La persona equivocada (Jinx)

Capítulo 20 (Final)

—Hola— sabía que era muy estúpido hablarle a una fotografía a través de un cristal. Colocó la rosa que llevaba consigo y miro sus ojos.

Ciertamente eran gemelos, pero sus miradas eran distintas; la de Kim Junseo era más pícara, con un toque de extroversión en la que sólo verle sonreír te hacía pasarla bien. La de Kim Dan era dulce, tierna y plagada de una timidez que despertaba en ti la curiosidad por saber más sobre él.

Ok... quizá solo era él pensando tonterías.

Lee Huyk llegaba tarde esa mañana, bueno no tan tarde, a lo mejor eran sólo diez minutos, pero demasiado tiempo para él que estaba impaciente por mirarlo.

—Explíquese Jaekyung ¿Qué significan 25 llamadas en un lapso de 20 minutos? — el fisioterapeuta le mostraba la lista de llamadas en su teléfono y él se echó a reír con intenciones de molestarlo.

—Llegas tarde. Tu papel aquí es importante, deberías estar antes que los demás.

Lee Huyk se le acercó y lo tomó por la oreja para hacer que se inclinará hasta su altura.

—¿Es consciente de que estuvimos hablando hasta las cuatro de la mañana? Quizá no lo sepa, pero existimos las personas que si dormimos.

—¿Qué con eso? ¿Estás admitiendo que llegas tarde porque te quedaste dormido?

—Sí.

—Muy mal Lee Huyuk, te bajaré el sueldo.

—Bien, entonces no volveré a hablar con usted en sus noches de desvelo, olvídese de eso.

—¿Qué? No te atreverías.

—Si me atrevería.

—No importa, no te sientas tan importante. Puedo estar sin llamarte.

—¿Apostamos?

—Sí.

—Ponga la cantidad.

—No te llamaré en 48 horas.

—Hecho— juntos estrecharon sus manos. Jaekyung confirmó por fin que algo se activaba dentro de él cuando estaba cerca de Lee Huyk, había memorizado su rostro, sus expresiones, sus reacciones y hasta su forma de caminar cuando se acercaba o se alejaba de él.

Le encantaba verlo sonreír por las tonterías que se decían y muy en el fondo es que ya se sentía perdedor, sabía que no sería capaz de no llamarlo dentro de ese lapso de tiempo.

Volvió a la realidad luego de un agradable recuerdo.

Kim Dan no era bromista como Lee Hyuk, pero siempre era gentil.

Kim Dan era más soñador y le gustaban las cursilerías. Kim Junseo era más aventurero y asumía riesgos.

Kim Junseo era atrevido y sinvergüenza. Kim Dan se sonrojaba por todo y temblaba ante el más mínimo acercamiento.

Pero mierda... ¿Por qué los comparaba? No fue para eso que fue hasta allí.

—No estuviste ahí, pero ese día regresé con el título. Había pensado en celebrar contigo y confesarte que me gustabas— puso su mano cerca de la fotografía imaginando que podía tocar su rostro—. Ojalá hubiéramos tenido más tiempo para conocernos mejor. Te habría entendido— no reconocía su propia voz llena de nostalgia y tristeza—. Me hubiera gustado estar más tiempo contigo Kim Junseo. Perdón por decirte Lee Hyuk todo el tiempo, debió ser horrible escuchar un nombre que no era el tuyo.