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—No me interesa la venganza — lo miraste directamente
—Deshonraz a los tuyos
Te paraste del pequeño banco, te situaste frente él y te cruzaste de brazos
—Conocía perfectamente a mis padres, Scorpion, y sé que se sentirían más deshonrados de mi si hiciera algo así...además...mírate
Sabías que él fruncía el ceño, a pesar de que el tipo de casco tapaba casi toda su cara.
—Estás lleno de ira...rabia...— pausaste — hazle caso a Raiden, dale prioridad a otras cosas...tienes una segunda oportunidad de vivir...agradece eso — finalizaste algo triste para después voltearte, empezaste a caminar
Verías a Johnny y Raiden en el templo, ya que creían que ese lugar no era seguro para ti. Aún te seguías preguntando cómo es que te habían dejado con Scorpion...la respuesta era que pasarías más desprevenida. Raiden se aprovechó de la situación y pensó que Scorpion solamente lo conocían como alguien que estaba lleno de ira.
—¿Por qué debería de agradecer algo que yo no pedí?
Suspiraste
—Por algo pasan las cosas...yo lo llamaría destino — comentaste convicente sin voltear a verlo
Ambos ya se dirigían rumbo al templo.
—Destino...una palabra que usaba mucho mi familia
—¿Crees en el destino? Scorpion — preguntaste serena mientras lo mirabas de reojo
—No
Alzaste levemente una ceja para después mirar al frente.
—Bueno, cada quien
En cuanto a tu relación con él, al menos ya habían avanzado mucho en cuanto a la comunicación. Tú ya sabías su historial familiar gracias a Raiden.
—¿Scorpion? — preguntó confuso — ¿Por qué te interesa saber sobre su pasado?
Y aún tratabas de acostumbrarte a estar en ese mundo, ya que había lugares en los que había mucha sangre, además de ese tonto torneo que igual se lastimaban hasta morir. El camino hasta el bosque fue silencioso, mirabas a los árboles próximos y solamente veías que tenían cara de muy pocos amigos. Sí...parecían árboles de Disney en su versión malvada...ultra malvada.
—Se parece al bosque de Japón — murmuraste mientras tratabas de evitabas ver a ciertas personas a lo lejos
Él estaba por decirte algo cuando oyeron un tipo disparo, tú rápidamente te acercaste hacia él, tomándolo del brazo.
Ay por dios, que brazote — pensaste
Se acercaron un poco más hasta que vieron a Kano, estaba probando armas de contrabando. Sabías que era él porque lo habías conocido recién habías llegado al lugar y fue la primera persona en caerte mal.
—Vaya, vaya, pero miren a quién tenemos aquí — murmuró divertido mientras daba a sostener el arma a un robot
Rodaste los ojos
—No queremos problemas, Kano — respondiste mientras soltabas del brazo a Scorpion — sólo vamos a pasar y nos olvidaremos
—Awww, ¿estaban teniendo una cita? — se acercó aún más a pasos lentos — ¿A dónde la llevaste Scorpi? ¿Al infierno? ¿Hicieron un lindo picnic en el infierno? — empezó a reír — espera...espera...¿charparon ahí mismo? — hizo una mueca
—No estamos para tus bromas, nos vamos — trataste de ignorarlo pasando al lado de él hasta que te tomó del brazo y te empujó, y debido a la gran fuerza que tenía, caíste al piso algo lejos de ambos.
—Oh...mierda — murmuraste
Scorpion te miró, analizando si estabas bien, hasta que miró a Kano e hizo su posición de pelea.
—Vamos, vamos calaverita
🥀🥀🥀
Miraste a Kano, estaba recargado en un árbol muy adolorido. Tú aún estabas en piso, algo dolida.
—¿Te encuentras bien?
Scorpion se acercaba hacia ti hasta que se incó.
—Sí...sí...sólo que jamás me habían tocado de esa manera y debido a la fuerza que ustedes tienen...es algo que no puedo soportar al instante pero estoy bien...bien — trataste de sonreír un poco
Él se paró para después ofrecerte una mano, tú la aceptaste, pensando que todo sería normal, caminando...pero no, él te cargó, haciendo un movimiento muy rápido.
—Eres de la tierra, ahí son mucho más débiles que aquí — pausó para después empezar a caminar — además...por alguna extraña razón, cuando tocaste mi brazo hace unos instantes... sentí un poco de calidéz...algo que no he sentido en mucho tiempo
