¿Me dijo te quiero?

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Capítulo 14 - Me dijo te quiero?

Martín frunció el ceño a mi pregunta -Si, Houston ¿Por?

-Yo...

-Hola -exclamo adormitada- ¿Qué haces?

-¿Eres de Houston? -pregunte rápidamente- ósea... viviste allá.

-Si -asintió sentándose sobre la cama- ¿Por qué la... ¿Tu? -frunció el ceño

-¿Habitación seis? -pregunte con ansias.

-¿David Brown? -el brillo en sus ojos me convenció, era aquella pequeña pelirroja que cuidaba de mi en los días difíciles de mi niñez.

-Si -mis ojos se humedecieron y la abrace de inmediato, aquella pelirroja de ojos claros había salvado mi vida un par de veces.

-¿Martín? ¿Qué haces aquí?

-Yo lo invite... espero que no te moleste -volví a colocar el juego.

-Ella me ama, jamás se molestaría -respondió en picardía.

-Quisieras tú que yo te amara -rio tomando el tercer control que quedaba libre- también quiero jugar -Lince se sentó al lado de Martín iniciando el juego.

-Perderás rápido no sabes jugar -ríe junto a Lince.

-Perderás tu idiota- desconecté mi control y reí junto a ellos.

-Esta bien, esta bien iré a dormir -subí a la cama y tomé mi celular para revisar mis redes sociales mientras ambos jugaban entre risas, mis ojos se cerraron mientras una sonrisa se formaba en mi rostro.

***

Estábamos en clase de arquitectura, el profesor nos estaba explicando referente a su puente y dándonos consejos sobre como realizarlo mediante un vídeo, estaba distraído intentando formar el cubo Rubik.

-¿Es divertido no? Quiere pasar al frente a mostrarnos como se hace -me sorprendí al ver al profe a mi lado con su mano estirada hacia el cubo de mis manos, el cual tuve que entregar- espero su puente sea el mejor señor Ainsworth.

-Disculpe profesor, no se volverá a repetir -el profesor asintió dejando el cubo sobre la mesa.

-Lo retira al salir... como les decía...

***

-¿Hoy si iras a entrenar? -termino por preguntar Lince cerrando su casillero.

-Si hoy... -jale a Alice del brazo contrayéndola contra mi- tenemos que hablar -Aly asintió lentamente dejando a sus compañeras caminar al frente- nos vemos ahorita.

-¿Qué quieres ahora? Mi madre me ha castigado casi que de por vida -exclamo fastidiada.

-¿Es cierto?

-¿De que hablas? -frunció el ceño.

-La prueba ¿estas embarazada? ¿De verdad?

-No inventes Benjamín ¿eres idiota? -fruncí el ceño ante su pregunta- obvio no imbécil, solo me había estado sintiendo mal y quise descartar ¿La verdad me crees tan estúpida? Dejé la prueba sobre el mostrador de mi recamara y mi madre lo ha conseguido es todo -me sentí aliviado, como si un peso de encima me hubiera quitado.

-Demonios Alice, me habías asustado.

-¿Ya me puedo ir? -llevo mi mano hacia mi frente mientras asiento.

-Si como sea esta bien, adiós... -tome mi celular para escribirle a Martín era la mejor noticia que había escuchado, escuchaba el teléfono vibrar en mi oreja mientras caminaba por el pasillo de la institución.

Aprendiendo a no amarte ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora