"Plan y guía"

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Comenzaba la temporada húmeda del otoño.
Llovía a cántaros bajo la ciudad, un ambiente frío y apagado, no era un día muy motivado.
El tráfico y las calles amenazaban a (T/N). La antigua infraestructura de la ciudad debilitaba los hogares, goteras de aquí y charcos de acá... era estresante.

(T/N) llegó como pudo y a la hora que pudo, miraba a su alrededor mientras acomodaba su paraguas, había baldes en ciertos lugares acompañados con carteles de "¡Cuidado! Piso humedo".

"parece que aquí también sufren de goteras."

(T/N) sin más, decidió apresurar su paso, no quería perder más tiempo de lo que perdió afuera.

El sonido agudo del ascensor retumbo el departamento. (T/N) caminaba con apuro a si escritorio. Desde lo lejos escuchó quejas y regaños, ella se alarmó. Cuando se acercó más notó una pequeña escena cómica. Almond y algunos compañeros más intentaban atrapar a un pequeño felino que corría y saltaba en círculos dentro de la sala.

–¡(T/N)! ¡ayúdanos en atraparlo por favor!– decía Almond desesperado.

(T/N) hizo caso sin pensarlo. Bruscamente tiró su chaqueta y bolso al ver correr el gato a su dirección, se posicionó para atraparlo.
Sin cuidado, agarró al gato haciendo que este reaccionará feo intentando arañarla.

–¿¡Qué hace un gato aquí!?– lo alejaba de ella para que no le lastime su cara.

Almond suspira, con una pequeña toalla se acerca al gato y lo envuelve, intentando calmarlo. Estaba mojado.

–Ella es mi gata... bueno, no mía directamente. Es algo callejera, viene por comida o comodidad– Almond con suavidad seca al gato.
–Había llegado una vez aquí como si nada a la oficina, mis compañeros me pedían adoptarla ya que venía a menudo y bueno... se quedó– le sonrió a la minina.

(T/N) había visto antes a ese gato negro... se parecía mucho a la de esa mañana en el cruce.

–No sabía que este gato... bueno, gata era tuya y que le gustaban los gatos.

Almond al terminar de secar el negro pelaje del gato, lo tomó y le comenzó a acariciar las orejas.

–¿La habías visto antes?– miró a (T/N).

–Me había cruzado con ella una vez que iba en la calle, se había subido a mi hombro y me siguió hasta llegar aquí.

–Bueno, es callejera, la mayor parte del día se la pasa afuera, por eso te la haz encontrado. En las noches viene a dormir aquí.

La gata ronronea.

–Y claro, me gustan los gatos... me gustan hasta que llegan mojados a tu oficina y te manchan todo tu trabajo– habló enojado enseñándole a (T/N) todo el papeleo firmados con barro unas lindas huellitas. Ella rió.

–¿Y como se llama? Ya que el gato es de ustedes...– preguntó (T/N).

–Bien...– Almond quiso decirlo pero se calló antes de pensar en cómo reaccionaría.
(T/N) esperaba la respuesta con una ingenua sonrisa. Hubo silencio.
–La llamé "Costable Whiskers"...— le susurró a (T/N) con una matiz de vergüenza.

–¿Constable Whiskers? ¿"Alguacil Bigotes"?

(T/N) comenzó a reír, Almond estaba ocultando su rostro de un color rojo tomate e hirviendo de vergüenza. En el momento del nombramiento del gato, no tenía nada en mente... así que los compañeros de Almond le dieron uno que le pegue al escenario donde surgió.

–Muy bien, (T/N), ¿trabajaras o me tendré que quejar de tu actitud con el capitán?– miró de perfil a la mujer.

–Lo siento.

🌹; Acompañante policíaca  [Almond Cookie x lector]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora