Pasión peligrosa

Capítulo 17: Inglaterra

Freen y Becky finalmente habían llegado a Inglaterra, donde comenzarían su vida juntas en un lugar completamente nuevo. La emoción llenaba el aire mientras desempacaban sus maletas en la casa que solía ser el hogar de Becky.

Becky miró a su alrededor, sintiéndose como si estuviera en un sueño. "Freen, no puedo creer que estemos aquí. Esto es increíble."

Freen sonrió y se acercó a abrazar a Becky. "Es real, cariño. Estamos aquí juntas, listas para comenzar una nueva aventura."

Las primeras semanas en Inglaterra fueron un torbellino de emociones y adaptación. Becky ayudó a Freen a conocer su nuevo entorno, desde las calles locales hasta las costumbres británicas. Comenzaron a establecer su rutina diaria, encontrando su lugar en la comunidad y planificando su boda, que sería el próximo gran paso en su vida juntas.

Cada día era un nuevo descubrimiento y una oportunidad para fortalecer su relación. Pasearon por parques pintorescos, visitaron museos llenos de historia y saborearon la comida inglesa en acogedores pubs. Cada experiencia compartida fortalecía su amor y les recordaba por qué habían tomado esta decisión.

Una noche, mientras estaban acurrucadas en el sofá de su nuevo hogar, Becky miró a Freen con una sonrisa. "Freen, no importa dónde estemos, siempre estaremos juntas, ¿verdad?"

Freen asintió y acarició la mejilla de Becky con ternura. "Siempre, mi amor. Juntas enfrentaremos cualquier cosa que la vida nos presente."

Mientras, Freen y Becky se acomodaban en el sofá después de un largo día de ajustes en su nueva vida en Inglaterra, encendieron la televisión en busca de algo relajante para ver. La luz tenue de la sala creaba un ambiente cálido y acogedor, y ambas se sentían cansadas pero felices.

Se quedaron mirando la pantalla durante un rato, pero pronto se dieron cuenta de que sus pensamientos estaban en otro lugar. Sus manos se encontraron y sus dedos se entrelazaron de forma natural. No necesitaban palabras para expresar lo que sentían el uno por el otro.

Freen acercó lentamente su rostro al de Becky, sus ojos se encontraron en un instante, llenos de amor y deseo. Se besaron con ternura, como si cada beso fuera una promesa de amor eterno. Sus labios se movieron juntos con suavidad y pasión contenida.

El beso se intensificó gradualmente, pero siempre manteniendo un delicado equilibrio entre el deseo y la ternura. Sus manos exploraron los contornos de sus cuerpos, pero no se apresuraron. Querían saborear cada momento, cada caricia.

Becky acarició suavemente el cabello de Freen mientras sus labios se movían en perfecta armonía. Se sentían conectadas de una manera profunda y especial, como si sus almas se hubieran encontrado en medio de la pasión.

Después de un rato, se separaron, sus frentes apoyadas una contra la otra. Sus respiraciones eran entrecortadas, y sus ojos brillaban con el reflejo de las emociones que habían compartido.

Freen susurró con voz suave pero cargada de amor: "Eres lo mejor que me ha pasado, Becky. No puedo imaginar mi vida sin ti."

Becky sonrió con ternura y le dio un suave beso en los labios. "Y yo no quiero imaginar mi vida sin ti, Freen. Eres mi todo."

Se abrazaron, fundiéndose en el calor y la pasión de su amor, sabiendo que estaban juntas en este nuevo capítulo de sus vidas en Inglaterra. Cada momento compartido reafirmaba su compromiso y su deseo de construir un futuro juntas.

Freen se despertó temprano, sintiéndose emocionada y decidida a hacer de ese día un momento especial para Becky. Hoy era el primer día de trabajo de su amada en el hospital, y quería asegurarse de que comenzara el día con una sonrisa.

Con cuidado, Freen se levantó de la cama sin despertar a Becky, quien aún dormía profundamente. Se deslizó en su bata y se dirigió a la cocina, donde empezó a preparar el desayuno. El aroma de café recién hecho llenó la casa mientras Freen preparaba una taza de café y luego se enfocaba en hacer unos deliciosos panqueques.

