« Turquoise » [Itoshi Rin]

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El primer partido de debut del equipo femenino a cargo de Jinpachi Ego, se podría decir que fue un éxito; si no fuera porque el resultado del partido, por muy positivo que fuera, reflejaba el propio e individual fracaso de (T/N) como portera.

«2 a 1»

Eran sus compañeras de equipo las que ganaron el partido, ella por el contrario fue un fracaso.

El entrenador había sido contundente y la aplastó con sus increíbles palabras francas, tan cruel que no recordaba ni la mitad del discurso que él había dicho para ella, además de que cerró la conversación diciéndole que transforme esa frustración en egoísmo.

Ese un solo gol que entró al arco que ella debía de proteger, era su condena. Pero, ¿Realmente podría aplicar la filosofía del entrenador siendo portera?

No se le ocurría otra cosa más que compararse con Gagamaru Gin, ya que era quizás el único que sabría qué hacer. Como esperaba del portero, él soltó palabras simples: "Eres muy baja", "Te falta flexibilidad", "Tienes que comer mejor", junto con una invitación a ir a las montañas para entrenar y pelear con osos.

Tiró las pesas con rabia al suelo, el sudor goteando profusamente de su frente y se acostó en el suelo mirando el techo mientras se mordía el labio. (T/N) quería gritar. Ella comía bien, quizás no era flexible pero tampoco era una obligación serlo, y ella no era tan baja, era promedio, ese portero era más alto.

─── ¿Qué es esa cara de muerta?───Ann se inclinó hacia ella con un tono divertido en la voz───Tienes ojeras, ¿estás tratando de competir con Rin?

───Cállate───respondió (T/N) jadeando con cansancio.

─── ¡Hasta respondes igual que él!

───No me estás animando con nada───se quejó la (c/c), sentándose en el suelo, estirando su brazo para alcanzar su botella de agua.

───Es que ya no sé que decirte───Ann negó con la cabeza, sentándose frente a la contraria───... Dejá de preocuparte por ese partido, ganamos, eso es lo importante.

───Ustedes ganaron. Yo no pude detener un tiro───soltando un gruñido, (T/N) volvió a levantarse para continuar a la siguiente máquina del gimnasio.

───Solo fue uno───Ann decidió seguir de cerca a su compañera, cuidando que no se lastimara───. Por cada uno, nosotras meteremos otros dos goles. Es así como funciona, ¿No?

───...No sé que hacer───la (c/c) se dejó caer en el asiento de la máquina que iba a usar, cubriendo su rostro con ambas manos con desesperación───. Los consejos de delanteros no me sirven, y Gagamaru-senpai solo me dice que tengo que agarrar al oso por el cuello.

───Según mi propio criterio, no necesitas más fuerza, solo flexibilidad, poder de salto y reacción───la contraria contó con los dedos para luego sonreír comprensiva───. Recuerda que también practico gimnasia, creo que puedo ayudarte en esas cosas.