𝓹𝓸𝓻 𝓯𝓪 𝓷𝓸 𝓽𝓮 𝓿𝓪𝔂𝓪𝓼... [𝓙𝓾𝓪𝓷 𝓟𝓪𝓫𝓵𝓸 𝓥𝓲𝓵𝓵𝓪𝓶𝓲𝓵]

Capitulo 10

Había planeado en hacer una fiesta. Una fiesta de amigos y para el resto de compañeros. Estaba arreglando unos últimos arreglos de la fiesta.

- Espero que todo salga estupendo esta noche, Víctor.- Dijo su hermana bastante nerviosa.- ¿Estas seguro de que Villa no estará esta noche con Lily?

- Estoy seguro que no estarán, pequeña.- Le doy un beso en la frente y recibe a los invitados.

Baje las escaleras, lo vi ahí parado en la puerta solo, bueno con Martin y le dedicó una sonrisa y me dirigí hacia el jardín a saludar al resto.

- No pensé verte en la fiesta, Villamil.- Le dije seriamente mirando las estrellas sin mirarle.- Pensé que saldrías con Lily...

- Sí, pero esta con su prima ahora.- Responde el, detrás de ella.- Y bueno me aburría y me dijeron que había una fiesta de último año.

- Joder, las noticias vuelan rápido, ¿Cómo pudiste entrar si no te envíe la invitación?

- Tengo mis contactos, Katia.- Le respondió, acercándose a ella. Acarició la panza de Katia, de su bebé también.- ¿Ya sabes el sexo del bebe, Katia?

- La verdad...- Le mire por unos segundos.- Serán mellizos, es decir, niño y niña.- Caminé por el jardín, donde no hubiera bastante ruido.

- ¿Mellizos? - Se sorprendió riéndose.- Y, ¿Como vas hacer para cuidarlos, Katia?

Ella se giró y se cruzó de brazos.- Bueno eso a ti no te importa.- Negué con la cabeza.- Bueno, que disfrutes de la fiesta, Villamil.

La fiesta fue un éxito la verdad.

[...]
Víctor estaría de viaje con Lidia y Sia por Europa, Nath se iría a Mexico con Simón por unos días. Solo quedaba yo en España mirando que podría hacer en esos días, papá tendría conciertos en esos días.

- ¿Para que me llamabas, Villamil? - Le abrí la puerta de mi casa.- ¿Que necesitas?

- Necesitaba saber si harías algo estas vacaciones.- Respondió mientras entraba en la casa.- Para invitarte a dar una vuelta...

- Y, ¿Donde esta Lily? - Le pregunté bastante curiosa.- ¿Que buscas, Villamil?

Villamil estaba mirándome con una sonrisa, me abrazó tiernamente. Bastante confuso la verdad.- Lily, esta con su familia en Colombia, fue a pasar unos días allá.- Le comenta.

No sabía la razón del motivo que Villamil me abrazara. No se que mosca le habría picado pero actuaba bastante raro ahora.

Le ofrecí algo de tomar y comer y fuimos a ver la televisión. Estaba incómoda, estar con mi ex en mi casa viendo una película.

- ¿Te sientes incómoda, Katia? - Le mira a sus ojos suspirando.- ¿Verdad?

- Bueno, siendo sincera...- Le mire también y asentí.- Sí, si me siento algo incomoda, Villamil.-Se levanta del sofá mirándole aún.

- No quería incomodarte Katia.- Le dijo mientras pausaba la película.- Solo que te extraño mucho.

- No, no empieces por ahí Villa.- Le mire desconcentrada y negando con la cabeza.- Sabes cómo terminaría esto...

Acaricie mi panza no tan notoria, pero me sentía más relajada cuando acariciaba al pequeño bebé.

- Katia, por favor...- Villa hizo que le mirara por unos segundos a sus ojos.- Debemos de llevarnos bien de alguna manera, dentro de 6 meses seremos padres de un hermoso niño.

- Y lo sé pero ahora no puedo llevarme bien con usted.- Le mire a sus ojos, unos ojos que dentro de poco iban a ser aguados por mis lágrimas.- No ahora después de haberme sido infiel y dejarme de una manera bastante fea...- Ella se levantó del sofá, le indicó la salida para que se fuera.

