. ¿Cómo estás? ¿Estás cerca del terremoto?– exclamó Amanda a toda velocidad.

–Hola Amanda. No, no estoy en Tailandia ahora. Estoy en Dinamarca–

–¿Dinamarca? ¿Por qué estás en Dinamarca? Ah, eso explica por qué logré encontrarte. ¡Es una pesadilla intentar llamarte con la diferencia horaria!– reclamó, y Freen podía imaginarla haciendo un tierno puchero.