MIRADOR (Jairo Vera x Jere Klein)

Epílogo: MIRADOR

- "Y...¡listo, terminamos por hoy!", le escuchó decir a uno de los tantos técnicos en sonido que estaban metidos en el estudio trabajando a altas horas de la madrugada, mientras el resto de la gente aplaudía por otro posible palo que va a estar sonando en múltiples discos y radios de diferentes partes. Sin embargo, no era lo que le interesaba en ese preciso momento.

Revisó su celular para ver la hora: 3:42am de un día jueves siete de septiembre del 2023, y sentía cómo, a pasos agigantados, se acercaban las Fiestas Patrias.

Había adquirido - como si fuese una especie de herencia - hacía varias semanas atrás la mala costumbre, a su juicio, de revisar constantemente la hora en su celular, pese a tener su Rolex con el que le sería mucho más sencillo confirmar qué hora era.
Por un momento, y disociándose del ambiente de trabajo en el que se encontraba, pensó en que se venían días difíciles y largos: pronto iba a iniciar el proceso de grabación de su disco 'ÉNFASIS', por lo que tenía que ir mentalizándose positivamente que iba a estar un buen tiempo con la mente ocupada entre el estudio y las sesiones fotográficas. Eso, sin contar la idea de que prácticamente todas sus canciones iban a tener videos, por lo que se venía más que pesado. Guardó su celular, no sin antes arreglarse uno de los grandes anillos que tenía en su mano derecha.

- "¿Te vai a tu casa o a carretear?", le preguntó uno de ellos, colocándole el brazo por detrás de sus hombros, cuestión que incomodó internamente al artista, pero que prefirió dejar de lado para no arruinar el ambiente que se respiraba, "hay una junta con-

- "Ahi 'toy viendo que sale", atinó a responderle de forma tajante al técnico sonidista para que no le siguiera preguntando, apartándose de él y de la cabina del estudio para salir un rato a tomar aire y fumar el resto de blunt que le había quedado. Si bien, le tenían permitido fumar adentro, necesitaba un tiempo a solas, más que mal, el aire lo sentía denso y pasado más a cigarro que a mota; para ello, debía de subir dos pisos por unas pequeñas escaleras del edificio a fin de llegar a la terraza. Al ingresar a aquella zona relativamente descuidada del establecimiento, notó el súbito cambio de temperatura que había en el estudio en contraste con la sensación térmica que imperaba aquella noche, pero el poder respirar aire un poco más impoluto que en el que estuvo por horas le era acogedor.

Sacó su encendedor Zippo que le habían regalado a cambio de un par de canjes hacia años atrás para prender el blunt que tenía en uno de los bolsillos de su bomber Lacoste, y en el momento en que estaba dándole la primera piteada, sonó un tono de notificación que le permitía diferenciarlo de los otros mensajes que llegaban a su celular, lo que hizo que dejara en el delgado barandal de la terraza aquello que estaba fumando para revisar rápidamente su celular mientras su corazón palpitaba con fuerza.

Sonrió al ver el emisor de la notificación y su foto de perfil, por lo que desbloqueó su celular sin pensarlo dos veces para ver de forma más detenida el mensaje que le había llegado:

"caigo en cinco, sale a la esquina"

Con el celular en mano y cerrando su bomber, dejó lo que le quedaba de blunt en la terraza y bajó con extrema rapidez hasta el estudio, en donde, además de despedirse de todos los presentes aún en la sala, le dijo en el oído a uno de sus representantes con quien tenía un poco más de comunicación que iba saliendo y que no volvería sino hasta el día siguiente. Éste simplemente asintió con la cabeza, pidiéndole que estuviera atento a su celular por cualquier cosa que se necesitara corregir a ultimo minuto antes del preestreno de la canción, y bajó hasta salir a la calle, colocándose la capucha de su bomber blanca y caminando a la esquina de siempre hasta que vio un Mercedes estacionado y con las luces intermitentes.