Estaba llegando al hospital después de resolver algunos asuntos pendientes, pero desde la mañana sentía un nudo en el pecho. Había peleado con Adána, y sabía que era mi culpa. Ella había pedido ir despacio, pero yo fui demasiado intenso. El hecho de que estuviera embarazada complicaba las cosas aún más. Sus hormonas estaban alborotadas, y yo debería haber sido más comprensivo. No debí gritarle ni hablarle de esa manera.
Me sentía estúpido. ¿Un mafioso con miedo de su propia mujer? Quién lo hubiera pensado. Toqué la puerta de su habitación suavemente, pero no hubo respuesta. Intenté nuevamente, pero el silencio persistió. Decidí entrar, tratando de ser respetuoso y darle su espacio.
Al abrir la puerta, me encontré con la cama vacía y perfectamente tendida. Mi corazón comenzó a latir con fuerza en mi pecho, mientras una sensación de pánico se apoderaba de mí. Corrí al baño, pero tampoco estaba allí. La angustia me invadió y salí corriendo para buscarla.
Cada paso se sentía como un martillazo en mi pecho. Mi corazón latía con tanta fuerza que parecía querer salirse. Mi mente daba vueltas y mis pies temblaban mientras recorría los pasillos en busca de Adána.
Finalmente, vi al doctor y lo agarré con fuerza de la bata. Mi voz temblorosa se llenó de rabia y miedo al preguntar por ella. No podía permitirme perderla. Mis palabras salían con dificultad, mezcladas con el temor de no encontrarla. Y cuando el doctor respondió, la sensación de alivio fue abrumadora, aunque su explicación no hiciera desaparecer por completo mi ansiedad.
Alek: ¿Dónde está mi mujer?
Doctor: Señor, por favor, cálmese. Su esposa ha salido del hospital.
Alek: ¿Cómo que ha salido? ¡No puede ser! ¿Por qué no me han avisado?
Doctor: Señor, entendemos que esté preocupado, pero su esposa estaba en condiciones de alta. Habló conmigo y decidió irse por su cuenta.
Alek: ¡No puede hacer eso! ¿No sabe que está embarazada? ¡No puede simplemente marcharse así!
Doctor: Entiendo su preocupación, pero ella parecía decidida. Me aseguró que tenía un lugar seguro donde ir y que se encargaría de cuidar de sí misma.
Alek: ¿Y cómo sabe que eso es verdad? ¿Qué si le pasa algo? ¡No puedo perderla, no ahora que está embarazada!
Doctor: Lo siento, señor, pero no puedo retener a un paciente contra su voluntad si está en condiciones de marcharse. Le recomiendo que trate de comunicarse con ella y resolver esta situación de manera calmada.
Alek: (frustrado) ¿Y qué hay de nuestro hijo? ¿Qué pasa si algo le sucede a él?
Doctor: Estoy seguro de que su esposa también está preocupada por su hijo. Le sugiero que trate de hablar con ella y resolver este asunto lo antes posible.
Alek: (suspirando) Está bien. Haré lo que pueda para encontrarla. Pero si algo le pasa, si algo le pasa a ella o a nuestro hijo, no habrá lugar en este mundo donde puedan esconderse.
Doctor: Entiendo su preocupación, señor. Haré lo posible por ayudarlo en lo que pueda. Por favor, trate de mantener la calma y buscar una solución pacífica a esta situación. Además ella salió de aquí con un hombre.
Alek: (frunciendo el ceño) ¿Cómo es ese hombre?
Doctor: Bueno, era alto, rubio, de tez blanca y ojos verdes esmeralda. Tenía un tatuaje en forma de una constelación en su brazo derecho... Ah y la estaba tomando de la cintura.
Alek: (apretando los puños) ¿La estaba tomando de la cintura, dices?
Doctor: Sí, así es. Parecían estar bastante cercanos... El le estaba limpiando las lágrimas.
Alek: (con rabia contenida) ¿Y hacia dónde se dirigían?
Doctor: Lo siento, señor. Salieron por la puerta y los perdí de vista. No pude ver en qué dirección se marcharon.
Alek: (respirando profundamente para calmarse) Está bien. Gracias por la información.
Doctor: Lo siento mucho, señor. Si hay algo más en lo que pueda ayudar, no dude en decirlo.
Alek: (asintiendo) Entendido. Haré todo lo posible por encontrarla.
ESTÁS LEYENDO
El Palacio De Las Mariposas Y El Eden De Las Espinas.
RandomEl palacio de las mariposas y el Eden de las espinas. Sinopsis: En el vibrante corazón de la ciudad, donde los destellos de luces danzan como estrellas en la noche, se entreteje una historia de amor, amistad y desilusión. Adana, una joven soñadora c...