Mientras los panqueques se cocinaban en la sartén, Freen no pudo evitar sonreír ante la idea de sorprender a Becky. Sabía que estos pequeños gestos eran importantes en una relación y quería demostrarle a Becky cuánto significaba para ella.

Cuando los panqueques estuvieron listos, Freen los dispuso en un plato y los cubrió con una generosa porción de frutas frescas y jarabe de arce. También preparó una nota cariñosa y la colocó junto al desayuno. La nota decía: "¡Buena suerte en tu primer día de trabajo, amor! Estoy tan orgullosa de ti. Te amo con todo mi corazón. - Freen"

Con el desayuno preparado y la nota en su lugar, Freen regresó sigilosamente a la habitación donde Becky aún dormía. Se inclinó suavemente sobre la cama y depositó un beso tierno en la mejilla de Becky, despertándola con cariño.

Becky parpadeó, abriendo los ojos lentamente, y una sonrisa iluminó su rostro cuando vio a Freen junto a ella. "Buenos días, amor."

Freen le devolvió la sonrisa y acarició suavemente el rostro de Becky. "Buenos días, cariño. Tengo una sorpresa para ti."

Becky se incorporó en la cama, intrigada, y siguió a Freen a la cocina. Cuando vio la mesa preparada con el delicioso desayuno y la nota, sus ojos se llenaron de emoción.

"Oh, Freen, esto es increíble", exclamó Becky mientras abrazaba a su amada. "Eres tan dulce. Gracias."

Freen la abrazó con cariño y le susurró al oído: "Siempre estaré aquí para apoyarte, Becky. Hoy es tu día, y estoy segura de que harás un trabajo increíble en el hospital."

Becky se sintió profundamente conmovida por el gesto de Freen y tomó su mano. "Gracias por ser la razón de mi sonrisa, Freen. Eres mi inspiración."

Comieron juntas, compartiendo risas y conversación antes de que Becky se dirigiera al hospital para su primer día de trabajo. Becky estaba nerviosa y emocionada mientras se preparaba para su primer día de trabajo en el prestigioso Hospital St. Clair. Se miró en el espejo, ajustando su ropa y asegurándose de que todo estuviera perfecto.

Freen la observaba con admiración, sintiendo un profundo orgullo por su prometida. "Estás impresionante, Becky. El hospital está a punto de ganar a la mejor médico."

Becky sonrió, agradecida por el apoyo de Freen. "Gracias, cariño. Tu amor y apoyo significan el mundo para mí."

Cuando estaban a punto de salir de casa, Freen notó un cartel en la calle que llamó su atención. Decía "Vacante: Guardia de Seguridad - Hospital St. Clair". Freen se detuvo y lo miró por un momento, pensando en la oportunidad que tenía frente a ella.

"¿Qué pasa, Freen?" preguntó Becky, notando la expresión pensativa en el rostro de su prometida.

Freen la miró con determinación. "Becky, ve tú al hospital. Yo me quedaré aquí por un momento."

Becky asintió, sin entender completamente lo que estaba pasando, pero confiando en la decisión de Freen. "Está bien, te veo más tarde en casa."

Después de despedirse con un beso, Freen se apresuró a tomar el cartel del anuncio y se dirigió al hospital. Había decidido aprovechar la oportunidad de postularse para el trabajo de guardia de seguridad en el mismo lugar donde Becky trabajaba. Era una manera de estar cerca de su prometida y apoyarla.

El primer día de Becky en el hospital fue un éxito, y cuando regresó a casa, encontró a Freen esperándola con una sonrisa. Freen había conseguido la entrevista para el puesto de guardia de seguridad, y ambas compartieron su emoción por la posibilidad de trabajar juntas en el mismo lugar.

El destino había dado un giro inesperado en su nueva vida en Inglaterra, pero estaban dispuestas a enfrentar este nuevo desafío juntas, fortaleciendo aún más su relación mientras construían su futuro.

Una disculpa por la demora.. ❤️