Un lazo inquebrantable [Omegaverse] [Ballister X Ambrosius]

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Nimona se levantó de su cama si se podía llamar así, se acercó a un calendario el cual había robado del mercado, ese día marcaba su sexto mes en la gran torre, la pelirosa sonrió al escuchar ruido abajo sabia que era Ballister así que se transformó en un ratón para darle un susto, pero al acercarse a este se arrepintió, si lo asustaba de más podía irse y dejarla sola, la chica estaba encerrada en sus pensamientos hasta que escucho un suspiro pesado, al alzar vio al moreno tallando sus ojos los cuales tenían lágrimas, además de que su olor denotaba tristeza, la chica salió de la torre y regreso a su forma humana antes de recostarse en el pasto 

"¿Qué le pasa?, ¿acaso no está feliz por tener la mejor secuaz del mundo?" Pensó antes de levantarse con una sonrisa en su rostro, tenía la idea perfecta para que el omega se sintiera en casa, sin pensarlo mucho se transformó en un caballo y galopo hacia el bosque

Ballister buscaba a Nimona, sin embargo, no la encontró, así que supuso que había salido y empezó a darle una limpieza al hogar de a pelirosa, el moreno se dejó caer en el sofá una vez termino, empezaba a sentir de a poco el cansancio cuando escucho a alguien tocar la puerta

—¿A dónde fuiste?—Pregunto una vez vio a la chica tras la puerta

—¿Te estás preocupando por mí?—Nimona miro de forma pizpireta a Ballister

—Solo tenía curiosidad—La mirada de la chica se volvió un puchero, Ballister al verla sintió su corazón latir

"¿En serio ella era un monstruo?, solo se ve como una cachorra" Pensó antes de regalarle una sonrisa y dejarla pasar, Nimona le regreso la sonrisa antes de correr a gran velocidad, Ballister al reaccionar vio varias cajas en la mesa dejándolo sorprendido

—¿Qué es todo esto?—

—Descúbrelo—Ballister trago saliva y se acercó a las cajas con cuidado, al abrirlas su miedo desapareció y de inmediato corrió a abrazar a la pequeña, la cual solo daba golpes leves para que el omega la soltara

—Gracias—Dijo el moreno en un hilo de voz para apretar el abrazo, si bien no le gustaba tener contacto físico con las personas y en especial con un monstruo que él ya no consideraba como tal, lo hizo al ver que la chica se preocupó por el 

—Si sé que soy genial—La chica se transformó en una lagartija para sacarse de los brazos del moreno para después volver a su forma humana—Puedes buscar un lugar para ponerlas—La chica se acercó a las cajas para ver con más detalle las cosas que había robado de la habitación que tenía su jefe en el instituto, aunque eran de su jefe así que no era robo 

Nimona se alejó de las cajas al sentir un olor a menta y chocolate amargo, rápidamente quito varias cajas de encima hasta llegar a la que desprendía el olor y al abrirla el asco recorrió su cuerpo, sin embargo, tras su exagerada actuación vio como el moreno acariciaba el oso de peluche que desprendía el olor como si fuera su pertenencia más preciada, la pequeña comprendió todo y rodó los ojos era el olor del alfa del que su jefe se había enamorado, Ballister noto un olor a Toronjil así que de despego del oso y miro a la chica

Aún tenía dudas de que era realmente, el día anterior tenía un olor a vinagre y ahora este había cambiado otra vez, pero ya no tenía tanto miedo hacia ella, el moreno acerco el oso a la chica, la cual gruño de inmediato mostrando sus colmillos así que lo alejo

"Está protegiendo su territorio" Pensó mientras recordaba que en una de sus clases le habían explicado que los alfas son muy sobre protectores con sus familiares, parejas y territorio, tenía que pedirle permiso a Nimona de tener el objeto dentro de su hogar

El omega pidió la autorización de la alfa para poder mantener el objeto dentro de su territorio y después de unas horas logro que esta se acostumbrara al olor del rubio y volviera a estar tranquila