9. Mejores Amigos. pt. 9

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Shui y Yami nse encontraban hablando muy animadamente, y a pesar de que Naly notaba que era del trabajo a exponer, no podía dejar de mirarlos. ¿Acaso Shui la superó así de fácil? ¿Acaso no tenía corazón? ¿No la quería? ¿Acaso no la extrañaba como ella a él? ¿Lloró por ella?

El timbre del colegio indicó el inicio al primer receso, ¿ya habían pasado dos horas de química? Mierda, quizás estaba un poco obsesionada...

— Shui, espera. – Escuchó Naly a lo lejos, esa era la voz irritante de Yami.

— Dime. – Se giró Shui a mirarla antes de cruzar la puerta para salir a comprar algo.

— Te veo mañana en mi casa, prefiero terminar este trabajo lo antes posible y presentarlo. – Le sonrió levemente la chica mientras se acercaba a Shui.

— Bien, mándame un mensaje con la dirección, yo estaré ahí. – Le sonrió y saludó con la manos antes de girarse y caminar hasta cruzar la puerta.

Naly se quedó observando a la chica y se asqueó al ver sus acciones. La chica se encontraba totalmente sonrojada mirando en dirección donde se encontraba Shui. Hasta podía ver como se mordía el labio inferior.

— Maldita. – Mencionó Naly para retirarse del aula y caminar hasta la cafetería, en cierta parte por tener hambre, y en otra para poder observar a Shui.

Al llegar buscó con la mirada entre la gente y se paralizó al verlo. Estaba agarrado de la mano con un chico, ¿un chico? ¿Y ese quién era? En su vida lo había visto... ¿Estaba en pareja? ¿Estaba en pareja con alguien que no era ella? ¿No que le había dicho que no quería por no gustarle estarlo? Acaso... ¿Le mintió?

Los ojos de Naly se llenaron de lágrimas y salió corriendo de la cafetería con dirección al baño.

— Fui una tonta, yo nunca le gusté... Nunca... ¿Por qué creí en él? – Lloraba descontroladamente. Rascaba sus brazos con desesperación, hasta sintió como la piel comenzaba a arderle. Sus uñas estaban hundiéndose en su brazo de tanta fricción.
Lentamente comenzó a sangrar, además de haber abierto las heridas que su madre con tanto cariño curó esa mañana.

Con sangre y todo siguió rascando. Siguió lastimando sus brazos, infectando heridas... El baño poco a poco comenzaba a mancharse más y más de sangre. Lamentablemente una de las heridas que tenía Naly en sus brazos era lo suficiente profunda como para dejar un pequeño charco de sangre sobre el piso, causando gran pérdida de sangre y seguido a eso un desmayo por parte de ella.

Pasó ahí horas, no despertaba, pues el sangrado seguía. Y si no fuera por Shui, nadie la encontraba.

— ¡Naly! – Gritó asustado y un poco aliviado de encontrar a su mejor amiga, pero no en ese estado. — Dios... Naly, ¿qué hiciste? – Estaba lo suficientemente asustado y preocupado como para soltar lágrimas. Llorar no resolvería nada. — Fueron dos meses...

La profesora que se encontraba con Shui rápidamente llamó a la ambulancia, la cual llegó en 15 minuto. 15 minutos donde el chico constantemente revisaba el pulso de la pobre chica, por suerte nunca se fue.

Rápidamente se llevaron a la chica al hospital, Shui y la profesora acompañándola.

— ¿Tienes idea qué pudo haberle pasado? Hace mucho no viene y el primer día que aparece termina así...

— La verdad... No tengo idea, profesora... – Soltó un suspiro tratando de relajar su ansiedad. – Tuvimos un par de problemas... Amorosos... Y decidimos que lo mejor era separarnos para... Superar nuestros sentimientos... Pero la verdad tengo idea porqué terminó así... – Su voz sonaba temblorosa.

one shots largos/cortos ns de Naly y shuiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora