Un lazo inquebrantable [Omegaverse] [Ballister X Ambrosius]

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Nimona fue la primera en despertar, pero se levantó de forma rápida al ver la posición en la que está quitando la mano robótica de Ballister que la mantenía junto a él, la chica solo miro al moreno, se sentía bien, se sentía en casa, pero también tenía miedo de perder otro hogar, tanto fue su miedo que salió rápidamente del lugar

Ballister despertó momentos después de que la chica desapareciera, bostezo antes de voltear a ver a la omega, la cual seguía placidamente dormida, la mujer se movió un poco y sonrió, parecía tener un buen sueño porque las feromonas de felicidad eran evidentes, Ballister la movió levemente pero parecía no despertar

—Dormilona, despierta—Bianca sonrió al escuchar el susurro de Ballister antes de levantarse con cuidado—¿Qué quieres de desayunar?—Le pregunto el moreno mientras doblaba las mantas que había dejado Nimona, Bianca bostezo antes de buscar a la pelirosa con la mirada, Ballister lo noto—No está, a veces sale a dar paseos mañaneros aunque me preocupa que se meta en algún problema—

—Veo que te preocupas mucho por ella, no es por querer incomodarte Ball, pero... tú y Nimona parecen padre e hija—Ballister rio no se veía teniendo hijos, pero para ser sincero su vida había dado un giro de 180 grados y en sus planes futuros veía a Nimona con él—¿La adoptarías?—La pregunta tomo por sorpresa al omega, sin embargo, su interior se emocionó ante la idea pidiendo que dijera que si

—No lo sé, es algo complicado...—Ballister dejo las mantas ya dobladas en el sillón—En mi situación actual está en peligro solo por conocerme, no quiero imaginarme que pasaría si la adopto y alguien se enterará y la pierdo también a ella... y no me malinterpretes, no me gustaría que algo te pasara a ti o a los que me ayudan, pero es, es...—Bianca se acercó y atrapo en un abrazo al omega dejándolo sin palabras

—Entiendo tus temores Ball, pero todo va a estar bien—Ballister correspondió el abrazo, ambos omegas permanecieron así por unos momentos hasta que cierta pelirosa entro por la puerta

—Dejen los sentimentalismos para después, ¿¡vieron las noticias!?—La chica se lanzó al sillón y tomo el control para encender la pantalla, la atención se basaba en las protestas que algunos miembros de reino estaban montando por el audio donde la directora confesaba que ella había intentando matar al rey, al oír todos los movimientos de la gente Ballister sonrió y sintió como una gran carga desaparecía de sus hombros, pero eso le duro poco, el programa fue interrumpido por un mensaje del instituto donde aparecía el rey a lado de la directora

"Ciudadanos de mi amado reino, todo lo que circula en internet relacionado con la directora no es más que un engaño por parte del villano Trabuco Negroni, la directora es incapaz de hacer algo por el estilo y lo digo yo que la conozco de años, este hombre solo quiere causar pánico entre nosotros mismos para dar sus golpes más duros, ahora me dirijo a ti Trabuco, tu vida criminal ha terminado, nos vemos en la horca" Ballister se sintió terrible al ver que arriesgar de cierta forma a Nimona no había funcionado

—Ball, hay que irnos, seguramente rastrearon el lugar desde donde publicaste el video, deben estar cerca para asegurarte que serias atrapado—El moreno no escucho a la omega y se llevó las manos a la cabeza para tirar un poco de su cabello, sin embargo, se viste se nubló llevo sus dedos a los ojos pensando que eran lágrimas—¡Ballister!—Fue el grito que escucho salir de la omega antes de desplomarse por completo

Ballister abrió los ojos de forma lenta para acostumbrarse a la luz, todo su cuerpo le dolía rápidamente, cerro los ojos al sentir una linterna apuntándole, Bianca al ver que ya había reaccionado apago la lámpara

—Mierda Ball, nos asustaste—Ballister se levantó de forma rápida, pero al no tener fuerzas fue fácil para la omega volver a tumbarlo—No te muevas, quédate quieto—El moreno bufo—¿Por qué no has comido bien?—Ballister desvío la mirada de la omega lo había descubierto—Vamos, tienes que comer—

—Perdón, la preocupación no me deja comer, a veces tampoco puedo dormir—Confeso el moreno mientras se llevaba sus manos a la cabeza por el dolor punzante que tenía en esta

—Ten toma esto, Nimona fue a comprarlas mientras yo te despertaba—Ballister miro las pastillas y luego saco una para tomarla de forma rápida—Tardara en calmar el dolor, ¿puedes levantarte?—Ballister se sentó con mucho cuidado y luego se levantó me fue rápidamente ayudado por la omega y Nimona, ya que iba a volver a caer

El omega fue regañado por la omega, la cual no se fue del lugar hasta que Ballister comiera suficiente, y por primera vez Nimona no puso primero el desastre y las aventuras y obligo a su jefe a tomar una siesta

Mientras tanto en el reino Ambrosius jugaba con sus dedos, estaba completamente nervioso al haber escuchado el audio que se subió a la red, si Ballister se había atrevido a crear algo falso para exponer a la directora que podía esperar de él, podía decirle a todo el reino sobre lo falso que era en cuanto a su sexualidad y eso lo aterraba, esos pensamientos desaparecieron al ver entrar a su futura esposa muy sonriente

—Veo que la pasaste muy bien, no llegaste anoche—Bianca sonrió nerviosa, pensó que Ambrosius no iba a llegar esa noche a dormir como era costumbre

—Pues me divertí—

—Me alegra, ¿cuándo lo conozco?—La pregunta erizo la piel de la omega

—Creo que es mejor estar así, sin que sepas quién es—La chica se puso aún más nerviosa al sentir el cuerpo de Ambrosius aún lado suyo, muy cerca

—¿Por qué no?—Insistió el rubio

—Porque no Ambrosius, por ahora no, mientras no salgamos de manera seria, no te lo voy a presentar—Bianca se separó, tenía que fingir que ya no tenía interés en el alfa para que este creyera su farsa

—¿Seria?, no llegaste a dormir anoche, dormiste en su casa o hicieron quién sabe que cosa y no quieres que lo conozca—

—¡Dije que no Ambrosius!—El alfa se sorprendió, era de las pocas veces que la omega le levantaba la voz—Me voy a tomar un baño—Bianca salió de la habitación que compartía con el rubio antes de tocar su corazón, el cual palpitaba a altas velocidades

"Cálmate, cálmate, cálmate" Era lo que se decía a sí misma, Ambrosius no la siguió, ya que aún seguía con ese temor, había atado cuerdas sobre el nuevo héroe y se dio cuenta de que este podía ser Ballister así que tomo su teléfono y desde una cuenta diferente, escribió el número listo para mandar un mensaje

"¡Hola!, vi tu perfil y si te soy sincero te me hiciste alguien muy atractivo, me gustaría pasar una noche contigo"

Ambrosius trago saliva antes de dar al botón de enviar, al hacerlo lanzo el celular lejos se estaba arriesgando mucho

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Holaa.

Aquí el cap de hoy.

¿Qué les pareció?

Cuidensen, chao.