- ¡Por favor, dame otra oportunidad! - Le quité las lágrimas al quedarme frente suyo.- Déjame demostrarte que puedo cambiar, ¡por favor!

- Villamil, ¿A quien quieres engañar? - Ella dice y rueda sus ojos.- Ambos sabemos que tú no cambiarías ni por quien sea.- Negué con la cabeza.- Lily y tú hacen una bonita pareja, Villamil.- Le abrí la puerta para que pudiera irse.

Él la cerró y se negó en irse así que se sienta en el sofá mirándola. Quería hacerla feliz y que viera que si realmente podía y quería cambiar por ella.

- No puedo creer que me lo hagas más difícil de lo que es, Villamil.- Trago saliva y me marche a mi habitación, teniendo un poco de ansiedad me senté en mi cama para poder intentar tranquilizarme.- ¡VILLA! ¡Villa, por favor ven rápido! - Entró a mi habitación, se dio cuenta de la situación que estaba teniendo y me ayudó.

[...]
Álvaro Soler reunió a sus dos hijos en casa para tener una cena con ellos. Un silencio bastante incómodo para los tres ya que no tenían tema de conversación. Álvaro sabía que su hija estaba embarazada pero igual como su hija le dijo, no se iba a emprometerse en la vida de su hija, personal. Si es que ella me lo pidiera o le ayudara.

- Y, ¿qué carrera vas hacer Katia, después de que tu bebé nazca? - Le preguntó su padre en la mesa y la mira a los ojos.- O, ¿no quieres seguir estudiando?

- Sí papá, seguiré estudiando...- Le respondí mientras estaba comiendo mi arroz.- Estudiaré medicina. Lo malo es que Sia debe repetir año...

- Pero Katia, lo bueno es que la universidad y la preparatoria están juntas y pueden verse todos los días.- Dijo mi hermano con una sonrisa.

Lydia la hija pequeña de Víctor y de Sia iba creciendo. Ya iba casi a cumplir el año dentro de unos cuantos meses.

- Le tengo miedo a la universidad...- Suspire un poco y me rasque la nuca.

- Es normal, pequeña.- Le comento su hermano mayor.- Se que la universidad es algo nuevo para ti, ahora más ya que estás embarazada, Katia...- Le cogió la mano a su hermana.- Además no estarás sola, yo estaré este año en la universidad, será mi último año pero estaré contigo.

Ella sonríe al escuchar que su hermano puede terminar su último año en la universidad. Así no estaría sola, desde que Alex y ella lo dejaron y después de lo que pasó con Villamil, no sabía con quien más juntarse.

Nath seguiría estudiando en otro proyecto en Madrid junto a Simón. Isaza estaría aquí con Marto en la universidad haciendo un Máster. Y Villamil viajaría con Lydia.

[...]
- No, no papá! - Gritó su hija y bajo las escaleras lanzándole folletos de un psicólogo.- ¡No iré a un psicólogo! ¡No estoy loca, papá!

- Hija, ¡por favor, es por nuestro bien! - Le miró acercándose a su hija.- ¡Nuestra relación tiene que mejorar!

- Pero yo no quiero que mejore, papá...- Le dije sinceramente suspire.- No puedo perdonarte y hacer como si no hubiera pasado nada.- Le solté sus manos y me fui a dar una vuelta.- ¡ALEX! - Lo miré sorprendida al no verlo después de varios meses y fui corriendo hacia él para darle un abrazo.- ¡JODER, NO PUEDO CREERLO! - No deje de abrazarlo, lo había extrañado mucho la verdad.

- ¡Pequeña! - Le recibe el abrazo con alegría y le da un beso en su mejilla.- ¿Como has estado? ¡Te extrañe, joder!

- Bien, bueno podría decir que bien pero la verdad... ¡NO! - Le negué con la cabeza y no quería hablar del tema, lo invité a tomar algo.- ¡Yo también te extrañe, dios mío!

Entran al Strabucks...