Pasión peligrosa

Capítulo 13: El Secuestro

Becky se despidió de Freen con un tierno beso antes de salir con su tía para hacer las compras de comida. La mañana parecía tranquila y normal, sin indicios de lo que estaba a punto de suceder. No sabía que ese sería el último beso que compartiría con Freen ese día.

Becky y su tía caminaban juntas hacia el mercado. El sol brillaba en el cielo y el bullicio del mercado se acercaba a medida que se adentraban entre los puestos de verduras. La tía de Becky decidió plantear una pregunta que había estado en su mente.

"Becky", comenzó con delicadeza, "he notado cómo te miras cuando estás con Freen. ¿Estás enamorada de ella?"

Becky bajó la mirada brevemente, un ligero rubor coloreando sus mejillas antes de alzar la vista y encontrarse con la mirada de su tía. "Sí, tía, lo estoy. Freen es increíble, y siento que mi vida ha cambiado desde que ella llegó a ella".

La tía de Becky sonrió con ternura, reconociendo la sinceridad en las palabras de su sobrina. "Eso es hermoso, querida. El amor puede ser un regalo maravilloso. Y aunque las circunstancias sean difíciles ahora, recuerda que siempre estaré aquí para apoyarte a ti y a Freen".

Becky asintió con gratitud, sintiéndose afortunada de tener a su tía a su lado.

Becky sacó su teléfono y marcó el número de Freen mientras ella y su tía llegaban al mercado. El teléfono sonó unas cuantas veces antes de que Freen finalmente respondiera.

"Freen, solo quería avisarte que llegamos al mercado y estamos bien", dijo Becky con un tono de tranquilidad en su voz.

Freen suspiró aliviada al escuchar la voz de Becky. "Gracias por llamarme, cariño. Asegúrate de mantener tu teléfono cerca. Te amo".

Becky sonrió, sintiendo el amor en las palabras de Freen. "Yo también te amo, amor. Nos vemos pronto".

Con esas palabras, Becky colgó el teléfono y continuó su camino por el mercado junto a su tía, sin saber que su vida daría un giro inesperado en cuestión de minutos.

Becky y su tía decidieron hacer una breve parada en un puesto de comida antes de comenzar sus compras en el mercado. El aroma tentador de los platos locales llenaba el aire mientras se acercaban al puesto.

"¿Qué te parece si comemos algo antes de empezar a hacer las compras?", sugirió Becky a su tía.

Su tía asintió con una sonrisa. "Suena como una excelente idea. Este lugar huele delicioso".

Se acercaron al puesto y observaron el menú, lleno de opciones tentadoras. Becky hizo su pedido y, poco después, estuvieron disfrutando de los sabores locales mientras compartían una conversación amigable. Era un momento tranquilo y agradable antes de continuar con sus tareas en el mercado.

Después de disfrutar de su comida en el puesto local, Becky y su tía comenzaron a recorrer el mercado. El bullicio del lugar, lleno de puestos coloridos y vendedores animados, los envolvía mientras buscaban los productos que necesitaban para su hogar.

Becky revisaba con atención la lista de compras que habían hecho juntas, asegurándose de no olvidar ningún artículo importante. Mientras tanto, su tía exploraba los puestos de verduras y frutas frescas, seleccionando cuidadosamente los mejores productos.

A medida que avanzaban por los pasillos del mercado, se sumergieron en la vida cotidiana de la comunidad local. Conversaban con los amigables vendedores y se detenían ocasionalmente para admirar artesanías locales y productos únicos. Era un día soleado y alegre, y Becky y su tía disfrutaban de su tiempo juntas.

Sin embargo, en medio de la multitud y la animación del mercado, no eran conscientes de que alguien los observaba de cerca, reconoció a Becky como la acompañante que había estado con Freen, la noche de la persecución. No perdió tiempo y contactó a su jefe para informarle sobre su descubrimiento.