¡Vida Adolescente!

Tiempo Despues

La vida me ha dado muchos golpes y bastante dolorosos, quizás de ellos aprendí un poco, mi primer golpe en el corazón, y claro que estoy hablando de manera metafórica, fue cuando creí estar enamorada de verdad, y ese hombre me partió el corazón, era un capricho el cual tenía, así que de eso aprendí cuando realmente estas enamorada de alguien lo sientes, tu corazón te confunde bastante que en ocasiones crees sentir algo cuando en la realidad todo es completamente diferente, y lo comprendí en el momento que empecé a conocer a David, sentía algo completamente diferente, y fue ahí donde descubrí el verdadero significado del amor, te sientes tocando el cielo con tus manos, eres un ser indestructible ante el resto del mundo, pero junto a él eres tan frágil que esa persona puede acabar con el más  mínimo de tus sueños y te das cuenta que ese ser hizo parte de ti y abarco toda tu vida, pues todos los sueños se te derrumban y esto ¿ por qué? Sencillamente porque él hace parte de cada cosa que quieres hacer en tu vida y si ya no está, no tienes un rumbo, no sabes que hacer, y eso es lo que me sucedió con David, y el golpe más duro de mi vida diría yo, fue la perdida de mi abuela, tienes una compañera, una confidente, alguien que te comprende, te corrige, y de un momento a otro la pierdes, y no hay algo que puedas hacer para recuperarla, o al menos para tenerla un instante, solo un segundo, abrazarla y decirle lo mucho que la amas, mirarla a los ojos y grabarte esa cara de ternura, para tenerla toda tu vida allí en la mente, y al perder esa persona tan especial, crees que todo se pone en tu contra, ese es el instante donde comprendes el valor de estar con alguien que amas, compartir, reír, llorar, quizás te culpes por no decirle todo lo que te falto decir, pero ya es tarde y la triste realidad es que nunca tendrás a ese alguien nuevamente a tu lado, lo que comprendí con esta dura lección de mi vida, es que debemos apreciar todos los momentos con cada una de las personas que amamos y debemos decirle cuanto los queremos, no importa si es un día cualquiera.

Han pasado cuatro largos años y mi vida ha cambiado bastante, así como les decía tiempo atrás, ya no soy la misma Sara y ya comprendieron el porqué, soy una mujer de veinte años, he acabado mi carrera hace poco, le cumplí el sueño a mi abuela, cosa de la cual me siento muy orgullosa, sigo viviendo con Tyler en mi casa, y soy su prometida, el tiempo me enseñó a quererlo, aunque para ser sincera no lo amo, pero sé que tendré una buena vida a su lado, mis amigas cada una tiene su hogar y ya soy tía de dos hermosas princesas, ya nos vemos más a menudo, ya que cuentan con un medio de transporte, porque la verdad nunca he vuelto a mi ciudad, primero por todos los problemas con Clara y David, que nunca los volví a ver, igualmente con mis padres que no he sabido nada de ellos, siempre me pregunto ¿por qué me juzgaron tanto?, la forma de vestir, no hace más ni menos persona a alguien, simplemente son gustos que cada uno tiene y se deben respetar.

Tengo un trabajo como coreógrafa ya que me incline mucho por el baile, tengo un grupo y pronto llegaremos a Estados Unidos, a competir, tengo una vida casi que envidiable para los demás, pero en realidad, tengo mi orgullo de que he sacrificado mucho y he luchado bastante por ser quien soy ahora.

Tyler se encuentra trabajando, él se inclinó más por la música y tiene su propio grupo, dicta clases de guitarra, y es algo que enserio le apasiona, mi celular de pronto empieza a sonar, creía que era una llamada de él, pero al mirar la pantalla es un número desconocido, decido contestar, pues quizás es algo importante, pensé.

Inicio llamada

—     ¿sí?

—     ¿señorita Sara?

—     Si, con ella

—     Hablamos desde el hospital central, sus padres llegaron aquí, y encontramos en sus documentos, su número, dice que es su hija, así que debe venir aquí urgente

—     ¿Cómo así?

—     Señorita debe calmarse y reaccionar aquí en el hospital le contaremos todo, que este bien.

Final llamada 

¿Mis padres?, me encontraba en un estado de shock, hace muchos años no sabía nada de ellos, y tener que recibir noticias de esta forma, me pone muy mal, no les guardo rencor porque fueron  los que me dieron la vida, y gracias a ellos pude tener un techo y comida por más de diez años de mi vida,  al reaccionar tome mi móvil y llame a Tyler que al instante me respondió y se dirigió a toda prisa hasta mi casa.

—     Sara estoy contigo, vamos ya 

—     Tengo miedo tayler — digo con mi voz temblorosa

—     Estaré contigo mi princesa — dice Tyler y me da un abrazo muy caluroso.

Empaque mis cosas más importantes, nos subimos en el carro y deje que Tyler manejara, ya que me encontraba muy nerviosa, el camino era largo y la espera se hacía cada vez menor, llegar al lugar que por tanto tiempo fue mi hogar me daba muchos nervios y más el miedo de saber el estado de mis padres, los amaba eso no lo negaba,  tenía la esperanza de encontrarlos con bien y que todo esto fuera solo un susto; después de unas largas horas llegamos al hospital, me dirijo a la recepción y pregunto por mis padres, la enfermera me dice que me siente  en la sala de espera mientras llama a la doctora, abrazo fuerte a mi prometido, hasta que veo a la enfermera venir caminando hasta mi lugar acompañada por la doctora, en ese momento siento mis piernas temblar, pero soy fuerte y me pongo de pie, nunca soltándole la mano a Tyler.

—Señorita Sara, buena noche, sus padres sufrieron un atentado, su casa fue incendiada con ellos dentro, sus heridas son de un grado alto, debe tener resignación, sus horas son contadas, puede pasar a verlos, están conscientes,  lo siento.

Esas palabras me dejaron tan mal, que cada vez que caminaba, veía menos, mis lágrimas no dejaban de salir y mi pecho me pedía a gritos que respirara bien, ya que me sentía muy ahogada, ¡mis padres!, años sin verlos y estaba a punto de hablar con ellos, quizás , era una oportunidad de reconciliarnos antes de que partieran.

Gracias a todos por su apoyo, esta historia ya casi llega a su final, faltan unos cuantos capítulos, pero habrán muchas sorpresas gracias a todos...